"𝕀𝕟𝕕𝕚𝕘𝕟𝕠 𝕕𝕖 𝕤𝕖𝕣 𝔸𝕞𝕒𝕕𝕠" Dazai x OC

02

-No debería entretenerme- Recogió su paraguas y se paró para seguir su camino. Intentó ignorar a la persona que estaba tirada, pero cuando pasó por su lado, no pudo evitar fijar su mirada en él otra vez.

"A lo mejor a mi me hubiese gustado que alguien me ayude". Pensó Akira. Sin darse cuenta, ya se había acercado a él inconscientemente.

-Oye, ¿estás bien?-. Dijo agachándose ante él, mientras  se cubría a los dos con el paraguas. Se fijó en que era un chico joven, castaño, aproximadamente de la misma edad de ella, llevaba vendas en las muñecas y en el ojo derecho y parecía que le habían herido

-Está empapado del todo y parece que tiene heridas ¿está este tipo siquiera vivo?- Se preguntó. Iba a acercar su mano para comprobar si tenía pulso, pero antes de que pudiera llegar a tocar su cuello, algo la agarró la mano.

El tipo había despertado.

-E-eh ¿Estás bien? ¿Puedo ayudarte en algo?- Dijo Akira sorprendida

El tipo abrió los ojos y los dos cruzaron miradas. Realizó una sonrisa.

-¿Eres un ángel de la muerte?- Dijo para luego soltar un quejido.- Ahh esto duele más de lo que creía- Intentó levantarse pero Akira lo detuvo.

- Es mejor que no te muevas, parece que estás herido-

El sujeto a pesar de que parecía estar bastante herido seguía observando a Akira con diversión.

-Dime ángel, ¿He muerto ya y has venido a llevarme?- Lo dijo de una manera que le pareció muy tranquila a Akira como si él de verdad esperara que la respuesta sea sí.

-No estás muerto y yo no soy ningún ángel- Le respondió ella, mientras se fijaba en si tenía alguna otra herida que pudiera ser grave.

-Ya veo- Respondió el chico con un tono decepción en su voz. -Ya decía yo que era raro que un muerto sintiera dolor- Dicho esto, se intentó poner de pie. No paraba de tambalearse por lo que Akira le ayudó poniendo su brazo en su cuello.

-Apenas puedes mantenerte en pie. Que remedio, necesitas descansar de una vez, te ayudaré a caminar hasta que lleguemos a... mi casa- Esto último lo dijo con un tono tan vacío que hasta él  lo notó.

-Veamos- Dijo el chico mirando nuevamente a Akira. - Si en realidad sigo vivo y tu no eres un ángel. ¿Quién eres y porque estás ayudando a un extraño?.

Akira tenía su mirada fija en esos ojos marrones, sus rostros estaban bastante cerca. Normalmente se le haría incomodo hablar con un extraño que está tan cerca de ella, pero en ese momento se sentía raramente tranquila. 

-Me llamo Akira, y te estoy ayudando porque creo que no esta bien ignorar a alguien que necesita ayuda. Aunque no la quiera- Esto último lo dijo pensando en lo que el chico dijo antes, o más bien la forma en la que lo dijo, como si en verdad deseara estar muerto. -¿Y tú cómo te llamas?- Llevaba un rato preguntándose cual sería el nombre de ese extraño sujeto.

El chico parecía contento por haber escuchado esa pregunta.

-Llamame Dazai- Respondió con esa sonrisa que ya venía trayendo desde hacer rato.