Eleven

1.6K 47 6
                                    

Estaba perdida en el día no sabía que día estábamos, pero Jungkook ya andaba pidiendo cosas, mi cuerpo dolía y me reusaba hacerlo pero estaba de rodillas ante el mientras acariciaba mi cabello acercándome a su miembro.

  —Sacala. — ordenó.

Me levanté y lo abrace, puse sus dos manos en mi glúteos levantando mi vestido para que los sintiera lo esposo que está, me dolía, ardía aún no había pasado el dolor.

  —Me duele. — Solloze, trato de darle pena para no chuparle la pija. —Por favor hoy no. — cuando termine de decir aquello apretó mis nalgas importandole poco mi dolor, solté un quejido junto con unas lágrimas.

Todo es mi culpa, no debí hacer eso, Fui una estúpida al pensar que el me dejaría solo por hoy le daría pena pero no, Tenía un corazón de hielo.

  —Te lo mereces por puta. — soltó brusco. —Ahora arrodíllate. — volvió a ordenar.

Tocó las heridas que aún no estaba cicatrizadas. Desabroché su pantalón con miedo pero un llamado nos interrumpió.

  —Señor Acaba de llegar Lenny. — informó.

Jungkook

Apenas escuché su nombre, ese imbécil que me traicionó pero de esta lo iba salir tan fácil, todavía se atreve a venir como un puto faldero. Me arrodille para estar a la altura de Emily y darle un beso profundo, brusco pidiendo por más luego le di una nalgada escuchando su quejido, salí de la habitación.

Me pare justo al comienzo de las escaleras ahí estaba el sentado como una puta mierda, ahora que escusa me haria tragar. Maldito perro de mierda.

  —Señor. — se levantó cuando me vio.

  —Nada de señor imbécil. — saque mi arma para apuntarlo justo en su cabeza. —Te consedo tus últimas palabras. — solté una carcajada.

  —Yo le puedo explicar, por favor. — Suplico. —Yo no tuve la culp— La bala fue directo a su pierna, grito de dolor. Trataba de decirme algo pero no pudo. —Fue Ji— su voz me hartaba en cuestión de segundos perfore su cráneo dejándolo inmóvil.

Mierda, mi sofá.

—Limpien todo. — ordene a yeonjun que miraban otra cosa le seguí la mirada encontrándome con Emily a punto de bajar la escalera, me la quedé mirando y ella Ami. Cerró sus ojos y rodo por las escaleras. —Mierda, Mierda. — la levanté inmediatamente, por suerte no tenía rastro de sangre por ningún lado.

La subí a mi habitación de dónde no debió de salir nunca, la puse en mi cama para poner alcohol en su nariz esperando que despertara. Llame a un doctor personal.

———

Estaba boca abajo adormilada, me levanté al sentir unas manos acariciar mi trasero Era Jungkook no sabía si asustarme o tranquilizarme entonces ahí fue cuando recordé lo que pasó.

  —t-u L-o ma-taste. — tartamude.

  —Si, que hay con eso. — Dijo brusco. —Ahora volteate que quiero borrar esas marcas en tu culo. — le hice caso así me que me puse boca abajo.

Estaba con una blusa y con unas bragas eso me daba un poco de seguridad, sentía la pomada en mis glúteos fríos pero ya no me ardían mucho podía soportarlo.

   —Si te portas bien, nada de esto te volverá a pasar. — Cuando dijo aquello empeze a llorar.

Maldito hipócrita.

Me tense al sentir un beso en mi trasero.

  —Me calientas Emily. — ahora no había nada de pomada pero de igual forma apretaba mis glúteos como si no me doliera. — Mierda me vuelves loco, Quiero hacerte mía en este mismo instante. — aviso, no dije nada me quedé sin mover nada. —Cúbrete, Cúbrete antes Que me arrepienta y te viole aquí mismo. — Rápidamente me cubrí con la sábana para ver a Jungkook salir por la puerta.

secuestrada (jjk y tú)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora