El demonio y el Lord oscuro #2 (AU)

Capitulo especial: el pasado del conde Dooku

×varias décadas atrás, mucho antes del nacimiento de Daniel y su equipo×

Podía verse el vacío espacio exterior, casi a la atmósfera de un planeta remoto, y entonces repentinamente se vio salir del hiperespacio lo que parecía ser una nave diplomática de los jedi, la cual parecía querer entrar a la atmósfera del planeta, dentro de esa nave se encontraba un caballero jedi de cabello negro, tres blanca, ojos cafés y que parecía estar en su mediana edad, acompañado de lo que parecía ser su padawan, un joven de cabello castaño y ropajes blancos, aparentaba tener unos 17 años aproximadamente, ambos iban sentados pilotando la nave...

-Muy pronto estaremos arribando, maestro Dooku... *dijo el joven muy respetuoso hacia su maestro*

-me parece perfecto, aunque sugiero aterrizar fuera del pueblo, la situación ya de por si es muy tensa con los ciudadanos, Qui-Gon... *dijo Dooku de manera prudente*

-como ordené, maestro, enseguida *afirmó Qui-Gon con serenidad y respeto hacia Dooku*

Y entonces tanto maestro como aprendiz siguieron su camino hacía el planeta hasta entrar en su atmósfera en cuestión de pocos minutos ya habían llegado a su destino, no era un planeta lindo de ver, su cielo tenía un desagradable tono gris, los hojas de sus árboles no tenían una sola hoja, no no parecía ni haber pasto, pero como dijo Dooku, evidentemente había un pequeño poblado en ese lugar, entonces maestro y aprendiz decidieron aterrizar su nave afuera del pueblo, en el bosque poco más allá, y entonces tanto Dooku como Qui-Gon al aterrizar, rápidamente salieron de su nave, su descontento hacia el paisaje rápidamente se hizo notar.

Dooku y Qui-Gon contuvieron sus muecas, pero la vegetación prácticamente muerta, la suciedad del suelo, sin mencionar que podía verse igual el poblado, las casas sucias y maltratadas, un olor desagradable salía y la poca tecnología en droides que había parecían sucias, oxidadas y con un movimiento sumamente tosco...

-¿cómo la gente de este lugar puede permitirse vivir en condiciones tan denigrantes? Nadie merece esto... *decía Qui-Gon con pena en su voz*