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☁️

De un momento a otro, la mitad de los chicos ya estaban subidos en una camioneta, la cual estaba completamente oxidada y el caño de escape soltaba sonidos dudosos de vez en cuando. Nadie estaba seguro de si iban a llegar a la fiesta, y menos con todo el peso que traía encima. Pero de igual forma disfrutaron el viaje a su manera.

Rivers llevaba un pequeño parlante en la mano, pues la radio del vehículo no funcionaba. Ella era la "dj" en esa ocasión, mientras que Aldo era el conductor. La mayoría de los chicos iban en la caja de la camioneta, así que podían sentir el frio aire de otoño golpear contra sus rostros. Para Spreen eso era algo bueno, odiaba el calor y el sudor más que nada en el mundo; por otro lado, Roier estaba sufriendo por cada minuto que pasaba ahí, su ropa aún seguía humeda y sentía que la hipotermia iba a acabar con su vida en cualquier momento.

—Me congelo— Dijo el castaño al aire, sin esperar realmente una respuesta.

—Vos también sos más boludo, hubieras dicho que no y no cumplias el reto— Ivan le palmeó la espalda mientras lo regañaba.

—Yo no soy culo Spreen— Ambos estaban dispuestos a seguir discutiendo, pero una melodía los imnotizó en el momento.

"This thing called love"
"I just can't handle it"

—THIS THING CALLED LOVE— Roier empezó a cantar (o más bien gritar), seguramente despertó a más de una persona.

—I must get 'round to it— Spreen, mucho más tranquilo, le siguió la canción como era de costumbre —I ain't readyyy— Era costumbre que el pelinegro le siguiera el juego en estas cosas, incluso se había llegado a memorizar canciones enteras solo para no dejar solo al contrario a la hora de cantar.

Roier pasó su brazo por el cuello de su amigo y lo atrajo hacia él —Crazy little thing called love—

—Soltame puto— El mayor pidió con un aura agresiva, haciendo que su compañero estalle en carcajadas, dejandolo libre —Casi me cagas matando amigo— Dijo después de tomar una gran bocanada de aire con dramatismo.

—Soporta un poco osito— Roier se acercó a él y lo abrazo.

—Que flasheas loco— Habló al sentir el contacto de su amigo con su piel.

—No seas mamón Spreen, tengo frio— Le contestó e intensificó el abrazo, esperando una reacción negativa del híbrido.

Al contrario, el mayor solo bufó con molestia y correspondió al abrazo, sobandole la espalda con una de sus manos —No te vayas a enfermar eh— Le dijo sin mirarlo a los ojos—Tendrías que haberle pedido ropa a tu amigo—

—¿Quién crees que soy? No seas pendejo Spreen, yo me aguanto todo— Una sonrisa se formaba inconscientemente en sus labios, se sentía cómodo y calido en esa posición, le gustaba estar así con su amigo.

—Mucho no te estas aguantando... a ver Roier— Se alejó del castaño y levantó la mochila que traía apoyada en sus pies. La abrió dejando ver algunas botellas y algo de ropa —Era que después de la joda me iba con Lit a su casa— Explicaba mientras sacaba un buzo morado y se lo ofrecíaa su amigo —Así que traje cambio de ropa, toma—

—Ay gracias— Dijo pícaro, ganandose una mirada de odio por parte de Ivan. Ya estaba acostumbrado a esas cosas, y la verdad le encantaba, podía hacer enojar a su amigo cuando quisiera y su reacción, que a la mayoría le daba miedo, a él le parecía algo tierna, como si un osito de peluche intentara mostrarse intimidante.

Take on me - [ sproier | spiderbear ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora