Parte 5

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El cielo es de un azul claro, con solo unas pocas nubes.

La cafetería ubicada en una esquina alejada de la calle principal, pero con el tráfico peatonal que se podía escuchar de vez en cuando.

Una bolsa que contenía un kilo de granos de café golpeó la barra.

La cantidad de dоѕ tаzаѕ dе grаnоѕ dе саfé caen еn еl mоlіnіllо para соmеnzar а mоlеr lоѕ frіјоlеѕ.

Luego el encargado los puso en un filtro de tela y les echó agua caliente.

El fragante aroma del café flotaba por todo el recinto.

Abrir una tienda de bebidas aquí, entre los edificios de oficinas en las afueras, hacía que las personas que madrugarán para ir a trabajar, olieran ese fuerte aroma del café.

El sabor es muy fuerte, por lo que todos comprarán una taza de café recién molido debido a la fragancia.

Empuja suavemente la puerta de vidrio con una campana colgada.

Cuando fue golpeada, hizo un sonido claro que interrumpió la tranquila mañana del recinto.

Los tres amigos se sentaron perezosamente contra la ventana del piso al techo, que es su lugar favorito.

Las sillas tienen la cantidad justa de esponjosidad para que la gente se relajara, ni demasiado duras, ni demasiado suaves.

El mesero con un delantal de barista azul oscuro sonrió cortésmente y fue atenderlos.

- Entonces sacó ese garfio y empezó a perforar mi diente con pulso de licuadora. -

Continua Shark después de dar su pedido.

- Al parecer tenia una carie, y mientras me taladraba el diente me decía; ¿Te duele? Te Duele ¿Verdad? Vez que te duele. -

Enfatiza la acción con su aleta simulando el movimiento de la mano del dentista.

- Y yo como; ¡No me duele! ¡Nunca me a dolido! Estoy temblando porque me esta taladrando el diente con ese garfio. -

Sus amigos se ríen.

- ¡Le vi la maldad! ¡Quería que me doliera! Es un sádico. -

Toc toc.

Un lobo y una piraña saludan sonrientes al otro lado de la ventana.

Después de un minuto, la campana sonó delante y detrás de la puerta.

Cuando entraron a la cafetería, fueron directamente a la mesa de los oficinistas para saludarse.

- Encantada, soy Webs. -

- Y yo Shark. -

Se dan un apretón de manos con el lobo sonriendo divertido.

- ¡Como una pandilla! -

Con un salto toma asiento.

- Quiero unirmeles. Llamenme Piranha. -

Lo saludan cordialmente con ese nombre.

- Entonces, comencemos. -

El tiburón transmite el comentario de apertura con una sonrisa.

- Para los nuevos, podemos discutir libremente cualquier lectura reciente. -

El pez más pequeño alza la mano.

- ¿Si? -

- Lo último que leí fueron los diálogos de un videojuego. ¿Eso cuenta? -

- Yo creo que si. -

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