Capítulo 19.

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Absolutamente casi todas las bodas son iguales ¿Cierto o no? La mía con Jackson hace cinco años también lo fue claro que sí....bueno hay que reconocer que alguna vez hay alguna boda original de estas que todo el mundo tiene que ir disfrazado de medievales o de estas que se celebran bajo el mar....pero estas no abundan demasiado no vamos a negarlo.

Pero la boda de los "chicos" como los llama Abi de "naranja" qué por cierto menos mal que es amiga íntima de la pareja sino miedo me da plantearme cómo los nombraría, es la típica boda convencional, asiática pero convencional.

La parte seria, la religiosa, la del cura y todo eso ha ido bien, sin problemas. Yo la verdad no he estado muy atenta a lo que ese hombre vestido de riguroso negro decía pues he tenido mis ojos clavados en ella todo el rato. Daniela se encontraba sentada junto a su marido un banco por delante de mí, podía ver su perfecta espalda, su maravilloso cabello castaño, podía ver cómo Johan intentaba cogerla de la mano de vez en cuando y cómo ella lo evitaba.

He de confesaros que en esos momentos, en ver cómo Daniela rechazaba sutilmente coger la mano de su marido una sonrisa salía de mis labios....una sonrisa satisfactoria con un punto de soberbia.

El caso es que Lucía y Daniel están con el fotógrafo profesional haciéndose cientos de fotos para el reportaje de su boda por los increíbles jardines con los que cuenta el hotel que han escogido para el convite. Todos los invitados nos encontramos haciendo el aperitivo mientras esperamos pacientemente la hora de comer.

No he podido acercarme a Daniela en ningún momento. Bueno rectifico. No he podido estar a solas con ella en ningún momento. Siempre rodeadas de una u otra. Siempre. Nos hemos ido mirando todo el rato, nos hemos casi gastado con la mirada,a veces la coincidíamos, a veces me pillaba ella a mí mirándola, a veces yo a ella....pero ni una sola palabra. Ni una. Estoy perdida y confusa.

Por un instante me separo del súper grupo de amigas de Lucia incluida Daniela para irme a la barra a pedirme algo. Tengo sed o puede que no pero viendo el día tan largo que se me va hacer casi prefiero ir medio borracha desde el principio. Jackson se encuentra en la parte de chicos, habla con una cerveza en la mano junto a Johan, el mohicano Will y otros tantos.

Me encuentro en la barra para pedir, por un segundo medito si me pido algo flojito sin mucha graduación tipo Martini o parecido o por el contrario me pido algo fuerte...!Qué diablos!

-Póngame un vodka seco, sin hielo por favor, solo vodka...-Le pido al camarero que no puede evitar mirarme en plan "esta es la alcohólica de la familia" ja!ja ja! supongo que si yo en mi trabajo "descifro rápido" a los pasajeros cagones él hace lo mismo con los invitados borrachines. Cada uno su especialidad.

Noto una presencia tras de mí mientras espero al camarero ¿Es ella? ¿Es mi Danieka que ha venido en busca mía? Me giro para mirar y flipo.

No.

Es Johan y viene solo.

Mierda.

Presiento que no voy a pasar un buen rato, ojalá pudiera rectificar y pedirle al camarero "un vodka DOBLE sin hielo" para pasar ese momento.

-Hola MaríaJosé...-Me nombra con una sonrisa tímida.

-Ey Johan...hola -Actúo como si me agradara verlo...hecho un rápido vistazo para ver si Daniela nos mira...y efectivamente nos está viendo.

-¿Estás guapísima sabes? -Me piropea y con eso no puedo evitar pensar que algo quiere.

-Gracias...tú también estás muy guapo Johan.... -Le respondomintiendo por supuesto.

-Tú y yo nunca charlamos a solas Majo...¿Todo bien? -Me pregunta. ¿Todo bien? ¡Los huevos todo bien! ¡Todo mal! ¡Todo cien por cien mal! -Si si si...todo bien... ¿Ocurre algo Johan? -Indago ya porque no quiero estar haciendo el pamplinas ni un minuto más!

Guardaré Mi Libertad | Adaptación Caché | TerminadaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora