Capítulo Tres
Escrito por: DarthPel
Beta' por: Freelancerofthe TriforceKeyblade
Número de palabras: 3,060
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Merlín, el mago de las flores, llegó a Londres a medianoche y apuntó con su bastón al suelo mientras una piedra de mármol aparecía en medio del patio de la iglesia, e incrustada en ella, una espada. Le dio una última mirada, el obispo llamaría al lord, y en el plazo de una semana todo el mundo estaría tratando de tirar por la espada, y convertirse en "Rey de Britannia".
Poco sabían. El futuro rey... Reina en realidad, ya había elegido por ellos. El mago se alejó desapareciendo en la noche. No escatimó una última mirada antes de desaparecer por completo, sin dejar testigos del supuesto milagro que se rumorearía por la mañana.
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Un matrimonio estaba sentado en la habitación de la esposa, uno de
los ocupantes, un adolescente rubio de cabello dorado y ojos azules, observaba a la otra ocupante, su esposa, una adolescente rubia más pálida y de cautivadores ojos verdes.
Naruto observó como Artoria intentaba acomodar su cabello en un apretado moño, lo que provocó que preguntara con curiosidad, "¿Qué estás haciendo?"
"Como sabes, al ser mujer, estoy en desventaja natural, Merlín profetizó un Rey no una Reina". Informa Artoria, "Así que me estoy disfrazando".
Naruto frunce el ceño y habla en señal de protesta, "Odio a los profetas y a la gente como él, Artoria, si tienes las agallas para trabajar por ello y nunca te rindes, puedes lograr lo que quieras. No deberías disfrazarte de lo que no eres sólo para complacer a los demás. Además, sería una pena que no vieran tu belleza natural".
La adolescente de ojos verdes se sonrojó y apartó la mirada al oír su primer cumplido, pero protestó débilmente: "Pero los señores no se aliarán conmigo si me presento como mujer...".
"Mentira, se tropezarán para apoyar tu causa. Y si desean oponerse a ti, bueno, al fin y al cabo soy un asesino profesional", afirma el rubio con un guiño.
"Bromeas Uzumaki", se burló el heredero de Pendragon, "Pero, si realmente piensas así. Entonces... me convertiré en Reina de Gran Bretaña".
"Bien, sé tú misma, no dejes que nadie te diga a quién necesitas".
"Gracias, Naruto."
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La ciudad de Londres bullía de actividad mientras campesinos y nobles por igual caminaban por las calles, era una semana enorme para la metrópoli, una piedra de mármol con una espada incrustada en ella apareció de la nada en la plaza de la iglesia, junto con la inscripción: "Quien saque esta espada de la piedra será coronado legítimamente Rey de Gran Bretaña".
El obispo de la iglesia había convocado a todos los que habían presenciado el milagro por la mañana en la catedral y celebró una misa, después de lo cual había alineado a los hombres y les hizo tratar de sacar la espada de la piedra.
Se corrió la voz y en una semana nobles, caballeros y campesinos de todo tipo habían viajado a la ciudad para intentar reclamar la espada para ellos y el trono de Gran Bretaña para sí mismos.
Niños y adultos hicieron quinielas por igual, e incluso algunas mujeres valientes habían intentado por todos los medios arrancar la espada de la piedra, pero ninguna lo consiguió.
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La Sombra de Artoria
AzioneFracasado, así lo habían etiquetado en su juventud, porque fracasaba en todo lo que hacía. Naruto cerró los ojos, mientras la vergüenza de su pasado pesaba en su alma. Fracasado, porque le había fallado a todo el mundo. ¿Le fallaría a ella también? ...
