Atlantis

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Había pasado un tiempo desde la llegada de esa persona, continuaba en el mismo lugar pero la habían movido y hecho torturas para sacar información. Pero seguía sin soltar nada, solo soltó que era un "cliente" ¿Qué será eso? Era un mar de dudas por la falta de enseñanza por parte de los de la base. Los días pasaban, en algunas de las torturas debía asistir ya que me enseñaban a hacerlo pero en el fondo sentía una sensación extraña al ver cómo se lo hacían a aquella persona. Si tan solo pudiera hablar para resolver las dudas y salvarla de ese tormento. Puede sonar a que en ese tiempo siempre le pegaban, torturaban y etc. Pero la verdad es que Skr solo se atrevió a pegarle una vez que fue cuando se escucharon gritos desde la otra punta de la base, dejando eso a un lado la persona solo recibía algunos cortes suaves así que dentro de todo era amable el trato que le daban. En cambio creo que conmigo lo hacía más, algunos días me mandaba a hacer algunas misiones y al tener un error ese era el castigo así que digamos que lo merecía. Esos días fui hablando con la persona que estaba impaciente por poder irse del lugar así que debía averiguar cómo salir de allí y sacarla. En aquel momento me encontraba en una de las zonas de entrenamiento junto a algunas nuevas personas que habían entrado para seguir a Skr, al parecer la persona tenía razón el era un líder y nosotros obedecíamos.

- ¡Ey! ¿Qué haces aquí quieto?

Levante mi vista del suelo para ver a aquella persona a los ojos, con mis manos le hice gestos de que no hablaba y no podía responder.

- ¿No puedes hablar? --asentí-- Oh entiendo, yo sé lenguaje de signos así que podría ayudarte a comunicarte.

- ¿Qué andan haciendo chicos? ¿Acaso no vinieron a entrenar?

Una persona nueva apareció poniendo su mano sobre el hombro de la otra que hablaba conmigo.

- Claro que vinimos a entrenar, pero resulta que el no sabe hablar.

- Oh vaya --me miro extrañado-- No pasa nada, le podemos enseñar.

- ¡Claro! ¿Tu quieres?

Los dos me miraron, rasque un poco mi cabeza sintiéndome algo extraño pero asentí para aceptar la oferta de aquellos.

- Pero primero entremos, que hace tiempo que no lo hacemos.

- Esta bien.

Con la primera persona que había hablado sería mi entrenamiento, ella agarró una espada al igual que yo. En la base nos enseñaban a luchar con espadas, granadas y algunas armas más. Se me hacía más fácil atacar con la espada que con cualquier otra, nos colocamos delante del otro pero algo lejos mientras el otro animaba. Pongámosle persona 2 y persona 3 para no confundirlos. Persona 2 preparo su espada espada echándola a su hombro mientras se agachó un poco, prepare mi espada observándola para no perder ningún movimiento suyo. 2 salto hacia a mi poniendo su espada enfrente de ella para atacar, antes de que pudiera hacerme algo coloque mi espada de lado para frenar su ataque y empujarla hacia atrás. Fui hacia ella para darle con mi espada pero estuvo a tiempo de detenerme chocando nuestras espadas, tenía su espada recta hacia abajo mientras intentaba con la mía pero aquellos intentos fueron inútiles así que di una vuelta a su alrededor dándole en la mejilla con la hoja haciendo un leve corte. 2 se sorprendió alejándose de mi girándose teniendo su arma lista para defenderse haciéndola chocar de nuevo contra la mía.