capitulo 6 "Corazón roto"

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El día de ayer fue un desastre total y se podía notar por mi cara, tenía unas ojeras horribles por no dormir casi en la noche, además mis ojos estaban hinchados de tanto llorar. Aunque no quisiera ir a trabajar tenía que hacerlo, que mi vida fuera un desastre no era justificación suficiente para faltar.

En mis audífonos estaba sonando Mic drop de BTS, escuchaba música para tratar de animarme, si escuchaba música melancólica seguramente lloraría por décima vez en las últimas doce horas.

Termine de maquillarme para tapar mis ojeras, pocas veces me maquillaba para el trabajo pero hoy era una necesidad hacerlo. Cerré el estuche y me dispuse a colocarme los zapatos. Salí a la sala, con el bolso en el hombro, agarre mis llaves y salí de casa.

Entraba a trabajar a las ocho y eran las siete y media. Mi trabajo quedaba a 15 minutos así que iba a buena hora. De repente la música dejo de sonar y vi que tenía una llamada entrante de Zack, no sabía si contestarle o no, pues todo lo que pasó ayer fue demasiado fuerte, además de que seguramente quería hablar del beso y no era algo que me agradará hablar por teléfono.

Decidí no contestar y en su lugar le mandé un mensaje.

«Lo siento, no puedo responder. Voy camino al trabajo»

Si, es algo demasiado formal para mí gusto, pero no sabía cómo actuar con el después de ese beso.

Llegue al trabajo, saludé a las chicas y fue a llevar mi bolso al casillero. Revise mi teléfono para ver si Alex me había contestado pues le había escrito anoche, suspire pesadamente al ver que ni siquiera había visto el mensaje. Necesitaba hablar con el, aclarar las cosas bien, necesitaba que me perdonará.

Marta me dijo que ya podía recibir caja, y así empezó un día largo de trabajo.

....

Eran las 5:30 de la tarde, Yelitza estaba haciendo el café para quitarnos el sueño. Ella llegó con el café y fue cuando vimos que venía un señor súper molesto- ahora que Dios mio- el señor se acercó a la caja de Yelitza y empezó a reclamarle diciendo que le vendieron un medicamento que no era.

-ESTO NO FUE LO QUE YO PEDI, QUIERO QUE ME DEVUELVAN MI DINERO- Dios sus gritos seguro se escuchaban en toda la cuadra.

Yelitza trato de explicarle calmadamente que fue lo que sucedió y le preguntó quién le vendió el medicamento. Cabe destacar que en la farmacia trabajaba una pasante que era un poco parecida a mi y lo que sucedió fue que el señor me confundió con ella.

-¡FUE ELLA! LE DIJE CLARAMENTE QUE ERA MAR-TE-SIA, ¡NO ESTA MIERDA QUE ME VENDIO!- obviamente no me acordaba de haberlo atendido yo, por lo que deduje que fue Sandra quien lo atendió. Me acerque a la caja de Yelitza para poder hablar bien con el señor.

-Señor trate de calmarse-le dije- El medicamento que usted está buscando es el mismo que se le vendió, solo que la Martesia es un original y la chica que lo atendió le vendió el genérico, pero sigue siendo el mismo medicamento- trate de explicarle lo más calmada que pude, pues no estaba de ánimo para calarme a un viejo necio como él.

-LO MISMO, ¡COMO QUE LO MISMO! Y PORQUE DICES 'LA CHICA QUE SE LO VENDIO' SI FUISTE TU QUIEN ME LO VENDIO- dijo apuntandome con el dedo mientras le daba golpes al vidrio.

-Señor yo no sé lo vendí, fue la otra chica que estaba temprano conmigo pero ella ya se fue.

El viejo bufo, se parecía a un toro cuando hizo eso, gracias a Dios teníamos vidrios.

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