-Dios es grande -le miro- todo poderoso y explendido
-Decidle que no tenéis que tener miedo -me miraron- dios los bendiga
Se rieron y me fui cuando les quemaron empezando a gritar
Vi a Aethelflaed con Uhtred, Finan, Sihtric y Osferth
-Puedes irte si quieres, no creo que te guste esto
Me fui poniéndome enfrente de Conall
-Oye -respondió Conall- hermana, no hagas esto Si me sueltas te juro que haré lo que me pidas -Harald me dio la antorcha y la cogí- por favor, somos hermanos ¡Finan dile que paré! -gritó y Finan se quedó callado- oye, Aila Haré lo que me pidas por favor
-Va a ser rápido -me miraron- no te va a gustar
Le tiré la antorcha empezando a quemarse cuando empezó a gritar mientras le miraba
Nos quedamos callados y todos gritaron menos Uhtred y los demás mientras le miraba quemándose
Harald se puso enfrente mío a mi lado dándome un beso en la cabeza poniendo su mano en mi cintura y nos quedamos callados mientras le miraba y me dio un beso en la cabeza
***
Fui con Harald y le vi cuando me miró
-Hola -respondió.
-Venía a curarte
Me acerqué a él y se quitó la camiseta
Se apoyó en la mesa y me puse enfrente de él cuando le empecé a curar la herida del abdomen
Echó la cabeza hacia atrás pasándose las manos por su pelo y le miro
Madre mía
Me miró y bajé la mirada
-Es gracioso que sea yo el que necesita que le curen -volvió a responder.
-Si
Seguía curandole cuando nos quedamos callados y acariciaba su abdomen con las yemas de mis dedos lentamente
Nos miramos a los ojos y bajó su mirada a mis labios cuando quedamos muy cerca uno del otro
Nos miramos a los ojos
-Gracias -respondí susurrando.
-¿Por que? -susurró.
-Por cuidarme las espaldas -respondí susurrando.
Dio una pequeña sonrisa mirándome y puso un mechón de pelo detrás de mi oreja mirándonos a los ojos poniendo su mano en mi cuello
-Siempre cuidaré tus espaldas -susurró y acariciaba mi mejilla con su dedo pulgar lentamente mirándonos a los ojos.
Cierro los ojos y suspiro
***
Estábamos sentados mientras miraba el fuego
-¿Por que lo has hecho? -preguntó Aethelflaed.
-Me violo -me miraron- y mató a una persona importante para mi No era más que un cobarde
-Era un sacerdote -respondió Aethelflaed.
-Pues que vuestro dios se ocupe de él -nos miramos a los ojos- y no me hables como si me conocieras Tú siempre lo has tenido todo en la mesa servido -me miraron- como la princesa que eres mientras yo tenía que matar para sobrevivir Así que prefiero que te calles la boca antes de que te la cierre yo Le podría haber hecho el águila de sangre pero quería verlo sufrir con mis propios ojos
-¿Que es el águila de sangre? -preguntó Aethelflaed.
-Se abría a la persona desde la columna vertebral, cortando y abriendo las costillas de forma que parecían alas manchadas de sangre -me miraron- y sacando los pulmones hacia afuera La herida abierta se cubría con sal Eso da más placer que una orgia
Leif y Harald se rieron cuando Sihtric sonrió
Me llamaron y le vi viniendo corriendo a dónde mi
Me levanté y le di un abrazo poniendo mi mano en su pelo
Suspiro y nos separamos poniendo mis manos en su cuello
-¿Estás bien?
-Si -le miro- estoy bien
-Vete con tú padre
Se fue y me volví a sentar
-¿Quién es? -preguntó Finan.
-Se llama Heimdal -respondió Leif- es el hijo de Arne Tiene 12 años
Harald puso su manta por encima de mis hombros
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Estaba mirando para enfrente pensando cuando Finan se puso a mi lado
Nos quedamos callados
-Se que me odias -miro para enfrente- y no te lo discuto, me lo merezco, lo siento -nos miramos a los ojos- pero eres mi hermana Aila, eres lo único que tengo
Le miraba
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-Por favor -nos miramos a los ojos y nos quedamos callados- perdóname
Nos quedamos callados
Le miro con mis ojos llenos de lágrimas y me fui dejándole solo
