¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Te encontrabas apoyando a tu novio a que ganara un peluche de pingüino. Habían ido a un parque de atracciones y encontraron una de esas pequeñas carpas con minijuegos en los que te dan un premio si ganas.
Llevabas al menos diez minutos mirando a Kai tirar dardos para explotar globos pero no lo lograba.
─¡Me rindo!─tiro el último dardo e hizo una mueca al ver que solo cayó al suelo.
No podías verlo con esa carita triste, no cuando es un día lleno de diversión y risas.
Te acercaste a la mujer del puesto y le entregaste el dinero para volver a intentarlo.
─Linda así déjalo, no lo conseguí yo no creo que tú puedas.─Tu novio intento tomarte de la muñeca.
─¿Disculpa?─te giraste a verlo divertida. Ignoraste sus ocurrencias y tomaste los tres dardos.
Con concentración visualizaste el primer globo de color azul, alzaste tu muñeca y tiraste el dardo con precisión.
Sonreíste al ver que le habías dado. Tiraste el segundo y también lo explotaste.
La mirada de Kai te estaba poniendo nerviosa, muy nerviosa.
Solo uno más.
El último dardo.
─¡SI!─gritaste al ver que también explotó. Kai se tomó la cabeza con sus manos, su novia le había ganado en un juego tan sencillo.
─Aquí tiene.─la mujer le entregó el lindo peluche de pingüino.
Le agradeciste y te acercaste a Kai. Pusiste el peluche frente a el y le diste un beso en la mejilla.
─Tómalo, es tuyo.
─¡¿Enserio?! ¡Gracias!─lo arrebató de tus manos como si fuera un niño pequeño.
─No creas que he olvidado que dijiste que no creías que lo lograría.
─Te amo.─dejó un corto beso en tus labios y salió corriendo feliz con su peluche nuevo.
Rodaste los ojos divertida y comenzaste a correr detrás de el.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
