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Volver a su habitación había sido una completa molestia. No recordaba nada de lo que había sucedido y eso le atormentaba demasiado. Sabía el resultado, pero eso no era suficiente... ¿Quién había dado el primer paso? ¿Habría sido él quien desesperado se lanzó a sus brazos, o off buscando recordar lo que alguna vez tuvieron? Cualquiera de las dos opciones eran terribles, ya que... de haber sido él, Jumpol estaba sobrio, sabía claramente que aún lo deseaba, cuanto lo amaba, aún después de que estando en pleno divorcio había alegado que no era así, y no solo eso, sinó que también se dió cuenta que después de él, no había estado con nadie más...

Si había sido off, eso significaba que solo era un hombre que gustaba de las aventuras. O bien solo tomó la oportunidad de volver a tener sexo, pues aún cuando estaba con Davikah siempre hizo mención de que él había sido el mejor sexo que había tenido... joder, no, no quería subirse el ego.

No debería de ser así.

Con furia comenzó a meter todo en su maleta, aquello era mejor que pensar en lo pesados que se sentían sus parpados y como sus ojos se llenaban de lágrimas.

Jodido Jumpol que regresaba a su vida cuando menos lo quería. ¡Él estaba muy bien sin ese torpe! No lo necesitaba. ¡Nunca lo había hecho! Pero eso no evitaba que doliera tanto. Lo extrañaba demasiado, lo había querido de vuelta más de una noche y no solo lo extrañaba en su cama, no... off era con quien había querido compartir su vida, pero todo por su jodido egoísmo se fué a buscar lo que él no quería darle.

¿Por qué no cedió?

Davikah le había mencionado que no era culpa suya, o al menos no toda, off también tenía responsabilidades en ese matrimonio, sobre todo porque eran dos personas no una. Si uno pudiera casarse con uno mismo, pues que fácil lo tendría, pero compartir su vida con alguien más no era sencillo porque las personas son egoístas y cada día quieren más y más, y eso había sucedido.

Y no solo con off, sino con él mismo. No ceder no era bueno, ceder demasiado tampoco. Sin embargo, para cuando lo entendió y estuvo dispuesta a ceder, ya era demasiado tarde y off había cedido con alguien más.

Con la poca dignidad que le quedaba en esos momentos terminó de meter sus cosas en la maleta, dejando la habitación hecha un desastre y llamó a recepción para que le mandaran a alguien para sacar su equipaje. Después salió de la habitación. Regresaría a casa y se olvidaría de todo eso.

 Regresaría a casa y se olvidaría de todo eso

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Un mes después.

Dejó de escribir en su computador y se estiró en su asiento. No sabía cuánto llevaba escribiendo, pero se sentía agotado además de que por más que escribiera veía que no avanzaba nada. Se sentía muy frustrado, pues las ideas iban y venían, muchas veces haciendo que terminara escribiendo algo completamente diferente a lo que buscaba para su libro.

¡Así no debería de hacer!

Ya no sabía cuántas veces había tenido que borrar y rehacer cada una de las partes porque no seguía su propia línea del tiempo.

Cenizas quedan...•Off-Gun•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora