La mañana despues del Groom

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Luz miraba al horizonte desde el balcón, múltiples caravanas se encontraban partiendo del reino para volver a sus hogares tras la finalización del Groom, pero por otro lado algunos nobles seguían aun en el reino, explorando un poco de lo que Alvain podía ofrecer a los turistas. La capital del reino era famosa tanto por su arquitectura como su basta inmersión en las bellas artes.

Luz miraba con atención y curiosidad como el bullicio poco a poco se tornaba más presente con la ascensión del sol en el cielo, la nueva princesa estaba metiéndose en su mente mientras el día iniciaba después de la noche de la mágica noche del Groom.

-¡Hey Luz! déjame entrar - una voz familiar llamo a su puerta, Luz dudo por un momento el llamar a los guardias para despachar a esas personas, pese a reconocer la voz, ella no tenía muchos ánimos de ver a esa persona tan temprano.

-Luz, por favor dejamos entrar, solo queremos hablar - Una segunda voz se escuchó a la par de la primera, la princesa empezó a ceder al escucharlo. - ¡Capitana! - volvió a oírse la segunda voz. La voluntad de Luz finalmente cayo al oír su antiguo título, la puerta de su habitación se entreabrió para dejar parcialmente la vista al pasillo.

- Edric, Emira - Luz musito sus nombres con cierta nostalgia, los dos en la puerta sonrieron al verla - Por favor denme un momento para cambiarme - ella abrió la puerta dejando ver más de ella y señalo sus prendas, Edric aparto la mirada casi inmediato con el rostro rojo mientras su hermana intento ver dentro del cuarto, captando por un momento el cuerpo semi~descubierto del príncipe y futuro rey de Fulgore. Emira sonrió dándole un pulgar arriba a su amiga y apartándose para darle el espacio para cambiarse.

Luz no capto el por qué la hermana de Amity le dio un pulgar arriba, hasta que escucho detrás de ella los bostezos y pequeños gemidos que su esposo estaba haciendo al estirarse. Emira desde el pasillo pudo escuchar los gritos de vergüenza de Luz, con una sonrisa sobre su rostro imaginándose sobre qué tipo de rutinas debería hacer tomar a su pareja para llegar ese estado.

- Cuanto ha crecido la niña en tan poco tiempo, - Emira suspiro - me da algo de envidia el tremendo corte de carne que se sirvió, - miro a su hermano que sostenía su cabeza entre sus manos, balbuceando incoherencias con el rostro colorado - Una lástima ¿No lo crees hermano? después de servirse tres platillos del menú de los Blight y termina acabando con un corte de carne magra de los bosques.

- Nada mal niña -comento Emira con una mirada de ensueño. - Vamos Edric, no me dejes colgada aquí, di algo - ella le dio un par de palmadas en la espalda a su hermano.

Edric dejo salir un suspiro de fatiga - No sé qué decir realmente Emira, pero no te puedo negar que estoy un poco celoso pero no de Luz si no de su esposo - el finalmente dijo volviendo a suspirar.

Emira sonrió a las palabras de su hermano, conocía bien el historial de relaciones de la morena, no era muy extenso pero ciertamente las elecciones de Luz eran la mar de interesantes. Ella pensó en decir más, pero el sonido de la puerta llamo la atención de ambos en ese instante. La puerta rechino ligeramente al abrirse, en el portal Luz estaba parada junto al hombre que la había arrebatado del reino de Hibralt hacía dos años. Edric solo miro en silencio a la pareja, intento decir algo pero la presencia del hombre lo intimidaba en gran, reviviendo parte de los traumas que le había generado aquel día que se conocieron.

-¡Hunter! deja de fruncir el ceño, asustas a nuestros invitados - Luz regaño al hombre rubio, jugando con la frente de este para intentar suavizar su mirada, la chica no había notado el miedo en la cara de Edric, se había mantenido en guardia a lo que Emira pudiera hacer, pero había ignorado la presencia de su amigo en cambio.

- Perdón por eso Edric - Luz se disculpó con él, - Hunter es algo malo cuando se trata de socializar con nuevas personas - intento explicar ella, pero bueno pasen y tomen asiento, pónganse cómodos

Ya no mas tu caballeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora