4. Pelea.

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Karl estaba acostado en el pecho de Sapnap mientras veían la película más aburrida del mundo. Sapnap sabía lo mucho que a su mejor amigo le gustaba las caricias en su pelo, así que procuró dárselas al igual que alguno que otro beso en la frente.

Cualquiera que los viera pensaría que eran pareja, pero para nada lo eran, el único contacto físico que tenían era durante el sexo o cuando Karl tenía un mal día y necesitaba que alguien le hiciera mimos. Por otro lado, ellos constantemente se insultaban, golpeaban o se comportaban como dos mejores amigos como si nada hubiera entre ellos, pero cuando estaban solos en la habitación de alguno, las cosas eran diferentes.

Ninguno quería decir nada, solamente se concentraban en ver la película y estar abrazados, habían cenado y solo les quedaba dormir, pero sus mentes estaban muy ocupadas pensando en el otro.

-¿Estás enojado conmigo?

-Sí, cállate Sapnap.

-¿No quieres hablarlo?

-No.

-Mm, está bien, pero cuando quieras hablar me puedes decir.

-Hablar es lo que menos quiero hacer ahora.

Karl iba a asegurarse de que Sapnap no pudiera pensar más que en él, quería que solo lo deseara a él, que solo lo tocara a él y que solo lo amara a él. Era una bola de celos a punto de explotar y necesitaba descargarse de alguna manera. El más pequeño se levantó y sin pensarlo dos veces se sentó en el regazo de Sapnap, captando toda su atención.

-¿Qué pasa?

-No hables.

Karl comenzó a quitar las prendas de ropa de Sapnap sin siquiera pedir permiso, en realidad nunca lo hacía, pero esta vez lo hacía con algo de enojo, definitivamente sería él la única persona en la que pensaría, al menos esa noche.

Sapnap ni siquiera se resistió, pero tenía un poco de miedo por como terminaría la situación teniendo a su mejor amigo completamente enojado.

Karl montaba a Sapnap de la manera más brusca posible mientras este gemía y sostenía su pequeña cintura. La habitación se había llenado con el sonido de sus gemidos y pieles chocando con dureza.

-Karl, si sigues así me voy a correr.

-Hazlo, no me importa.

Las piernas de Karl temblaban, usualmente cuando era así, era Sapnap quien tomaba la responsabilidad de la situación y se encargaba de embestirlo, pero Karl se había negado, quería continuar encima de él. Pocos segundos después pudo sentir su interior llenarse de aquel líquido tibio, aún así no paró.

-Karl, para un momento.

-No.

El placer era demasiado para Karl, tanto que, como siempre, las lagrimas se habían hecho presentes en sus ojos. Pretendía que Sapnap tuviera la mejor follada de su vida y no le importaba si tenía que hacerlo correrse una y otra vez, incluso si sus piernas se encontraban débiles.

A Sapnap le excitaba demasiado cuando Karl lloraba durante el sexo, aquello lo motivaba para continuar. Sin pensarlo y tampoco preguntar, hizo que su mejor amigo cambiara de posición, ahora encontrándose sobre sus rodillas y codos.

-¿Qué haces Sapnap?

-Ni siquiera te puedes mover, déjame hacerlo.

-Pero...quería hacerte sentir bien.

-¿Crees que no lo haces?

-Si lo hiciera entonces no tendrías que buscar a alguien más.

Finalmente Sapnap comprendió que era lo que le sucedía a Karl, pero no sabía qué decir con exactitud, porque era verdad que estaba viendo a alguien más. Era verdad que los fines de semana en las noches se escapaba sin dejar rastros para pasar el rato con otra persona.

-¿Te molesta?

-¿Por qué me molestaría?

-No lo sé, pero tampoco pareces feliz de que esté conociendo a alguien, ¿acaso es envidia o qué es?

-¿Envidia?

Karl ya no quería continuar, se dio la vuelta para verlo directamente a los ojos, pero esta vez era una mirada de "te odio, muérete"

-¿De qué voy a sentir envidia yo? ¿de que vayas por la vida cojiendote a cualquiera?

-Tal vez, solamente cojes conmigo.

-Tal vez ya no debería cojer contigo.

Karl se levantó de la cama aún sintiéndose débil, pero eso no le impidió ponerse su ropa.

-¿Qué dices?

-Lo que escuchaste Sapnap.

-Me parece que estás exagerando un poco la situación.

-¡Claro que estoy exagerando! estoy siendo un dramático solamente por reclamarle a mi mejor amigo que me oculta cosas y sucede que eso que me oculta es la peor mierda que puede hacer. Ándate a la mierda Sapnap. Espero que cuando te suceda algo vayas con Dream y no conmigo.

-Estoy seguro de que Dream no me hará sentir así de mal. Ándate a la mierda tú también.

Karl se fue a su casa. Ellos muchas veces habían discutido, pero no de esa forma.

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si hay algún error m avisan ^^

sweat - karlnapDonde viven las historias. Descúbrelo ahora