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"¿Podría ser?" Gin murmuró antes de que el hombre saliera a la luz. Era un hombre mayor que se estaba quedando calvo, pero su falta de cabello se veía aumentada por los pétalos morados y amarillos que formaban una especie de penacho en la parte posterior de su cabeza. Una camisa hawaiana y pantalones cortos de color púrpura cubrían su forma, y ​​un par de anteojos redondos se asentaron en su rostro. "Lo es. Es el Viejo Crocus".

"¿Conoces a este tipo?" preguntó Zoro, mirando al extraño con cautela. Algo en él le decía que había más en este hombre.

"Sí", respondió el antiguo pirata de Krieg. "Nos saludó la última vez que entré en Grand Line y nos hizo una pose de tronco".

"¡Hola!" Luffy saludó. "Eso fue genial, pero ¿puedes decirnos dónde estamos?"

"¿No es obvio?" preguntó el otro hombre. "Fuiste tragado por una ballena de la isla".

"¡¿Nos comieron?!" Usopp entró en pánico, otra vez. "¡Todos vamos a morir! ¡Debería haberle dicho a Kaya sobre mis sentimientos!"

"Bueno, tengo el número de Merry, así que puedes llamarlos". Dijo Luffy, sacando el caracol transpondedor de la mochila de Sparky, haciendo que la larga nariz parpadeara y olvidara sus preocupaciones.

"Y-yo... ¿no es demasiado pronto? Ni siquiera sé... si ella siente lo mismo". Dijo Usopp, inquieto como una colegiala y todo sonrojado.

El resto del equipo habría encontrado esta escena muy divertida, si no hubiera una muerte literal cerniéndose sobre sus cabezas.

"¡Ahora no es el momento, Luffy!" Coby lloró.

"Oh, cálmate, muchacho", aplacó Crocus. "Puedo sacarte bastante fácil, pero-"

¡Auge!

Una explosión voló las puertas de una escotilla en algún lugar arriba, llamando la atención sobre un par de figuras vestidas de manera excéntrica, un hombre y una mujer, en un balcón de metal, ambos armados con lanzacohetes.

El hombre tenía cabello pelirrojo de longitud media, un chaleco verde oscuro con un pañuelo rojo y una corona en la cabeza. Dos marcas como el número nueve estaban pintadas en sus mejillas, una debajo de cada ojo y también tenía pantalones verdes de discoteca y botas negras y brillantes.

La mujer tenía el pelo largo de color azul claro recogido en una sola cola de caballo y la piel pálida. Estaba vestida con una blusa corta en zigzag de color púrpura y azul pálido que acentuaba sus activos, un abrigo verde claro y pantalones cortos blancos. También usó botas de tacón para que tuviera la misma altura que su pareja aparente.

Mientras los Sombreros de Paja y Crocus observaban, el hombre de la pareja posó, con una mano tocándose la frente con el arma apoyada en su hombro.

"¡Estamos reclamando esta ballena!" él declaró. "¡Su carne será nuestra gracia salvadora!"

"¡Para proteger a nuestro pueblo del hambre, lo llevaremos a nuestro lugar de vida!"

"¡Negarnos es una locura! ¡No funcionará, así que-!"

"¡Estamos listos! ¡Cohetes, adelante!" terminó la mujer, la pareja disparó sus armas solo para que explotara antes de que alcanzara la pared del estómago. El dúo parpadeó y miró hacia atrás a lo que acababa de suceder.

"¿En serio le tiraste el moco al cohete?" El rostro de Sabo se retorció con disgusto por lo que acababa de presenciar, antes de dirigir una mirada incrédula hacia su hermano.

"¡Eso es genial, capitán!" Bartolomeo dijo con destellos alrededor de sus ojos.

"Parece que eso no fue suficiente, señorita Wednesday", comentó el hombre, indiferente.

"Desde luego que no, Sr. 9", estuvo de acuerdo la Sra. Wednesday. La pareja volvió a preparar sus armas, pero no habían tenido en cuenta a las personas que los rodeaban.

