EL PROFESOR (Tae Hyung y Henry Cavill) #PURPLE2023

CAPITULO 2

Tuvieron que pasar dos días enteros para que me hiciera a la idea, y luego dos más para que si quiera me atreviera a considerar la posibilidad de, tal como lo pedía la nota, llamar al profesor Henry y quizá hablar un poco más con él. Por una parte sabía que su interés estaba más que nada propulsado por mi análisis, que al parecer le había gustado mucho, sin embargo...algo me decía que había más. La forma en la que me había mirado, como me había sonreído...o puede que fueran cosas mías, pues al fin y al cabo yo era el que había pasado la mayor parte de la clase fantaseando con verlo desnudo.

—...Y luego fui y me metí el pepino por el...

Cuando la voz de Jungkook llegó hasta mí, espabilé e hice un esfuerzo por volver a la realidad. Ambos teníamos un periodo libre, y como para ponernos al día, habíamos decidido tomar algo en unas de las cafeterías de la universidad, pero claro, yo había estado tan concentrado en mi propio y pequeño dilema, que no había prestado la más mínima atención a mi mejor amigo.

—¿Se puede saber qué te pasa, Tae Hyung?—inquirió Kookie, mirándome fijamente mientras revolvía sin parar su café—. Llevo como media hora hablando, y si no es porque me invento la historia del pepino en el culo no me prestas atención—tomó un breve sorbo de su café y luego agregó—: Anda, dime qué es lo que te tiene tan pensativo.

—No es...

—¡Y ni se te ocurra decirme que no es nada!—me interrumpió—. Te conozco, así que sé perfectamente que hay algo que te trae de cabeza—un nuevo sorbo de café, y luego—: ¡Escúpelo! 

Así que lo hice. Desde que Jungkook y yo nos conocíamos, solíamos contarnos hasta el más mínimo detalle. No había ningún tipo de secretos entre nosotros, y si hasta el momento no le había contado lo del profesor, es porque no lo creía lo suficientemente importante. Lo que era, claro, completamente falso, pues de no haber sido importante jamás me habría gastado tanto tiempo pensando y volviendo a pensar. Cuando terminé de hablar, sin embargo, en el rostro de Jungkook imperaba una sonrisa que me desconcertó.

—¿Qué?—le pregunté.

—¡Esto es genial!—exclamó él como respuesta, sonriendo como loco al mismo tiempo—. Acabas de llegar a la universidad y ya andas conquistando...¡Y nada menos que a un profesor! Mis respetos, compañero.

—No empieces—le exigí, señalándolo con un dedo amenazador—. Yo no estoy conquistando ni nada de eso. Si el profesor me dio su número...es porque quiere hablar un poco más sobre mi análisis.

—¡Y un cuerno!

—¡Es un profesor, Kookie! Es comprensible que le interesen ese tipo de cosas.

—Puede ser—admitió él, para luego preguntar—: Pero, ¿Por qué te daría su número? ¿Por qué simplemente no te citó, no lo sé, en la biblioteca o algo así?

Aquello me dejó pensando durante un rato. Sin embargo, justo cuando mi amigo ya estaba mostrando su triunfal sonrisa, encontré mi réplica y se la lancé a la cara:

—Porque de seguro debe pensar que aquí hay muchas personas mal pensadas como tú, que, al vernos hablar, podrían sospechar...y más al saber que no soy su alumno en realidad.

—¡No seas tonto, Tae Hyung!—me riñó, inclinándose sobre la mesa para darme un suave golpe en la cabeza—¿Tienes idea de cuántos estudiantes hay aquí? ¡Cientos, sino es que miles! Los profesores a veces ni se logran aprender sus nombres, ¿y crees que van a saber quién es alumno de quien? No me jodas...

Una vez más, su argumento me pareció tan válido que me dejó pensando. No obstante, al poco rato, él volvió a la carga al decir:

—Tú solo respóndeme algo y luego te dejo en paz, ¿sí?