secuestrada (jjk y tú)

twenty

Estos platillos eran realmente deliciosos una empleada los preparo y esa soy yo. Estoy en la cocina porque claramente no quiero que nadie me vea en el comedor porque luego le dirían Jungkook, el no me deja salir pero yo tenía mucho hambre. Me gane un poco de su confianza a pesar de todo ya no me golpea seguidamente como antes siento que poco a poco el va cambiar.

Me siento vacía cuando el sale de la casa no quisiera haber dicho esto nunca pero lo extraño cuando el sale además quisiera que me lleve algún lugar.

  —¿Que comes? — di un respingo pensando que era Jungkook u otro de los miembros pero no era yeonjun que también podía entrar a la cocina a prepararse algo y comer ahí mismo.

  —Comida ¿Quieres? — sonreí.

  —Por favor. — me dijo y yo me levanté para servir la dichosa comida y luego entregársela. —ojala te guste. — sonreí.

El lo probó lentamente mire estática su rostro para descifrar si la comida era de su agrado o no, en efecto le había gustado así que tranquila continúe comiendo.

Yeonjun era buen chico.

Sus heridas ya no se notaba mucho, suga era muy brusco yo no entendia porque yeonjun seguía aquí cuando lo castigan con golpes.

La voz gruesa de Jungkook sonó desde afuera yeonjun se asusto y se levantó rápidamente para salir pero la voz de Jungkook se escuchaba más fuerte estaba buscando a hoby. Cuando estaba por salir Jungkook entro a la cocina poniendo su vista en mi.

   —¿Quien te dió permiso para salir? — preguntó mientras impedía la salida de yeonjun.

  —Sol— me Interrumpió.

  —¡¿Quien carajos te dió permiso?! — di un respingo asustada. —¿Que hacían ustedes dos en la cocina? — su vista se poso en los dos platos que estaban con poca comida.

  —señor es mi culpa, yo le pedí que me cocinara. — me defendió yeonjun alejandose un poco de el. Tomo los dos platos para llevarlo en el lavadero.

  —¿Con que derecho?

  —Lo siento.

  —Emily. — me llamo enojado para mirarlo a los ojos. —¿Quieres recibir el castigo por el? — pregunto serio en un tono brusco, estaba controlandose en cualquier momento saldría el verdadero Jungkook.

  —Señor todo es mi cu— quiso hablar yeonjun pero Jungkook no lo dejo.

  —Tu cállate o ahora mismo acabo con tu vida. — ordenó Jungkook. —Responde Emily. — me miró.

   — S-Si.

   —Quiero verte desnuda en mi cama en cinco minutos. — ordenó mientras se aflojaba la corbata. —¡Que mierda esperas! — grito así que camine rápido para hacerle caso pero no me quitaría la ropa.

Jungkook se acercó a yeonjun al grado de sacar su arma y apuntar justo en su pecho el respiraba profundamente temiendo por su vida, estaba temblando, yeonjun tenía mucho tiempo trabajando con Jeon pero nunca pensó en convertirlo en socio el merecía una posición más alta en la mafia pero no la tenía.

   —Ganas no me falta de Meterte un balazo. — presionó más en su abdomen. —Es la primera y la última vez que te veo junto a mi mujer ¿Entendido?  — Jungkook golpeó su abdomen de yeonjun.

Yeonjun calló rendido en el suelo pero Jungkook le importo un rábano así que solo se fue.

Emily.

Estaba en la habitación de Jungkook sentada en su cama nerviosa pensando en lo que me ordenó pero no me iba desnudar para el no lo haría, Talvez vuelva a ser como antes muchas cosas pasaban por mi cabeza. Los pasos de Jungkook me hicieron entrar en alerta así que me metí en las sábanas para hacerme a la dormida.

Mi cuerpo estaba temblando como meses anteriores volvía lo mismo sin embargo mis ojos estaban totalmente cerrados supuestamente durmiendo.

Sentí frío al no sentir la sabana encima de mi cuerpo, seguidamente alzó mi falda para acariciar mis muslos y quitarme las bragas pero lo deteni asustada.

   —No, Jeon. — susurré con miedo, pero el quito mis manos para seguir bajando mis bragas pero me alejé volviendo a alzarlos. —Ahora no por favor. — pedí.

  —No estoy dispuesto a esperarte más. — soltó brusco. —No me hagas enojar, te quiero desnuda ahora mismo. — ordenó para quitarse el saco y soltar los botones de la camisa.

Me quite la blusa sorprendiendolo por completo, me acerque a él para desabrochar su pantalón para luego bajar sus pantalones bajarme de la cama y arrodillarme en el suelo, tome su miembro duro para lamer su glande mientras le sonreía como una puta, era la primera vez que tomaba la iniciativa además no era difícil como el principio, Jeon me gustaba mucho así que era más fácil.

El tomo mi cabello para jalarlo levemente, yo daba lamidas circulares en su glande una y otra vez.

  —Mierda tómalo todo. — ordenó ronco. Seguí lamiendo su glande ingnorandole. Así que Jeon tomo mi cabeza para penetrar fuertemente hasta ahogarme así que me safe un rato para escupir. —Joder que rico. — hablo mientras golpeaba mi mejilla con su pene.

Nuevamente metí su pene en mi boca esta vez para chuparlo todo aunque era demasiado difícil porque cada vez que la metía toda me quedaba sin aire. Minutos después se corrió en mi boca.

   —Toda bebé, tómalo toda. — con asco me trague toda sin desperdiciar nada. Jungkook se puso a mi altura para besar mis labios y así cargarme para ponerme sobre la cama, abrió mis piernas buscando mi entrada con su pene pero no le dejé cerré por completas.

   —No me siento lista. — solloze porque pensé que al chuparle la polla me dejaría en paz pero no, todo lo contrario. —Jeon por favor. — limpie mis lágrimas.

  —Me jode que seas así Emily. — soltó enojado para soltarme. —hasta cuando mierda tengo que esperar. — soltó brusco justo en ese momento unos tiros se oyeron Jungkook miro alrededor por la ventana.

  —¿Que está pasando? — pregunte asustada.

   —vístete, veré qué está pasando allá abajo. —  me ordenó así que rápidamente me puse la ropa para luego seguirle por atrás, el bajaba lentamente. —Tu no salgas, quédate ahí. — me soltó en un grito.

Me quedé en esa habitación me metí en el baño hasta que escuche como la ventana era rota por los balazos que llegaban hasta ellas traspasandola, no aguante más así que empeze a sollozar muriéndome de miedo.

Casi minutos habían pasado habían personas gritando eran de desconocidos porque no reconocía seguidamente Jungkook entro recién cuando le escuché salí. Me empujó hacia una puerta, me metió ahí era otra habitación grande pero está era oculta creo.

Estábamos adentro la puerta estaba cerrada era difícil de notar nuestro escondite pero no imposible aún moría de miedo.

   —¿Tae, hoby, los demás ? Pregunte preocupada secandome las lágrimas.

   —Callate, nos encontrarán si sigues hablando. —  aviso

Gracias.