𝗟𝗼𝘃𝗲 𝗜𝗻 𝗚𝗮𝗺𝗲; Shuntaro Chishiya

𝟏𝟐| 𝚂𝚎𝚗𝚝𝚒𝚛 𝚗𝚘𝚜 𝚑𝚊𝚌𝚎 𝚖𝚊́𝚜 𝚍𝚎́𝚋𝚒𝚕𝚎𝚜

Kuina rápidamente fue hacia su amigo, se dejó caer al suelo para quedar a su altura, tomó su mano y enseguida empezó a limpiarla, no le importaba si su manos también quedaban cubiertas de sangre

—Deberían tomar agua, están demasiado pálidos—Usagi sacó una botella de la bolsa que habían salvado y les extendió una botella a la vista

Miku lo tomó, apenas pudo tomar un sorbo, no tenía fuerzas mientras que Chishiya trataba de contener la furia que llevaba dentro. Una vez más se culpaba por no haber cuidado lo suficientemente a la pelinegra pero no podía regresar el tiempo si eso deseaba

Estaba molesto con sí mismo, lleno de rabia y rencor con el. Al contrario de Miku que estaba agradecida por haberla protegido, para ella era suficiente

—Será mejor que nos vayamos de aquí, antes de que anochezca—Añadió Arisu

Ann ayudó a levantar a Miku quien aún le sangraba la pierna, pero antes de ponerse a caminar le ató con una prenda que la misma Ann corto de su camisa para que así detuviera el sangrado. Chishiya aún no podía decir nada, volvía esa imagen del sujeto tratando de aprovecharse de Miku, ni siquiera podía mirarla a la cara

Después de un rato oscureció, sé refugiaron debajo de un puente, hacia frío y nuevamente todo estaba en silencio. Solo se escuchaba el viento y algunos grillos que andaban por las áreas verdes, Miku sudaba con la herida que tenía la estaba pasando fatal, estaba por darle temperatura. Usagi trataba de encender una fogata mientras que Arisu le ayudaba. Kuina y Ann habían ido a buscar algún botiquín para tratar las heridas de sus amigos

En ese instante Chishiya por fin levantó la mirada y la miró, estaba temblando y tenía la frente mojada, los labios demasiados pálidos y resecos, se quitó la sudadera blanca y no lo pensó dos veces, fue a su lado y la tapo al mismo tiempo que la abrazo con sus brazos para mantenerla en calor. Ella lo miró y dibujó una pequeña sonrisa en sus labios

Mientras que Arisu los miraba con atención, se preguntaba si ellos estaban saliendo o algo así, hasta Usagi le metió un golpe por las costillas

—Concéntrate en la fogata—susurro Usagi
—Si lo siento—Asintió apenado, dibujo una pequeña sonrisa en sus labios

A el rubio no le importaba si Miku lo quería lejos de ella, solo quería estar con ella y hacerle saber que todo estaría bien, ni siquiera importaba la indiferencia de ambos, se querían eso estaba claro. El amor que ambos se tenían era torpe. Enseguida llegaron Kuina y Ann, durante su búsqueda tuvieron un poco de suerte. Kuina desinfecto los nudillos de su amigo con alcohol quien no pudo evitar quejarse al sentir el ardor al terminar los vendo. Lo mismo hizo Ann con Miku

Acercaron sus cuerpos contra la fogata para que se calentarán, ninguno decía nada hasta que la voz de Arisu hizo presencia

—¿En qué momento planearon todo?—Todos los presentes lo miraron y sonrieron burlones—¿Que es tan gracioso?—añadió
—A Veces no sé si te haces o eres—Dijo Ann
—No lo entiendo—
—No lo planeamos, solo sucedió—Usagi lo miró con ojos de ternura

Arisu frunció el ceño, seguía sin entender hasta que Usagi lo empujó suavemente y le explicó cómo habían sucedido las cosas. Chishiya seguía abrazando a Miku quien ya parecía mucho mejor, terminaron por dormirse todos completamente hasta que amaneciera

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Llevaba junto a él un arma que había escondido en un lugar cercano, su corazón estaba lleno de odio y abandono, se sentía solitario. Mal decía cada segundo de su vida en este mundo, mal decía a Chishiya con todas sus ganas. Niragi se encontraban debajo de un local, con la mirada en la arma, jugando con el seguro de esta