Path to Wonderland (Fics de TW con PTN)

Una Segunda Vez Part.6

ADVERTENCIA ⚠️⚠️

ÉSTA parte contiene escritos delicados que pueden ser incómodos para algunos usuarios.
Por favor, de la manera más atenta pido discreción y que si eres menor de edad no lo leas.

////////////////////////////////////////////////////Capitulo 6

El suelo estaba cubierto por botellas de alcohol de diferentes tipos, unos eran vino y otros ron, en su mayoría de la reserva especial real. Muchas hadas de la servidumbre habían pensado que era un capricho para la humana, pero era más para el joven rey.
Fue nuevo ver qué bebiera tales cantidades de alcohol aunque fue más empujado por la mala influencia de aquella mujer o eso pensaban.

Malleus: Mi cabeza me duele…

Zoya: Buenos días, Cuernitos.

Ambos se encontraban en su habitación. El fae volteo a verla para buscar un poco de cariño, pero inmediatamente se despertó de golpe viéndola desnuda a su lado y no sólo eso, también él se encontraba sin prenda alguna.

Malleus: No puede ser, ¿Qué hice?

Zoya: Te pusiste salvaje anoche. Tal como un dragón en su época de celo.

Malleus: Dime que no hicimos nada. Debo mantenerme completo hasta el matrimonio. Está bien que somos prometidos, pero ésto es demasiado.

La chica se levantó estirando sus brazos al cielo dejando expuesta por completo su piel.

Zoya: Tranquilo. Nada que no hicieran las parejas. Un simple jugueteo y ya. Quítate ese pensamiento tan anticuado. Veamos…

—-------------------------La noche anterior—--------

Que petición tan extraña. El rey había ordenado todo el alcohol en uno de los salones con algunos bocadillos. Nadie más aparte de sus dos soldados más cercanos, Lilia y su prometida podían unirse.

Sebek: ¡Humana! ¡Espero no estés tramando algo para lastimar al maestro!

Zoya: Tranquilo. Solo se divertirá un poco o tal vez mucho. Eso depende.

Sus manos femeninas abrieron con mucha facilidad la primera botella.

Lilia: ¡Entonces que comience la fiesta! ¡Salud!

Todos chocaron sus copas con mucho entusiasmo gracias al hada de los tomates. Entre copa y copa comenzaba a soltarse más la plática entre los presentes.

Sebek: ¡Humana! ¡Tengo que admitir que me agradas para el joven maestro!

Lilia: ¡Oh! ¡Eso es nuevo! ¿No estás intentando conseguir un aumento?

Sebek: ¡Eso jamás! ¡Aún si no me pagaran serviría al joven Maestro! ¡El joven maestro es grandioso! ¡Perfecto! ¡No me lo creo! ¡Estoy presente en una reunión que él organizó!

La comandante solo sonreía con las lágrimas de aquél joven peliverde. Se veía gracioso haciendo reverencias una y otra vez a un cuadro en la pared.
Silver en cambio había terminado vencido por el sueño que a pesar de los gritos de su compañero seguía profundamente viajando al país del descanso.

Zoya: ¿Cómo te sientes, Cuernitos?

Malleus: No me siento mal. Tengo mucha resistencia.

Zoya: Bien. Eso me agrada, ¿Quieres una competencia?

Lilia: ¡¿Alguien dijo competencia?! ¡Los voy a vencer, novatos! ¡Nadie tiene mejor resistencia que yo!

Zoya: Eso lo veremos, enano.

Los tres comenzaron a beber sin control. Lilia por puro placer mientras que Malleus lo hacía para quedarse tumbado por el alcohol. Nunca en su juventud había podido hacer esa clase de travesuras ya que no estaba de por sí permitidas. Ahora era un adulto y tenía todo el derecho a embriagarse.