Tres maestros de guadaña, una estudiante

204 20 6
                                    

- Narra Kid -

Han pasado los días y Kazuo ha venido a quedarse a dormir en casa de Caroline, por supuesto yo me he encargado de enseñarles lo básico para ser un maestro de guadaña. Pero a pesar de que fluyen bien sus movimientos y ataque, hay algo que sigue sin calzarme. Es como si no hubiera sintonía entre el alma de Caroline y Kazuo al momento de usarlo como guadaña. Como una película muda en blanco y negro, se pueden ver los movimiento y se entiende todo pero no se escucha.
-De nuevo- Dije de brazos cruzados mientras veía a Caroline tomar a Kazuo como arco y flecha.
Liz se encontraba limando sus uñas y Patty coloreando un cuaderno de dibujo sobre una mesa en el jardín.
-De nuevo- Dije con un rostro neutral mientras Kazuo volvía a su forma humana.
-Kid, hemos estado haciendo esto por horas ¿cuando podremos practicar la forma de pelea?- Preguntó la albina de coletas y sudadera gris con falda rosa pastel y zapatillas blancas.
- Es cierto Kid-sensei, es ridículo seguir haciendo esto.- Dijo Kazuo suspirando de cansancio.
-Deben aprender a estar listos en el momento del ataque, en cualquier emergencia pueden atacarlos por la espalda y deben actuar en el momento.- Respondí aun de brazos cruzados.
-Ya estamos listos.- Reclamó Cari- chan.
Vi con desafío a ambos por dos segundos, y en cosa de momentos troné los dedos y Patty y Liz se volvieron un par de armas. Y en un solo movimiento confundiéndolos con la nube de polvo que se creó, los apunté a ambos en la nuca para aterrorizarlos.
-Si disparo ahora... ¿Que harían? -Dije con una mirada desafiante.
Ellos quedaron en un completo silencio, sin mover un solo musculo.
Baje mis guadañas y volvieron a ser las hermanas Thompson.
- De nuevo.- Dije poniendo mis manos en los bolsillos.
Estuvieron así hasta el atardecer, una y otra vez sin descanso. Tomé el diario y me dispuse a leer.
-De nuevo.- Dije dejándolos de ver por cinco segundos.
De pronto dejé de escucharlos.
-¿Me escucha...?- No pude terminar la frase, no estaban.
estaba vacío el jardín.
De pronto sentí el filo de la flecha rozar mi cabello desde atrás. Sabía que era ella, solo sonreí.

-Ya están listos.

Ella bajó su guadaña y con una pequeña risa, Cari-chan dijo:
-Eso quería escuchar.

A la mañana siguiente...

- Muy bien, hemos progresado... ya hemos visto, la sincronía de almas, el fluido del movimiento, la transformación a guadaña y la conexión de almas.- Dije sin apuro.- Ahora veremos la forma de ataque.

-¿Eso significa que...?- Dijo la albina con grandes ojos.

-Asi es, hora de la pelea.- Respondi.

Ambos guadaña y master se miraron con una gran sonrisa entre dientes.

-Traje algo de compañía para que los ayude, Cari tu ya los conoces. Kazuo, te presento a Maka, Soul, Tsubaki y Black Star.

Tsubaki saludo con una pequeña reverencia educadamente, y Maka alzó la mano con una sonrisa.- Que hay? -Saludo Soul con una ligera sonrisa mostrando sus afilados colmillos aun con las manos en los bolsillos.

-¿Alguien ha visto a Black Star?- Preguntó Maka.

De pronto todo oscureció y un reflector mostró a Black Star sobre el arbol de cerezo de Caroline.

-¡¡Damas y caballeros, me presento!! ¡¡Soy el gran, unico, valiente, fuerte e inigualable Black Star!!- Tras decir esto el dio un gran salto cayendo con una voltereta doble y aterrizar de pie con una engreida sonrisa. Y todo volvio a estar claro.

-¡¡¿Como coño hiciste para poner un reflector en el patio y en pleno día?!!- Exclamó Soul.

-Soy el magnifico Black Star, todo lugar es mi escenario.

Soul Eater: Luna SimetricaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora