Un regreso anticipado

1K 85 755
                                    


En un edificio cerca del centro de la ciudad, un muchacho se encontraba en uno de los últimos pisos de la alta edificación, siendo recibido por un viejo conocido.

Charlie: Me alegra verlo don Robert -decía estrechando la mano de su antigua jefe.

Robert: Charlie! Muchachón, te aseguro que estoy más feliz yo por verte.

El semblante del chico era ligeramente sonriente, mientras que el del hombre mayor demostraba algo de nostalgia y serenidad.

Robert: Vaya que haz... adelgazado... un poco jeje.

Charlie: Uhm... si, pasaron algunas cosas.

Robert: No puedo imaginarlo, chico. Debió haber sido toda una experiencia poder trabajar en la mansión de madame Vanessa.

Charlie: Jeje si... una experiencia -decía con incomodidad.

Robert: Y que tal ha ido todo? Imagino que una maravilla.

Charlie: Ahm... yo diría... -es interrumpido.

Robert: Por ahí escuché que lograste salir con la sobrina de la vicepresidenta! Cómo se llamaba? Hmm... Lisa, no? Lisa Van Voorhm, la que trabaja en el cuarto piso.

Charlie: Uhm... si... eso terminó mal, don Robert.

Robert: Enserio?

Charlie: Si, no quiero saber nada de ella.

Robert: No pudo ser tan malo o si?

Charlie: Me engañó con su propio pokemon.

Robert: ...

Charlie: Un Toxtricity que... creí haber conocido...

Robert: Uhm... uff... jeje b-bueno, al menos trabajar en esa lujosa casa debió ser una maravilla.

Charlie: No tanto don Robert. Me manipularon, vi abusos de pokemones, nos atacaron con un ejército de pokemones alterados y estuve al borde de la muerte en más de una ocasión.

Robert: ...

Charlie: ...

Robert: ...

Charlie: Además conocí una parte de mi que creo que es un psicópata.

Robert: Hablas en sentido figurativo, no?

Charlie: ...

Robert: Uhm... cielos... jeje cambiando un poco de tema... ehm... c-como ha estado tu familia? Se encuentra bien tu madre?

El semblante del chico deja de ser neutro y se muestra un poco decaído. El jefe del muchacho nota como su mirada baja lentamente mientras un silencio sofocante empieza a rodear a los dos varones.

Robert: C-Charlie...

Charlie: ...

Robert: Cielo santo... Charlie, ella está...?

El joven mueve la cabeza muy lentamente para confirmar el pensamiento de Robert, dejando a este algo paralizado por la noticia.

Robert: Oh... yo lo... por qué no vamos a mí oficina, muchachón?

Con mucha preocupación, el hombre pone su mano sobre el hombro del muchacho y ambos se encaminan a la oficina referida mientras que Charlie mantenía su semblante entristecido.

Poco más de una hora había pasado, tiempo en el que Charlie le había contado muchas de las cosas que había vivido en los últimos meses, omitiendo algunos detalles como Charles, su intento de suicidio y su encuentro con Mewtwo.

Durante todo el tiempo, el hombre empleador se mantenían asombrado y cada relato lo dejaba aún más atónito, preguntándose a sí mismo como es que ese muchacho seguía vivo y relativamente bien.

Una en el UniversoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora