DESCARA' ; Lyanno.

━━━━☆ヽEIGHT.

—¿Danna?

—Estoy aquí.—dije gritando un poco para que me escuche, al llegar se quedó algo confundido.—¿Qué pasó?

—¿Y eso que te estás pintando las uñas?

—Para que estén lindas.

—¿Por que no te las mandaste hacer?

Porque tengo otros gastos prioritarios, tal vez.

—Oh bueno, no he tenido demasiado tiempo y mi casero es algo idiota, sube y baja la renta como le place si no quiero gastar demasiado la poder hacer frente a eso, no quiero sorpresas.

—¿Cómo así?

—No sé, un día salió con que debia pagarle como seiscientos dólares más de lo habitual y...—seguí con la mirada sus movimientos, me quitó el bote y el pincel, sonreí de lado al verlo concentrado para pintar solo la uña y no salirse de los bordes.—Soy una experta ah.

—Te temblaba las mano que parecía un fokin' sismo.—solté una carcajada.—Perate' , después me muevo por tu culpa y dirás que no se pintarlas.

—No sería capaz.—rodó los ojos.

—¿Tú me besaste esta mañana?.—me reí al ver su cara de confusión mientras intentaba recordar, negué.—Yo sabía.

—Si te beso ahora, te vas a mover.

Cerró el bote y colocó mi mano hacia un lado, cuando iba a protestar su mano rodeando mi cuello y atrayéndome hacia él hizo que me olvidase de como formular alguna palabra, sus labios envolvieron los míos y le seguí el beso, para mi sorpresa pude hacerme con el control.

—Ya, ya...—susurré cerca de sus labios.

—Pues aléjate.

—Aléjate tú.

—Pero yo no quiero parar.—me dió un pico.

—¿No?

—No.—me trepé.—No, Danna.

—¿No?

—No, después acabamos haciendo el amor.

¿Haciendo que?

—Y ya tuviste tu dosis hoy.

—¿Y no puedo tener doble?

—¿Quieres caminar?

—En ocasiones, no caminar es también una opción.—comenzó a reírse.—Seguro que mi dia no irá para nada bien si no me...—me besó.—¿Me vas a hacer provocarte?

—Ya dije que no, respétame.—suspiré.

—Te salvas esta vez.—cuando iba a bajarme, me agarró.—No, ahora no quiero.

—¿Segura?

—Ya despertaste al indecente.

—Dile que vaya a dormir.

—No funciona así.—se inclinó hacia mi.

—Estoy menstruando.

—Embustera.

—No miento.

—Lo hicimos en la mañana.

—Es un mecanismo de defensa de mi cuerpo, sabe que otro round no es correcto, es pecado. Vea, tener relaciones fuera del matrimonio es un pecado.—su cara de sorpresa me hizo estallar de la risa.—Dale, termina esto.

—Est...—su cel comenzó a sonar.

—Que mucho te buscan.

—¿Celosa?. Es Rauw.