secuestrada (jjk y tú)

twenty five

Después de la muerte de Jungkook fue yoongi que se hizo cargo de todo pero ahora hicieron las cosas bien no tan bien porque al final tuvieron que pagar fuertes cantidades para limpiar su nombre a igual que de Jungkook aunque muerto pero en los sistemas dice que era un hombre honrado, para algunos chiste para otros realidad. Por otro lado jimin había Sido castigado por aliarse con Lee porque este también fue a la cárcel pero no podía dejar a jimin a un lado así que le hicieron firmar contratos tras contratos para la paz y amor.

Ahora yoongi era un ceo a igual que los demás socios cada uno tenía algún negocio pero el que les unía era el mejor que todos.

—¿Te gusta? — pregunto jimin.

—¿Que quieres jimin? — pregunta harto yoongi.

—Necesito que apruebes mis ideas, no son malas.

—¡¿Poner un baño transparente en la empresa ? !  — soltó hirritado. —¿Quieres que abruebe tal tontería?

—Señor Min el señor Vicent acaba de llegar. — aviso la secretaria, Dara.

Kim taehyung.

Cuento los minutos para ir a verla.

Verla se me ha vuelto una adicción, ella es completamente hermosa por dentro y por fuera y las ganas de posserla no me dejan. Ayer que la deje me lleno de impotencia porque justo yoongi me llamo para festejar el cumpleaños de Jungkook que muerto estaba yo creo que así quiso la vida me la dejo libre para yo estar con ella.

Se muy bien que aún no supera sus traumas por eso decidí esperarla por el tiempo que sea necesario para ella, tan linda si la hubiera conocido antes de que Jungkook la conociera no le hubiera pasado lo que le pasó, la habría hecho mía de inmediato pero lamentablemente calló en el primero en el promiscuo de Jungkook que debe estar pudriéndose en el infierno es mi amigo me salvó de muchas pero hizo tantas cosas malas que no se merece nada.

—¿Ya te dió el si?

Hoby Pregunto.

—No. 

—En efecto, el Estocolmo hacia Jungkook sigue.

—Ni lo digas porque me descontroló. — hable rápidamente. —Ella no es tonta y sabe que yo soy mejor. —

—Si muerto sigue estando presente, imagínate si estuviera vivo. — carcajeo.

—pero no lo está.

—mis deseos son que tú y Emily se casen así que tranquilo. — promulgó.

—Hoy es su cumpleaños.

—Lo sé, llévale esto por mi.

—bien, bien.

Sonreí embobado para ir a una tienda y comprarle algo, unas joyas o algunas prendas o un auto aunque ella no le gustan regalos caros porque la otra vez me dijo que no me hubiera molestado.

¿Eso quiere decir que no le gusto verdad?

A ella le gusta comer.

Haré una reserva en el mejor restaurante de corea del sur.

—Pequeña paso por ti a las ocho. —

Le dejé un mensaje a lo cual ella inmediatamente respondió.

—Siii

Sonrió como un estúpido.

—Señorita el anillo más caro que tengas. — le dije.

—¿Para compromiso?

—Para novios.

—es lo mismo — río la que me atendía. — tenemos Anillo Culinam Dream. Es un diamante Fancy de un intenso color azul de más de 24 quilates cuesta 25 millones de dólares. Si quieres una econo—

—Esa está perfecto. — me enamore del anillo cuando lo ví.

Mande a mi chófer por ella mientras me encargaba de que todo salga perfecto las canciones, la comida sabía perfectamente de sus gustos culinarios. estaba tan nervioso es como si no la supiera esperar.

¿Lo tomara mal?

—¡¿Que paso?!

—Perdon señor. — dijo el que hizo caer las bebidas valorizadas en millones de dólares.

Relájate taehyung, relájate.

—Bien bien traigan las demás. — todos empezaron a limpiar de inmediato.

Mi celular vibró.

Joder, solo falta unos minutos.

—Taehyung tienes que venir. — hablo yoongi.

—estoy ocupado ahora, no puedo.

Respondí tajante.

—Hijo de su puta madre ¡Que vengas ahora! — aleje su voz por la intensidad de su voz.

—Vete a la mier—

—Jungkook ha llegado, no me preguntes ni como pero está aquí pedazo de escoria te necesitamos. —  No lo pensé más para ir a la casa de yoongi es donde todos vivían, la mansión.

Emily.

Una

Dos.

Tres.

.
.
.

Sesenta llamadas y taehyung no respondía, estaba sentada en la mesa. Una hora como máximo.

—Señorita creo que el señor le salió un percance. — Dijo el chófer. —la llevaré casa. — asenti levemente.

No molestaba, estaba preocupada por el.

—¿Dónde esta? ¿Le pasó algo?
.

—Me llamo y me dijo que le perdone y te lleve de vuelta a tu casa, "feliz cumpleaños pequeña." — imitó su voz algo que me hizo reír.

El chófer me dejó me quiso acompañar pero le dije que no era necesario entonces salí del auto para subirme al ascensor.

Debió pasar algo grave, el no es dejarme plantada.

Le volví a timbrar pero no respondió.

No sabía dónde quedaba la mansión ¿Y si voy ?

—Feliz cumpleaños Emily.

No hacía falta que encienda la luz para saber quién era no hacía falta porque conocía perfectamente su voz, su jodida voz en un instante me quedé en la nada con un dolor en el pecho haciendo que derrame lágrimas tras lágrimas, los recuerdos invadieron mi mente recuerdos mayormente recuerdos malos pero desgraciadamente no tenía coraje no tenía odio al contrario era una emoción inexplicable. Me quedé mirandole en la oscuridad ponía notar sus zapatos negros llevaba un traje negro pero no veía nada más entonces encendí la luz y sobresalté al ver que no era un fantasma al darme cuenta que era el, era ese maldito animal que aunque haga Miles de cosas no podré quitarme de la cabeza, eres ese enfermo que se apoderó de mi corazón que no siquiera pidió permiso para quedarse ahí, imposible decir las noches que llore por el por su maldita muerte porque mi por llorar por una basura como el, pero no puedo odiarlo aunque quiera odiarlo no puedo hacerlo.

Era Jungkook era el chico estúpido del cual me enamore como una verdadera estúpida.