Dime que es verdad,
Que tus colmillos, en mí clavarás
Permitiéndome estar a tu lado
Transformado en un ser inmortal.
Sacia tu sed de sangre
En éste cuerpo inerte,
Ataca antes que venga
La luz incandescente.
Sentí fatal mordida;
Por la yugular, insertaste nueva vida
Corre tu sangre ya por mi organismo,
Renazco en ti, no soy el mismo.
De tu néctar carmesí
Mi interior se ha impregnado,
Manteniendo eternamente
Mi corazón al tuyo encadenado.
Del aurora al ocaso;
Vacuidad tu ausencia me hace padecer,
Tengo violenta hambre
De tu amor alimentarme,
Del crepúsculo al amanecer.
Si ha de ser bajo el implacable rayo del sol
O al reconfortante abrigo del anochecer,
Mientras sea a tu costado,
No me importa perecer.
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Poemas de amor: surgimiento y caída
PoetryLetras escupidas por ese órgano que se inflama y sangra con la misma facilidad. Que es mordido, apuñalado, amado, pisoteado, acariciado, desdeñado, pero no detiene su quejoso andar.