tell me i'm an angel ; frerard

entrada once: luchando para sobrevivir

han pasado dos semanas... dos semanas desde que mikey y yo huimos del infierno... catorce dolorosos días desde que vi el rostro de frank por última vez. tengo que creer que sigue vivo, porque si no lo hago, me romperé completamente.

justo cuando estaba apunto de perder toda esperanza, un milagro ocurrió... pero déjenme retroceder un poco...

las cosas no fueron fáciles para mikey y para mí, incluso con la ubicación de frank y sus provisiones, luchamos para evitar a los demonios que nos buscaban. ya que mikey seguía siendo un demonio de clase c no podía volverse invisible, así que volar durante el día era imposible, y nos vimos forzados a caminar la mayor parte del camino mientras que los que nos perseguían no tenían las mismas limitaciones.

exhaustos y hambrientos, nos escondimos en una granja vacía, en medio de un campo de maíz marchitado, y aunque quise seguir avanzando, mikey estaba cerca del colapso. cayó dormido instantáneamente en la única cama que había, mas yo no pude cerrar mis ojos.

sentí a un demonio acercarse a nosotros. nos había estado siguiendo todo el día, pero había guardado su presencia para mí. mikey no necesitaba otra preocupación en este momento, y no había otra cosa que pudiéramos hacer más que correr.

intenté adelantarlo lo más que pude, pero estaba empujando a mi hermano a su punto de quiebre, simplemente no pudimos ir más lejos por hoy, y ahora la delgada ventaja que habíamos ganado sobre nuestro rastreador se estaba reduciendo... él estaría aquí en tan sólo cinco minutos.

silenciosamente salí de la granja, presionando mi espalda contra la puerta de madera mientras buscaba en el cielo cualquier señal de nuestro perseguidor. no sabía lo que haría cuando estuviera aquí, ya que sólo un ángel podía matar un demonio, pero con algo de suerte podría herirlo lo suficiente para que mikey y yo tuviéramos tiempo de escapar.

mi pobre hermano... toda esta carrera le estuvo pasando la cuenta, y estuve preocupado de que no fuera capaz de seguir por mucho más tiempo, pero no teníamos otra opción...

finalmente pude ver un par de alas esqueléticas, y alargué mis garras en preparación. si pudiera arrancarle el corazón, o quitarle la cabeza, le tomaría preciadas horas regenerarse completamente, y para entonces, mikey y yo ya nos habríamos ido.

mi corazón revoloteaba como un pájaro atrapado contra mi caja torácica, y mi aliento salía en breves bocanadas. estaba aterrorizado de no poder sobrepasar a este demonio. si fallaba, seríamos devueltos a lucifer y torturados por la eternidad. no podía perder esta batalla, demasiado estaba en juego.

en una nube de polvo, el demonio aterrizó directamente frente a mí. no lo reconocí, pero eso no era sorpresa. exceptuando a bob, evité a todos en el infierno lo mejor que pude.

no intercambiamos palabras mientras nos mirábamos fijamente, esperando a ver quién daría el primer paso. optando por sorprenderlo, me agaché, luego salté hacia arriba, rastrillando el rostro del demonio con mis garras.

rugió con furia mientras la sangre fluía libremente por su rostro, y sentí como la familiar sed de sangre nublaba mi visión. ya no tenía miedo ni estaba intimidado, poder fluía por mis venas, y todo lo que conocía era el deseo de rasgar a este demonio en pedazos.

más rápido de lo que me pudo seguir, di la vuelta sobre su espalda y corté el lugar donde sus alas se unían a su columna vertebral. su rugido de agonía era música para mis oídos, y comencé a arrancar los arruinados huesos de su cuerpo. con su otra ala me lanzó lejos antes de retraer ambas de sus extremidades y quitarme mi principal ventaja en esta lucha.

sin inmutarme, intenté posicionarme detrás de él otra vez, ya que aún sangraba profusamente por la espalda, y si pudiera ensanchar la herida podría tener una oportunidad, pero subestimé su fuerza; ignorando su dolor, se las arregló para tomarme del brazo e inmovilizarme debajo de su voluminoso cuerpo.