Parte 5

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AQUI DONDE EL ENOJO SE HACE PRESENTE

Llévate a Bru — le dije a Elm — ponla a salvo. 

No Asher yo los pondré a salvo a los dos — dijo Elm, la luz que provenía del exterior incomodaba a la bestia haciendo que se cubriera los ojos con su mano izquierda, Elm se puso de pie y de su espalda sacó una escopeta, le disparó a la criatura y provocando que rugiera — lleva a Bru a la camioneta que está fuera y mandame refuerzos por favor, hazlo ya — yo quería quedarme a ayudar a Elm pero tenía que poner a Bru a salvo.

Esta bien eso haré, pero regresare a ayudarte — le conteste .

Noo, no regreses, yo y los demás nos encargaremos de este infeliz asqueroso así que ya vete.

Pero — no pude decir más

Hasloo — me interrumpió Elm

Salí de mi casa pero justo frente a mi puerta estaba estacionada la camioneta, lo pensaron muy bien para que la oscuridad no tuviera contacto con nadie, alguien abrió la puerta desde el interior y pude ver que era Sora Bellemore la esposa de Elm, ella tomó a Bru y la subió a la camioneta, la recostó en los asientos traseros mientras preguntaba dónde estaba Elm. 

Me dijo que viniera a la camioneta y pidiera refuerzos — le respondí mientras subía y me sentaba junto a Bru. 

Cuando subí a la camioneta Sora tomó vendas y más accesorios de enfermería para ayudar a Bru que aún seguía desmayada. 

Ya oyeron chicos — dijo Sora en voz alta  y 2 hombres salieron por la misma puerta de la camioneta por la que entré, tenían escopetas en mano y linternas en la cabeza, esas que son para minería, estaban bien armados. 

Ya estamos a salvo — le dije a Bru en voz baja y bese su frente — ella está herida por que no la protegía a tiempo — sentía el enojo nuevamente, mi sangre comenzaba a hervir — pero logré destrozarle la cabeza a esa cosa — al observar mis manos note que todas mis venas resaltaban demasiado, parecía como si se fueran a desprender de mis brazos. 

Asher tranquilo, ¿qué te está pasando? — me gritó Sora. 

Al escuchar a Sora reaccione y me tranquilize — ¿que?... No… No No se — estaba algo confundido. 

¿Te sientes bien? — me pregunto Sora. 

Si, si no fue nada — le respondí, note que ella me miraba extraño pero comenzó a ayudar a Bru con el vendaje y los demás accesorios. 

Escuchamos disparos dentro de mi casa y enseguida pude ver que Elm y los otros dos hombres corrieron a toda velocidad a la camioneta, Elm subió en la parte delantera, los otros 2 hombres subieron a la parte trasera, cerraron la puerta rápidamente y entonces Elm aceleró con demasiada rapidez que los neumáticos rechinaron en el pavimento. 

Cuál es su destino — les pregunté. 

Nos dirigimos a la parte que aún sigue iluminada por el sol  — me respondió Eml. 

Muchas gracias por detenerse Elm, nos salvaron la vida — le respondí con los ojos vidriosos, aún seguía pálido del miedo — me da mucha felicidad verlos. 

No te preocupes, yo haría todo por mi mejor amigo — me respondió Elm.

Qué le pasó a Bru  — me preguntó Sora. 

Se… desmayó del dolor, una de esas cosas la… la tomó con una de sus 3 lenguas — la voz se me cortaba cuando le respondí y no pude evitar derramar algunas lágrimas. 

Tranquilo, Asher ya casi llegamos y estaremos a salvo, verás que ya todo estará mejor y este infierno va a terminar — Elm siempre es muy positivo, él es el tipo de persona que le cae muy bien a todo mundo. 

Habían 3 linternas enormes sujetadas en el techo de la camioneta, 1 en dirección frontal, 1 en dirección a la derecha y la otra en dirección a la izquierda. 

Yo observaba todo alrededor, era todo un caos, todo estaba completamente en destrucción, autos volcados, edificios casi demolidos por completo, cuerpos por todas partes y más cosas que no quiero recordar, pero pude notar algo raro en medio de 2 edificios, una persona caminando normalmente hacia la carretera no echaba humo de su cuerpo y su piel era normal, creí que era parte de mi imaginación y me estaba volviendo loco. 

Y los monstruos — preguntó Elm, por alguna razón no se veían monstruos por ningún lado, esto es muy raro, eso era un punto a favor para nosotros. 

La oscuridad del eclipse Donde viven las historias. Descúbrelo ahora