CAPÍTULO 3

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Theodore Nott

Las fiestas ya habían pasado, Pansy y Blaise habían mandado cartas y regalos como cada año, en cada carta representaban la preocupación que tenían hacia mi, mis respuestas como siempre eran vagas, no tenía ganas de escuchar sus preocupaciones y mucho menos alimentarlas diciéndoles lo mal que la estoy pasando, no tenía sentido preocuparlos, por que aun que intentaran ayudarme, se que seria complicado. 

En todo ese tiempo, ya había podido completar el gira tiempo con éxito, claro, era con un material de mucho menos valor, y apenas era un prototipo, pero funcionaba, podías volver al pasado, pero solamente por cinco minutos, el tiempo suficiente para no hacer una estupidez.

Solo, una herramienta para poder volver los momentos con él, para poder observar mi felicidad por solo cinco minutos...

 Para poder ver su cara nuevamente... 

Tock tock

Se escucha en la puerta, al principio es un toque delicado, pero a medida del tiempo se comienzan a hacer más fuertes, y no soy capaz de moverme.

Era claro quienes eran...

Potter se había vuelto jefe del departamento de seguridad, y su amiga en la ministra de magia, era obvio que me tenían vigilado, aún que yo no hubiera hecho nada, ya me lo esperaba, ya sabía que la información no tardaría en llegar hacia ellos.

Pero había creído que quizás y sería un poco más tardado, que quizás y podría tener una oportunidad de viajar una sola vez, una y ver nuevamente esa mirada orgullosa y escuchar nuevamente su voz diciendo que no estoy disponible y que soy su prometido...

 No quería más, solo verlo.

Mi puerta fue rota. 

luego todo paso tan rápido.

Muchos aurores entrando rápidamente a mi casa, tirando todo lo que estaba a su paso para alcanzar me con desesperación, podía verlos corres hacia donde me encontraba, todo pasaba tan lento, pero sabía que no era así, pude ver como Potter esperaba desde la puerta viendo como sus perros guardianes destrozaban mi casa. 

No me moví, no tenía sentido, no tenia a donde escapar y si corría a esconderme, seguramente los primeros que serían visitados serían Pansy y Blaise y no puedo permitirles darles mas molestias, a si que simplemente me quede sentado. 

De un momento a otro, todo se acelero rápidamente, en un abrir y cerrar de ojos me encontraba en el piso, mi espalda era aplastada por una rodilla mientras podía ver de reojo, como la varita del auror que me había detenido me apuntaba como sin nada. 

No podía mover me, estaba inmovilizado en el suelo, ¿Qué más podía hacer?, no podía correr hacia atrás en el tiempo, claro que no, no soy tan valiente y se que incluso si un poco de valor despertara de mi y corriera atrás en el tiempo, yo mismo sería el que rompería mis propias reglas interviniendo. 

Puedo ver como los otros perros de Potter buscan por toda mi casa, estaban buscando el gira tiempo, pero yo lo tenía colgado en mi cuello en esos momentos, no puedo evitar sonreír al ver la cara de fastidio de Potter cuando este podía ver como sus aurores no encontraban lo que buscaban. 

Siento nuevamente la presión en mi espalda y no puedo evitar removerme incomodo, era obvio que el auror que me tenía retenido me había visto burlándome de Potter. 

Nunca te olvideDonde viven las historias. Descúbrelo ahora