cap 69

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Lucas

ya eran pasada las once y media de la noche, me encontraba en la oficina, bastante enojado, bastante agotado, no iba a volver a casa hasta que ariana se comunique conmigo dándome la dirección del lugar en el cual iba a cenar con ese tal Jack, siempre que pienso en el, simplemente mi paciencia se agota y mi humor cambia,
paso las manos por mis muslos, mis manos, que cada vez que las aprieto en forma de puño y hago algún tipo de fuerza, mis venas se marcan y se notan a lo largo de todo mi brazo, ahora mismo me puedo dar cuenta de ese detalle a través de mis brazos descubiertos porque estoy con la camisa arremangada hasta los codos y se que si mi mujer estaría acá no podría dejar de verlos,
empiezo a caminar hasta llegar a uno de los gran ventanales de vidrio de mi oficina en el que me permite observar gran parte de la ciudad,
toco los bolsillos de mi pantalón buscando un cigarrillo, algún dulce o cualquier cosa que me distraiga un poco, no encuentro nada más que un preservativo, que siempre tengo en mi bolsillo porque conociéndonos podemos follar en algún lugar, la imagen de ella se viene a mi cabeza y me entra un calor en todo el cuerpo cuando pienso solo en ella y como hoy a la mañana estaba durmiendo desnuda y su espalda y trasero se rozaban con mi parte delantera del cuerpo, tanto como mi torso y mi miembro, frotó mis manos en busca de mi celular y le mandó un mensaje para ver si ya está libre, lo cual me dice que no y me envía una foto con una amiga de ella diciéndome que se la encontró en el restaurante y que tomaría una copa de vino con ella y en cuanto termine me llamaría, dejo el celular sobre la mesa de vidrio y me siento frente a esta, mis dedos se mueven solos en la pantalla de mi celular y entran a la galería de fotos, en el cual me encuentro con fotos de mis niños junto a ari, paso a otra carpeta la cual me pide una clave para poder entrar, ahí me encuentro con un montón de videos, mío, nuestros o de ella, en nuestros momentos más íntimos en los cuales ella se graba tocandose para mí o como también encuentro videos míos haciéndolo, lo disfrutamos, lo sé, y eso aumenta nuestra tensión sexual, en el trabajo o también en casa y otros lugares, mis ojos se van directamente al video que me envió ella hace unos pocos días en el cual lentamente se saca la lencería roja de encaje, que le compre por nuestro aniversario la semana anterior, sus pechos quedan al aire y hace que mi miembro empiece a activarse y mi boca se quede sin saliva, mi mano izquierda baila junto al cinto y luego al botón de mi pantalón, ansioso me lo saco junto al bóxer y mi mano acuna mi miembro con suaves movimientos tal y como ella empezaría este encuentro, con la vista a la ciudad, mis ojos se nublan por el placer deseando que ella estuviera acá, y que sus manos estén envueltas en mi miembro tanto como su tibia lengua, los gemidos son lo único q se escuchan en toda la gran habitación y algunas veces, llegan a hacer bastante eco, el brazo que sostiene mi miembro empieza a doler con la rapidez que lo estoy haciendo empiezo a desear algo más que fuera mi mano, un pequeño dolor aparece en mi abdomen bajo, cerca de mi miembro, indicándome que ya estoy cerca del orgasmo, tanto que me duele, mi cabeza está hacia atrás y algunos pedazos de mi cabello están húmedos al igual que mi pecho, mi camisa esta en el suelo tanto como otras prendas de mi ropa, lo cual estoy completamente desnudo queriendo más, deseando su cuerpo que tanto me gusta, me siento en la silla que está frente a mi escritorio aún sin haberme vestido, con los ojos cerrados y con poca energía, creí estar medio dormido y soñando algo, pero me equivoqué, pequeños ruiditos de la aguja de tacones se escuchan en toda la habitación, veo su figura viniendo a mi, se desabotono la camisa negra que llevaba hoy, dejando a la vista sus enormes pechos

-hola papi -menciona ella con una pequeña sonrisa y abre sus piernas poniéndolas a mis costados, mi vista se posiciona en su boca roja, tanto como su ropa interior, y luego bajan a sus pechos y me dan ganas de querer ahogar mi cara en ellos y morir felizmente-

-hola princesa -le respondo tratando de recuperar mi respiración y esbozando una pequeña sonrisa- te extrañe -vuelvo a mencionar y ella se sienta rápido, fuerte, sin pensarlo y sin ningún problema sobre mi, esta caliente y húmeda y lo puedo sentir contra mi miembro-

-yo también te extrañé papi, quise volver lo más rápido que pude y sorprenderte porque sabia que ibas a estar aquí -me responde mientras sus caderas se empiezan a mover lentamente, nuestros gemidos se escucharon al mismo tiempo, llenando la habitación de estos sonidos de placer- no te pongas ningún preservativo papi -me dice sonriendo, como nena chiquita- quiero sentirte dentro mío, quiero que me llenes de tu esencia -exclama-,
mis oídos escuchan y le hago caso, como siempre, mi mano se van directamente a su cadera mientras que con otra intento entrar en ella, cosa que en cuestión de menos de cinco segundos, lo logro, sus gemidos decoran la habitación y a mi me encantan, como si fueran una canción, mis labios devoran los suyos y se muy bien que mi boca va a quedar demasiado roja, lo cual, no me preocupa, porque me encanta cuando pasa, ella con todas sus fuerzas da pequeños saltitos sobre mi, haciendo que mis muslos duelan pero no me quejo, nunca lo he hecho, siempre me encantó que horas después o al otro día, me duelan y hasta me duela caminar, tal como yo lo hago con ella, mi miembro está intacto dentro de ella, no salió en ningún momento dado que eran bastantes los centímetros que lo definían. ella tira su cabeza hacia atrás, lo cual me da acceso a su cuello y todo su lindo pecho que con gusto, lamo, muerdo y succiono, queriendo que el resultado sean marcas moradas, mi orgasmo se aproxima, pero ella sale cuando estoy a punto de venirme y se arrodilla delante mío, y antes de poner mi miembro en su boca, exclama- quiero ahogarme con el papi, quiero que mi cara esté repleta de tu líquido -no digo nada, jadeo de placer por escucharla así, y mis manos, haciéndole entender que si puede continuar, van a su cabello, mi orgasmo llega, y fue tanto que por más que mi miembro haya estado en su boca, todo mi líquido sobresalió y empezó a caer por su cuello y demás, ella con una sonrisa, lo tragó y chupo sus dedos, como yo lo hice con su pecho, se vuelve a sentar sobre mi, su cabeza está en mi pecho y estoy seguro de que puede escuchar los rápidos latidos de mi corazón. me encargo de darle agua y limpiar restos de líquido blanco en su cuerpo con unas toallitas húmedas, mientras noto que su respiración es tranquila, la dejo acostada unos segundos en lo que tardo en cambiarme para volver a casa, junto todo lo que me tengo que llevar y lo guardo, ella aún dormida sin tener la fuerza necesaria para poder despertarse o pararse, la alzo sin problema alguno y me pongo su cartera en el otro hombro mientras llevo en la mano mi bolso de trabajo, queda recostada como nena chiquita en mi hombro con su cabeza en mi cuello, ambos bajamos por el ascensor y al llegar al estacionamiento de la empresa, la acuesto en la parte de atrás y con mi saco la tapo, me siento adelante y empiezo a manejar, rumbo a casa-

hola :)

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⏰ Última actualización: Mar 19, 2023 ⏰

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