¿Te gustan las historias sobrenaturales? esta es tu historia, llena de aventura, acción, terror, drama, romance, enredos, etc.
En un pequeño pueblo llamado Newport de Rhode Island, un joven llamado Joseph se encuentra en el bosque una noche con sus...
Al día siguiente, Joseph despertó con una sonrisa tan grande en el rostro, seguía sin creer que hubiera recibido un beso en los labios de la chica más linda en la escuela, al momento de tomar una ducha sonaba la voz más desafinada cantando la canción "Love Me Like You Do" de "Ellie Goulding", Joseph salió de la ducha tan relajado y sonriente, se sentía muy enamorado, al momento de bajar por las escaleras iba tarareando la misma canción, mientras bajaba, Candice y Harry se asomaron al oír el tarareo, Joseph se estaba preparando para hacerce un desayuno relleno de amor, Heron y Tamara salieron del cuarto de huéspedes, Candice y Harry bajaban uniéndose a las miradas de Heron y Tamara, los cuatro lo miraban con una cara de sorpresa, confusión, burla disfrazada y de intentar entender el porque estaba así. Cuando Lisa despertó, se preparó para irse a trabajar, salió de su habitación dirigiendose al de su hijo, pero al momento de abrir la puerta, se dió cuenta que la cama ya estaba tendida y ordenada, pensó que su hijo no había dormido en toda la noche, en la cocina todos seguían viendo a Joseph jugando con la cuchara como si fuera un micrófono, Lisa al ver al pequeña fila de personas que se encontraba en la entrada de la cocina tan atentos, decidió entrar por en medio y de igual forma miró a su hijo con sorpresa y confundida, pero Harry rápidamente dijo; "Joseph está enamorado", está frase captó la atención de Joseph y dejo de hacer lo que estaba haciendo por voltear, estaba confundido y todos solamente sonrieron y se sentráron a la mesa.
En casa de los Scar's, Dawn estaba despertando pero no estaba en la sala, sino en su habitación, era algo extraño, pues ella no recordaba haberse levantado del comedor y dirigirse a su cuarto, quizá Grey la había llevado hasta ahí, mientras dormía, eso significaba que Grey ya había despertado. Salió de su cuarto, bajando por las escaleras, dió un mal paso y tropezó, apunto de caer al suelo, Grey la detuvo en sus brazos antes de que se diera un golpe;
- ¿Estás bien, no te lastimaste? - Preguntó Grey preocupado, - ¡Si! Estoy bien, gracias por detenerme - respondió Dawn con una sonrisa en el rostro, - ¡Que bueno!, Tienes que tener más cuidado en como bajas las escaleras, porque... quién sabe... tal vez a la otra no esté aquí para detenerte. - - Si claro, por supuesto, tendré más cuidado, ya verás - La cara de Dawn se iluminó con una sonrisa, mientras que caía una lágrima de su rostro, - ¿Segura que estás bien? Te vez algo rara - Insistió Grey, - Si, seguro... es solo que... me alegra que estés bien - Grey la miró con ternura y fue hasta ella a darle un abrazo tan fuerte, como si no la uniera visto en mucho tiempo.
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Se acercaba la hora para ingresar a clases, y Joseph ya estaba preparando todo para irse listo a la escuela, quería ser mejor en la escuela y cumplir con su palabra de mejorar académicamente, y así, cuando terminó de alistarse, bajo con los demás, cómo siempre, Harry iba apurado, esperaba llegar más temprano está vez, se despidió de su sobrino, Candice y los huéspedes, y salió tan rápido que olvidó su portapapeles, así de rápido Heron tomó el portapapeles y se lo llevó a Harry antes de que comenzará a correr, Harry se rió de la vergüenza, pues esos papeles eran importantes, pues Rachel los necesitaba para unas entrevistas, se entretuvo dando la explicación, mientras que Heron lo interrumpió diciendo que se haría más tarde, Harry miró su reloj, y con más rapidez salió corriendo. Heron regreso a la casa, él ya estaba listo para ir a la escuela, Joseph también estaba listo, mientras que Candice bajaba algo desarregláda, pues no portaba un atuendo adecuado para el colegio, era un estilo algo rebelde, pantalones rotos, blusa pequeña mostrando el ombligo, camisa de cuadros amarrada por arriba de su estómago, muy poco maquillaje, cabello suelto y una boina negra, sin contar sobre los accesorios que tenía puestos, una pulsera con unos piquitos plateados y unos collares de cordón, estaba lista. Candice y Heron esperaron afuera, mientras que Joseph y Tamara hablaban sobre que ella ya había recuperado su fuerza y podía regresar con Joe, Joseph creía que no era buena idea, pero aún así accedió. Cerrando la casa con llave los cuatro se separaron, Tamara dirigiendose por un lado y Joseph, Candice y Heron, por otro.