"¡Yo!" Luffy dijo, interponiéndose entre ellos y asustando al dúo, mientras se giraban para mirar el sombrero de paja.

Ambos tenían los ojos muy abiertos y se quedaron boquiabiertos al verlo.

"T-tú... ¡tú eres Mario!" Sr. 9 dijo.

Al ver que estaba de buen humor, Luffy se encogió de hombros. "¡Sí, soy yo, Mario!" anunció, incluso balanceando su brazo con una sonrisa tonta.

La Sra. Wednesday, o Vivi, estaba sorprendida por otras razones. A diferencia de su pareja, ella no estaba asustada... bueno, tal vez un poco. Pero estaba más asombrada al ver al chico, cuando oyó hablar de Mario. Estaba esperando a un bruto, ni siquiera la imagen de la generosidad le hacía justicia.

El pirata no solo era atractivo... la sonrisa bobalicona, el rostro encantador y ese cuerpo increíble... Dios... ya podía sentir que su rostro se calentaba.

'¿Cómo puede alguien llamar pirata a un hombre tan guapo...?' Pero, de nuevo, ¿no se llamaba héroe al pirata que estaba frente a ella?... ¿podría ayudarla...?

Nami, que estaba en el barco, entrecerró los ojos. Sus sentidos hormigueaban por alguna razón. Hm... debe ser el viento de la gran línea o algo así.

El Sr. 9 miró a Luffy y luego volvió al Going Merry, al ver a la tripulación completa, su rostro se puso aún más pálido. Aunque Luffy era un antiguo cazarrecompensas convertido en pirata... no sabían si los ayudaría o los vencería. "¿Qué hace la gente aquí?"

"No estás en posición de preguntar eso", le dijo Nami, saltando de la nave y aterrizando en el balcón de metal. Lo cual, considerando todas las cosas, fue muy impresionante, saltando tres pisos de altura en un solo salto.

¿Qué? Ella también había estado entrenando desde que se unió a la tripulación, acrobacias como esta eran bastante fáciles para ella.

"La pareja de Mr. 9", comentó Crocus desde la isla, relajando su postura. "Así es como se hacen llamar estos imbéciles. Han estado tratando de matar a Laboon durante los últimos meses".

"¿Laboon?" Preguntó Usopp.

"La ballena", explicó Crocus, saltando al Merry con un solo salto y dirigiéndolos hacia una escotilla de metal en el costado del estómago de la ballena. "Algunos piratas se fueron de Laboon conmigo hace muchos años, pero no han regresado desde entonces".

"Así que ustedes son los malos". preguntó Luffy con una ceja levantada. Vivi y Mr. 9 tragaron saliva cuando la sonrisa desapareció del rostro de Luffy. "Hm... ustedes necesitan dormir entonces." Y con un pequeño movimiento del haki de Conqueror salieron, pero Luffy no dejó que la princesa cayera al suelo como la otra. Eso no habría sido como un caballero.

Sabo y Crocus se sorprendieron al ver el pequeño espectáculo de haki. Ese fue un control bastante bueno. "Oye, atrápalos", Luffy lanzó a Vivi primero y luego pateó suavemente al hombre, arrojándolos a bordo.

Todo el tiempo ignorando la mirada de muerte que estaba recibiendo de cierta mujer de cabello naranja.

"¡Te tengo!" Sabo dijo, atrapando a Vivi.

"No, ¿por qué él...?" Mientras Sanji lloraba sangre cuando atrapó a Mr 9, antes de arrojárselo a Gin. ¿Por qué no pudo conseguir a la chica?

"Por las preguntas frecuentes me lo arrojaste". Gin gruñó, quitándose al agente de encima. Quería lanzar al hombre al exterior, pero se detuvo cuando Luffy dijo lo contrario.

"Vamos a mantenerlos aquí después de escuchar la historia del anciano. Además, Sparky átalos, no queremos que se escapen". el mono asintió haciendo su tarea. "Vamos viejo, cuéntanos la historia. Quiero conocer al tipo grande".

La aventura irrealDonde viven las historias. Descúbrelo ahora