Always✨ (Uhtred Ragnarsson)

Capítulo 25

Estaban gritando mi nombre cuando vino Beocca y Aethelwold mientras estaba sentada en la silla y Uhtred, Finan y Sihtric de pie

-El rey y Eduardo han dialogado -respondió Beocca- y han decidido que no habrá juicio ni castigo
A cambio de una pequeña compensación que se pagará a la iglesia

-¿Una compensación? -preguntó Finan.

-100 monedas de plata -volvió a responder Beocca.

Finan sonrió -¿Y eso es todo? ¿Nada más?

-Claro que no -respondió Aethelwold.

-100 monedas de plata -respondió Beocca- y tú juramento
El rey desea que jures ante el heredero a el trono, Eduardo

-Hay una línea sucesoria -volvió a responder Aethelwold- y más herederos

-Entonces lo que pide Alfred es mi vida

-Te pide tú lealtad a Eduardo -volvió a responder Beocca.

-Eduardo es un niño -me miraron- prestar juramento a un niño es entregar tú vida

Finan puso su mano en mi muñeca

-Padre -respondió Finan- el rey pide demasiado

-Lo que debes hacer ahora es considerar lo que pasará -miro para enfrente- si no prestas juramento a Eduardo -apoyé mi espalda en la silla poniéndome la mano en mi boca- morirá gente y no solo los hombres que están aquí sino los de fuera

-Y será culpa de Alfred como todo, los hombres a su servicio le importan una mierda

-A el rey le importan mucho -respondió Beocca.

-Tú Beocca le has servido toda tú vida -me miraron- ¿y para que?
Murmuran sobre la esposa que elegiste
¿Alfred te habría dejado escoger a tú esposa?

-Sin Alfred ni siquiera estaría aquí -volvió a responder Beocca y sonreí de lado- estaría muerto
Sin Alfred no existiría Wessex, no existiría Mercia ni la cristiandad
Habría daneses y nada más -miro para enfrente y me lamí los labios- los campos estarían empapados de sangre y mis tripas colgarian de un árbol
Alfred te dio cobijo

-Me lo gané

-Tienes tierras y riqueza -le miro- comida y bebida a placer

-Me lo gané

-Elige bien muchacha -respondió Beocca- acepta tú castigo o permite que tus amigos se maten entre sí
Todo por ahorrarte las penurias de vivir como una señora

Me levanté tirando la silla a el suelo y Finan se puso enfrente mío cuando nos quedamos callados y Beocca se fue

-Eh -miro a Finan y nos miramos a los ojos- ya

-¿No te dije que sería más que una compensación? -preguntó Aethelwold.

Suspiro fuerte mirando para el lado izquierdo

-Aila -miro a Finan y nos miramos a los ojos- ya

-Aethelwold -respondió Sihtric y se acercó a él- te juro que cuando empiece la matanza, tú serás el primero

Aethelwold se fue y nos quedamos callados

-No habrá matanza -me miraron y me fui cuando me siguieron- Estiapa, no lucharé contra ti ni tampoco contra estos hombres
Iré a ver a el rey

Me miraron

-Me complace oíros decir eso -le miro- el rey es piadoso, reconoce vuestra valía

-Ya lo veremos

Me giré y me saqué la espada cuando se la di a Finan y la cogió

Me miraron cuando miro a Uhtred y le guiño el ojo

Me fui y vinieron detrás mío

Entramos

-Tienes algo que decir al parecer -respondió Alfred.

-Muchas cosas señor

-El buen servicio del pasado no es excusa para quebrantar las leyes -volvió a responder Alfred.

-Pagaré la compensación, pero aunque considero a Eduardo un joven respetable
No le prestare juramento y lo sabéis
Un juramento para proteger a Eduardo lo sería para el resto de mi vida

-Sabes lo que dices -respondió Alfred- lo reconozco y por eso mismo te quiero al lado de mi hijo cuando yo muera y él sea rey

-Tenéis a Estiapa

-Estiapa será su mano izquierda -volvió a responder Alfred- y tú la derecha
No hay negociación posible, ninguna

-¿No os hemos dado bastante?

-Dar lástima no es lo tuyo -respondió Alfred- te estoy permitiendo vivir
Harás lo que te ordene

Se dio la vuelta y cogí mi cuchillo poniéndoselo en el cuello

-¡Estiapa baja la espada! -alcé la voz y me alejé- ¡Que nadie de ni un paso más o lo mato!

-Esto supone tú muerte -volvió a responder Alfred- no hay otra alternativa

-¡Despejad la puerta! -grité y se fueron cuando empecé a retroceder- ¡ahora cerrad la puerta y atrancarla! ¡Que nadie me siga! -cerraron la puerta y nos quedamos quietos- os dimos gloria, os dimos libertad para venerar a vuestro dios y aún así me tratáis como una perra
Debería mataros

-Pues hazlo -respondió Alfred- como la pagana que eres, no tengo miedo

-Os huelo la mierda de entra las piernas

-El cielo me espera mientras que tú arderas en el infierno -volvió a responder Alfred- el Valhalla en una mentira así como tus dioses

Le di un cabezazo y se quejó cuando le di en el abdomen con mi rodilla y se volvió a quejar tirándole a el suelo

Me fui