Parte 29

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Entré en pánico total, ya sabia que ellos debían de conocer la verdad, pero yo no me sentía lista para verlos a la cara. Un sonido me sacó de mis pensamientos, el ascensor había llegado al piso donde estábamos, era ahora o nunca, así que entré corriendo, oprimiendo el botón de cerrar. Lo último que vi fue sus rostros siguiéndome y sus voces llamándome.

Me recosté sobre una pared marcando la planta baja, así tendría tiempo suficiente, de hecho, en diez minutos se supone que es mi hora de salida, ya estaba casi todo listo, le envié un mensaje rápido al mánager que debía de irme por motivos personales, al salir del elevador corrí a la entrada, si no mal recuerdo mi padre prometió pasar por mí, ahora solo debo de buscar el auto, pero antes de poder huir me encontré con mi padre.

Padre- Ana que bueno que sales.- me miró de arriba abajo.- ¿qué te sucede?-

Ana- No es momento de explicaciones, debemos de irnos, ahora.- lo tomé de la mano y lo guie a la salida.

Padre- Pero Haneul y Eunha están en el baño, no les dije donde estacioné el auto.-

Ana- ¿Eunha está aquí?- entré en pánico, no es momento que ellos sepan de la existencia de mi hija.

Padre- Si, quería entrar al baño Eunha y ya sabes cómo es ella.-

Ana- Bueno los esperaré fuera.-

Pero antes de poder irme la voz de varias personas llamándome me hizo girar, todos corrían a mí.

Chan- Min Ana, detente.- su voz sobresalía de las demás y eso me aterró, pero antes de poder decir algo una voz aguda me llamaba.

Eunha- Mami, mami, mami.- corrió en mi dirección pidiéndome brazos, desvié la mirada de los chicos y la cargué.

Ana- ¿Dónde está Haneul?-

Eunha- No lo sé, quería verte mami.-

Caminé en dirección a la salida con ella, esperando que nadie me siguiera, pero no todo es como lo deseo.

Eunha- Mamá, ahí está el señor Bibimbap.-

Ana- ¿Qué?-

Eunha- Si el señor Bibimbap, lo conocí en tu trabajo, adiós señor.- ella lo saludaba con su mano, mientras que a lo lejos logré distinguir como Han Jisung alzaba su mano en señal de regresarlo.

Mis ojos se llenaron de lágrimas y me fui de ahí.

No fui a la empresa durante los siguientes dos días, al enterarse mi jefe de la partida de mi padre me dejó despedirlo, debía de adaptarme a mi nueva vida. Después de dejar a mi padre y madrastra en el aeropuerto, me dirigí con Eunha a la escuela.

Ana- Cuídate mi cielo, ya sabes que debes de portarte bien.-

Eunha- Ya se mami, te amo.-

Ana- Y yo a ti.- dejé que se la llevara su maestra y me dirigí al lugar que había evitado, la empresa.

Entre y subí a mi oficina por el ascensor, caminé por el pasillo y al estar frente a la puerta me encontré con una persona sentada tomando sus piernas, me acerqué lentamente y tomé su hombro, al alzar su rostro noté que se trataba del menor del grupo de Stray Kids, sus ojos estaban hinchados y su rostro pálido, se levantó de inmediato y me abrazó.

IN- Ana, Min Ana, ¿de verdad eres tú?-

Ana- Hola Innie.- correspondí el abrazo, abrí la puerta y lo invité a pasar.- Vamos, entra.- una vez dentro cerré la puerta.

IN- ¿Por qué no me dijiste quien eres desde el principio?, yo lo abría entendido, todo hubiera sido menos doloroso.-

Ana- Lo lamento, pero no creí que quisieran volver a verme, no después de lo que pasó en la presentación.-

Stray Kids-Winter FallsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora