capítulo 11 unos niños revoltosos.

871 70 5
                                    

Muchos pensarían que los hijos eran una bendición o algo parecido, pero para Toph Beinfon, la cual era la mejor jefa de policía de Ciudad República, era como una gran patada en su retaguardia.

"Jefa, está bien." - Su una de las mejores oficiales que tenía bajo su mando interrumpió su lamento silencioso.

"Hola, agente Su."

La joven mujer notaría los papeles que estaban en la mesa con los nombres de Ling, Suyin y Kota Beinfon inscritos en ellas. - "Otra vez se metieron en problemas, ¿no es así, jefa?"

"Realmente no sé qué hacer con esos mocosos. Uno pensaría que después de que salen de tu útero, las cosas se vuelven más fáciles, pero no. Cada semana vienen con algo nuevo. Por lo menos, Ling se ha estado calmando desde que comenzó a salir con ese chico Tenzin, y Kota encontró el entrenamiento para las fuerzas armadas de Ciudad República."

"Eso la deja con la menor de los dos."

"Suyin es demasiado parecida a mí cuando era joven." - Inclinándose levemente en su silla. - "A veces quisiera que tuvieran la personalidad de su padre, o por lo menos que me hubieran salido medio controladores como su tía o más tranquilos como su prima."

"Jefa, a veces creo que usted me está dando indirectas para no tener hijos."

"Todavía estás muy joven, Su. Disfruta más tu juventud y piénsalo bien."

"Jefa, ya le dije que me caso la próxima semana. No es que me case y vaya a tener hijos ese mismo día."

"Quién sabe, el bastardo de mi esposo le atinó a la primera."

"Eso me recuerda, el señor Zuko le trajo su almuerzo. Dice que lo disfruté mucho y la espera temprano en la casa o él vendrá a buscarla."

"Parece que tendré que terminar todo este papeleo si es que quiero llegar a casa."

"Sabe que siempre estoy aquí para ayudarla."

"Porque mis hijas no son tan responsables como tú."

"Yo también era un desastre cuando estaba en mi adolescencia."

"Y yo tampoco fui una santa." - Moviendo algunos papeles. - "Ahora, ¿por qué no empezamos con estos?" - El tiempo pasó volando y el día pronto se convirtió en noche cuando las dos mujeres habían terminado el papeleo. - "¿Qué hora es, Su?"

"Ya son las 10 de la noche." - Bostezando un poco. Sin duda, ayudar a su jefa con el papeleo era un trabajo aburrido. - "A veces me pregunto por qué te dieron el papeleo a ti si eres ciega."

"Y yo me pregunto lo mismo." - Sin duda, no se quejaba de la responsabilidad, pero al ser una adulta, de algo te tenías que divertir. Así que hizo lo más maduro que se le vino a la mente con 22 años: hacer un gran espectáculo en medio del consejo que está formado en parte por sus conocidos y ver si es que lograba sacarles algún beneficio o algo parecido que, claro, al final se negaría a aceptar. - "Debo agradecerte por quedarte hasta tarde, oficial. Espero que la boda salga como se tiene planeada y recordarte que tiene los dos días libres para prepararse. No quiero que sea como la mía que apenas tenía tiempo para que me arreglaran el pelo." - Recordando con algo de emoción cómo es que prácticamente se casó con su uniforme de policía. - "Si no fuera por que Katara y Aang me ayudaron, me hubiera casado mientras estaba llena de lodo."

"Eso explica la foto que tiene en su escritorio."

"Jeje, ¿qué puedo decir? No soy de esas chicas que esperaban con ansias su boda como si fuera un cuento de hadas." - Llegando por fin a una intersección donde ellas tendrían que separarse. - "Bueno, creo que aquí es donde nos separamos."

No somos tan diferentes (toph x zuko)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora