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Con cuidado dejé el plato con galletas sobre la mesa de la cafetería y tomé asiento junto a mi me mejor amiga, eran seis de la tarde y después de esa hora la temperatura empieza a bajar.

—¿Y qué planes tienes para hoy viernes?

—Tengo que ir a un concierto.

—¿En serio? ¿de quienes? ¿pero quieres o tienes que ir?

—En primer lugar, si, segundo, no se quiénes son y tercero pues si tengo que ir —suspiré no tan feliz.

—¿Pero cómo sucedió?

—Pues es una gran historia la cual me da flojera contar ahora.

—Ay pero dime una pista aunque sea.

Suspiré con nervios antes de hablar.

—Porque, porque... es que.. —Ella me siguió con la vista indicando que continúe — bueno, conocí a un chico.

Me miró asintiendo para que continúe —Aja ¿y?.

—Bueno pues, me invitaron de forma en agradecimiento porque ayudé a unos de sus integrantes creo.

—O sea que vas sin poner un peso en la entrada, serás una impostora.

—Algo así, es que si tampoco voy luego me puedo sentir mal, no quiero quedar mal.

—Ay tú y tus cosas esas, ¿y qué sino vas? ni que ellos fueran conocidos tuyos como para que se sientan mal.

Pensé en lo que dijo, puede que tenga razón, no estoy obligada a ir, ni siquiera se quiénes son.
Puse mis palmas sobre la taza de café y bebi un sorbo.



abstinencia 彡 Ricardo Alcaraz Donde viven las historias. Descúbrelo ahora