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*Narra Harry*
Estando con ella no me puedo controlar.
¿Me gusta? Si.
¿Me la follaría hasta quedarme sin fuerza? Claro.
¿La quiero? No.
Han sido muchos años viviendo con ella y, a ver, me empezó a gustar hace un par de años pero nunca tanto como para hacer lo que estamos haciendo últimamente.
Acerco mis manos a su cintura y las cruzo sobre esta, abrazándola y pegándola más a mi.
*Narra T/N*
Me revuelvo al sentir suaves jadeos haciéndome cosquillas en el cuello. Me revuelvo un poco pero me quedo estática en cuanto siento un bulto en mi entrepierna. Me estiro para mirar a Harry y susurro su nombre suavemente para despertarlo.
Se revolvió suavemente y se desesperezó.
-Harry, tienes un pequeño problema.
Mentira, era un gran problema. Grandísimo.
-Ay, mierda.
Acercó su mano a él y lo atrapó, apretándolo suavemente para aliviar el dolor.
-¿Necesitas ayuda?- pregunté con una sonrisa tonta.
-Por favor...- suplicó soltando todo el aire que tenía en los pulmones.
Me acerco para besarlo profundamente sintiéndome en la gloria.
¡Que bien besa!
Bajo poco a poco mi mano por su abdomen hasta llegar a su polla hinchada y palpitante. Mis besos bajan a compás por su cuello y cuando estoy chupando su oreja meto mi mano debajo de las sábanas para tocarlo directamente.
En ese momento la puerta sonó y Harry gruñó.
-¿Quien es?- dijo de muy mal humor.- Ya van dos veces que nos lo arruinan- susurró hacia mi.
Se dirige a la puerta poniéndose unos calzoncillos y al abrir la puerta se oye un jadeo de sorpresa. Me levanto de la cama para acercarme a ver quien es. Me envuelvo en la capa de Harry me aproximo a ellos.
En la puerta se encuentran Cho Chang y Harry, muy cerca el uno del otro.
-Oh- exclama Cho- hola T/N, no sabía que estabas.
-Tranquila,- digo con falsa amabilidad- de todas formas ya me iba.
-¡Genial! Entonces puedes venir conmigo a pasear, Harry. - dijo Cho sonriéndome con malicia.
Harry me miró de lado y yo volví a entrar a la habitación, segundos después salí de nuevo ya vestida y no me giré para mirarlos.
Si Cho quería con Harry yo puedo volver a hablar con Cedric, a fin de cuentas, si ella puede con é, yo puedo con el de Hufflepuff.
Como no tenía nada que hacer fui hasta la sala común de Hufflepuff a ver si Cedric estaba por allí.
Le hice cosquillas a la pera, como él me había enseñado pero antes de que pudiese entrar, Anna Abbot salió de ella. Iba acompañada de Neville.
-Anna, perdón, ¿has visto a Cedric?
-Si, está en el campo practicando para la temporada.
-¿Tan pronto? Aun queda un mes para el primer partido.
-Lo saben, pero quieren tener oportunidad de ganar la copa este año.
-Vale. ¡Muchas gracias!
Empecé a caminar hacia el campo y al llegar me senté apartada del grupo de niñas de segundo curso, babeando por Cedric y sus compañeros.; y lejos también de los chicos babosos mirando a las cazadoras del equipo, bueno, sobre todo a sus pechos.
Cedric estaba muy concentrado que no se dio cuenta de cuando llegué. Estuve cerca de media hora allí hasta que su entrenamiento acabó. Antes de que le diese tiempo a llegara los vestuarios yo ya estaba dentro, en su ducha. Si, cada jugador tiene asignada una ducha. Escuché como los jugadores se acercaban a las duchas y me apoyé en la pared.
En cuanto entró el primero, se giró y gritó: "Cedric, te reclaman."
Él entra con el ceño fruncido pero lo relaja en cuanto me ve.
-La reina de Slytherin, ¿que te trae por aquí?
-Sabes bien que.- entro a la cabina en donde está la ducha sonriendo.
Él me sigue y pronto estamos juntos dentro.
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LO SIENTO UN MONTÓN POR TARDAR TANTO, ES Q NO SABÍA QUE ESCRIBIR. Love,
O💗

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