CAPÍTULO 8

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Blaise Zabinni

No era secreto para nadie de Slytherin, ni para ningún sangre pura, incluso podría decirse que todo el mundo mágico sabia sobre eso. 

Los hijos menores de las dos casas más grandes estaban comprometidos desde su infancia, no ha habido poder mágico que pudiera romper ese compromiso. Draco siempre fue un típico niño mimado por sus padres, los cuales estaban encantados por la belleza de su hijo y por la inteligencia de este. Por qué si, aparte de que Draco era atractivo, también era sorpréndete con la magia, aún que su mayor defecto era la burbuja en la que vivía, en dónde gracias a esta no era capaz de reconocer sus errores y aprender de estos.

Lastimosamente ese defecto aún continua con él a día de hoy.

Por otro lado Theodore siempre fue alguien callado y correcto, Theo era un niño comportándose como un adulto, él fue criado bajo la idea de que cuando fuera mayor tendría que hacerse cargo de un inmenso poder político. Lo cual significaba que tenía que ser tan sabio como un viejo, y tan poderoso como un monarca.

Theo y Draco eran tan distintos, así que cuando su compromiso fue pactado, muchos se sorprendieron por esa combinación de sucesores tan extraña. Un niño travieso y descarrilado junto con un joven correcto y tranquilo.

Muchos creían que ese matrimonio terminaría con las dos casas más poderosas, incluso creían que ese matrimonio terminaría incluso antes de comenzar.

Nadie les tenía fé.

Sería mentir si yo dijera en estos momentos que siempre confíe en que ellos se llevarían muy bien, por qué es mentira, conocía perfectamente a ambos.

Draco y Theo antes de saber que estarían comprometidos estoy seguro que en ningún momento se les cruzó por la cabeza que ellos pudieran ser amigos o incluso prometidos, por qué cada uno tenían sus ideales, sus creencias y sus metas eran diferentes, al punto de que estás probablemente no se llegarán a enlazar en algún momento.

Theo era mi mejor amigo, y entendía por qué no le agradaba Draco, era molesto y pretencioso, y la mitad de sus "amigos" solo estaban con él para mantener relaciones políticas, al igual que yo y Theo.

Ellos no se agradaban, pero se toleran entre ellos, con esto fue suficiente como para que sus padres decidieran comprometerlos.

Cuando llegó la noticia, fue como un balde de agua fría para Theo.

Aún recuerdo cómo tuvo que dejar su taza de té antes de siquiera poder responderle a su madre con un muy formal.

— Si madre, comprendo, estaré encantado de ser comprometido con el único heredero de la familia Malfoy

No hubo más, Theo no era mucho de renegar a las peticiones de su madre, por lo menos hasta ese momento él siempre fue incapaz de negarle algo a su madre o a su padre. Simplemente no podía hacerlo aún que quisiera.

Conformé la noticia del compromiso fue avanzando, la convivencia entre ellos era más regular, incluso más forzada haciéndolos hacer cosas que a ninguno de los dos le agradaba.

Cuando llegó el momento para entrar a Hogwarts ellos ya tenían una mejor relación a diferencia de la de antes, ahora eran capaces de fingir correctamente que fueron amigos de toda la vida y que por eso se habían comprometido.

Cuando llegó el momento para entrar a Hogwarts ellos ya tenían una mejor relación a diferencia de la de antes, ahora eran capaces de fingir correctamente que fueron amigos de toda la vida y que por eso se habían comprometido

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