Me perteneces, hermano.

"Loverboy."

Tras unos minutos de gritos ahogados, quejidos, golpes, insultos y el simple sonido del agua cayendo, Azulin finalmente salió del baño, estaba empapado, el agua de su cuerpo goteaba mojando poco a poco el suelo, estaba agitado después de haber abusado nuevamente de su hermano mayor, necesitaba recuperar fuerzas, así que aún estando solo con su camisa y bóxers puestos, bajó las escaleras para ir por un vaso de agua o quizá una fruta, pero al llegar a dicha habitación, tan solo vió a su padre de pie, mirando por la ventana fijamente, Azulin notó como el mayor tenía una botella de alcohol al lado de el, pero ninguno de los dos hizo ni dijo nada...el chico sin darle importancia tan solo fue por un vaso de agua, llenando este con cuidado de no regar nada, y del refrigerador sacó una manzana de un color rojo precioso, el chico estaba listo para subir las escaleras e irse a su habitación, pero la voz de su padre lo interrumpió.

—Azulin, ¿Te diste un baño?

—Nah, quizá lo haga más tarde.—Respondió de forma seca y desinteresada.

—¿Y en dónde está tu hermano?

—En el baño.—Dió una mordida a su manzana a la vez que veía como su padre se daba la vuelta lentamente para mirar a su hijo a los ojos, su padre se veía pálido y algo tembloroso, pero Azulin no mostró reacción alguna y dió otra mordida a su manzana.

—Al terminar, dile a tu hermano que limpie el piso...está todo mojado.—El mayor dió un trago largo a su botella, y una vez que la separó de sus labios, le sonrió a su hijo ligeramente.

El chico no dijo nada más, tan solo se dió la vuelta y subió las escaleras para ir a su habitación, se sentía ya más aliviado al por fin poder comer algo, una vez que pasó al lado de la puerta del baño escuchó unos sollozos, por lo que con bastante molestia le dió un golpe a la puerta del baño con su puño, este funcionó ya que de inmediato los sollozos cesaron...que molestia era tener un hermano como Gordi; el chico de cabellos azules llegó a su habitación y comenzó a desvestirse, se secó con una toalla para después poner su ropa húmeda en el borde de la ventana, así podría secarse en un rato...aún estando desnudo, Azulin se acostó en su cama y cerró los ojos por un momento, el clima estaba nublado, eso le agradaba ya que su habitación se sentía fresca y por ende, el también.
Debido a que solo estaba ahí, relajándose y pasando el rato, su mente empezó a divagar un poco...¿Por qué su madre quería más a Gordi? ¿Que tenía de especial ese imbécil? "Nada" Dijo el chico casi en un susurro, y es que bueno, su hermano era obeso, estúpido, llorón, inútil...nunca podía hacer nada bien, se excusaba de sus errores diciendo que "sufría de ansiedad" vaya marica; ¿Que tenía el que Azulin no tuviera? El era mucho mejor en todo, inteligente, apuesto, audaz, astuto...entonces, ¿Por qué su madre nunca lo amó? Perra maldita.

. . .

Gordi finalmente salió del baño, aterrorizado y con los ojos hinchados después de haber llorado tanto...fue casi corriendo a su habitación, una vez dentro cerró con rapidez y puso seguro a la puerta, cerró la ventana junto a la cortina y se sentó en el borde de su cama mientras que se abrazaba a sí mismo, pero inevitablemente terminó encajando sus uñas en sus brazos haciéndole sangrar conforme usaba más y más fuerza en su propia piel; le tomó al menos unos 15 minutos calmarse, todo gracias a sus ejercicios de respiración y por "hablar" con el cuadro de su difunta madre, ya con un poco más de tranquilidad y con los "ánimos" ligeramente más arriba, comenzó a vestirse, no se enfocaba mucho en su vestimenta, no era alguien vanidoso ni dedicado a la "moda", así que solo optó por usar una camiseta blanca y unos pants del mismo color, se puso unos tenis y comenzó a secarse el cabello con ayuda de su toalla y sus manos, pero unos golpes en su puerta lo hicieron tirar la toalla con miedo...se quedó en silencio mientras temblaba y miraba la puerta detenidamente, ¿Era Azulin? ¿Había vuelto? ¿Volvió por el? ¿Iba a lastimarlo así de nuevo? No, no, no, ya no quería más, no quería que lo tocará así de nuevo, ya no, le daba mucho asco cada que lo hacía...no podía salir nada más de su boca que puros jadeos de miedo, quería gritarle que se largara, que lo mataría si no lo dejaba en paz, pero el miedo lo invadía...