Just One Kiss (Jemma)

La Casa De Georgie

- ¡A la izquierda! - gritaba una desesperada Emma sintiendo como se inclinaban en dirección contraria - ¡No! ¡Espera! ¡WAH! - era demasiado tarde, la canoa cayó hacia la derecha llevándose consigo a las 4 tripulantes en el pequeño lago.

- Tomaremos un descanso - las 4 chicas se acercaron a la orilla y Emma recibió una toalla mientras levantaba los pulgares hacia una de las cámaras, su cuerpo temblando levemente por la fría agua y casi tropezando en el tramo de las escaleras.

- ¡Emma! - Jenna se acercó casi corriendo hasta llegar a su lado - ¡¿Estás bien?! - se notaba que quería reírse pero antes de eso quería asegurarse que la actriz no se hubiera lastimado.

- ¡Esa agua está helada! - exclamó la oji-azul sacudiendo su cuerpo para zafarse de algunas gotas molestas y la morena no contuvo sus carcajadas por más tiempo - ¡No te rías! -

- Deberías haber escuchado tu grito al caer - respondió intentando mantener la seriedad, no lo logró - Ven - cogiéndola de la mano la alejó de la escena en lo que volvían a preparar la embarcación.

Ya en una de las tiendas, la más baja, parada detrás de la otra, secaba el cabello castaño y tarareaba una melodía logrando que la mayor se relajara y se dejara tratar.

- ¿Irás a la noche de juegos de Georgie? - preguntó la mayor con los ojos cerrados.

- Si ¿Y tú? -

- Aún lo estoy pensando - respondió sin darle demasiada importancia.

- ¿Por qué? -

- No lo sé... -

- Deberías ir - propuso la peli-negra dejando de secar, la toalla había absorbido la mayoría de agua y el cabello al ser corto no era difícil de manejar - Todos van a estar ahí -

- Si, lo sé - Jenna la miró atentamente durante unos segundos.

- Y yo también - replicó con una cariñosa sonrisa - A demás, creí que te gustaban los juegos de mesa -

- Me encantan, aunque soy demasiado competitiva -

- ¡Eso es aún mejor! Será más divertido de esa forma - la tela que hacia de puerta en la tienda se corrió y por ella apareció la maquillista de Emma, tendrían que retocar algunos detalles y volverle a acomodar una peluca - Reconsidéralo, por favor -

Emma suspiro resignada y asintió sonriéndole antes de seguir a la mujer. Claramente el rodaje se alargó por el pequeño percance, pero al menos había aprendido a manejar una canoa y una vez la jornada terminó, ahí estaba ella con el resto del cast rumbo al departamento del actor detrás de Ajax.

...

- No me agradas - Emma miró mal al joven Farmer sentado a su lado mientras tomaba ofendida 4 cartas del mazo; desde que habían llegado no habían hecho más que jugar, algunas veces "adivina la palabra", otras parques, varias de Jenga y ahora que anochecía se encontraban alrededor de una mesa.

Llevaban media hora en esa partida de uno y cuando alguien estaba por ganar, de alguna forma resultaba con la mayor cantidad de cartas. Y eso era justamente lo que acababa de pasar con la oji-azul.

- Bienvenida al club - Joy la observó por encima de su baraja de 20 luego de que se olvidara gritar "uno" y se inventaran una extraña regla de que tenía que coger dos carta por cada persona que estuviera jugando.

La joven Ortega había estado en lo correcto, la competitividad de Emma y los demás hacia del juego más divertido, y la oji-azul estaba tan concentrada en vengarse de Georgie que no se dio cuenta que estaba dejando sus cartas a la vista de la persona a su derecha.

- "No tiene rojo" - pensó Jenna siendo esa el el color con el que seguía la ronda así que usó el comodín de cambio de color para convertirlo en azul.

- Ya verás - la joven Myers volvió a ser la mejor candidata para ganar, sin darse cuenta de las sacrificios que estaba haciendo su compañera, tales como comerse las cartas, cambiar a colores que no tenía o poner números que sabia le servían a la otra.

Y así hasta que por fin la victoria fue suya y claramente presumió sin darse cuenta de la ayuda que había recibido, creyendo que todo había sido simple coincidencia y su conexión con Jenna llegaba hasta algo tan aleatorio como un juego de uno.

- 25 cartas siendo 18 rojas, tan raro - dijo la joven Sunday levantando una ceja cuando había reunido las cartas de Jenna.

- No vi las oportunidades de usarlas - mintió aún sabiendo lo inútil que era.

- Chicos ¿Quieren jugar monopoly? - interrumpió Percy sacando una caja.

- ¿O ver una película? - propuso Naomi haciendo que el grupo se dividiera en dos. Por un lado los chicos que apostarían en el juego de mesa y las chicas que se acomodarían en la sala frente a la pantalla plana.

- Falta Emma - comentó Johnna, la actriz detrás de Divina.

- Iré a buscarla - la morena dejó qué las demás alistaran la proyección mientras caminaba por el lugar, la encontró mirando un cuadro con una pintura, no le pareció la gran cosa pero la castaña parecía demasiado concentrada, tanto que brincó cuando le tocaron el hombro - Hey ¿Todo bien? - preguntó inclinando levemente la cabeza hacia un lado.

- Ah, si, solo me llamó la atención - la oji-azul volvió a mirar el lienzo - Estaba buscando formas y esta de acá parece una nave extraterrestre, tal vez alguien se esté escondiendo para evitar ser abducido, y acá... fuerzas militares -

Jenna miró la pintura no logrando ver lo que le decían, era un paisaje y la "nave" era en realidad una nube, quien se podría estar escondiendo solo era un arbusto alargado con algunas ramas sobresalientes y el ejercito eran un montón de flores alineadas.

- Interesante manera de ver las cosas... - admitió sorprendiéndose, no por primera vez, de cómo funcionaba la mente de la mayor - Los chicos preguntan si quieres jugar monopoly o ver una película -

- A decir verdad, agradezco que me hayas convencido de venir, me divertí bastante, pero me siento algo cansada - admitió la más alta no queriendo arruinar la noche.

- ¿Tienes sueño? - no era solo eso, sus días habían estado bastante ocupados y demasiadas actividades sociales llegaban a drenarla, aunque bueno, una siesta podría solucionar varias cosas.

- Podría dormir, si, pero me da pena con los demás - terminó diciendo y Jenna tras considerarlo la arrastró de regreso a la sala, encontraría la forma de que no se sintiera mal por alejarse, pero pudiera descansar como quería.

- ¿Qué género les gustaría? - preguntaron las actrices una vez las vieron llegar; la morena miró a su compañera antes de responder.

- Escojan ustedes, estamos bien con cualquiera - y así era, de todos modos la de cabello corto no tenía intenciones de ver la película y Jenna disfrutaría fuera cual fuera.

Al final ganó una de terror y mientras las demás se asustaban o bromeaban entre sí, Emma dormía plácidamente sobre el costado izquierdo de la peli-negra recibiendo suaves caricias sobre su espalda cada cierto tiempo.

Y así pasaron la noche, prácticamente una pijamada qué transcurrió entre risas, juegos, comida, películas y un abrazo cariñoso entre dos chicas de sentimientos sinceros.