El Experimento Callasage

1. La Voz De La Imposición.

En el estado de Canadá, la máxima voz era su presidente, un hombre con la capacidad de hacer que todos sus ciudadanos acataran sus leyes, sus mandatos y que se hiciera de inmediato todo lo que salía de su boca, todos obedecían al presidente Tom Davies sin refutar ni cuestionarse nada, pues tenían miedo de lo que este pudiese hacerles si hablaban de más.

Pero la verdadera historia está dentro de su familia, su esposa, Amanda Davies, era la señora más vanidosa de todo el lugar, su vida se basaba en tardes de bádminton y noches de bingo, la humildad era una palabra que no existía en su vocabulario y mucho menos en sus acciones. La hija mayor, Celia...No hablaremos mucho de ella porque su vida está más vacía que su propia cabeza.

Finalmente estaba Paxler, y de ella si vamos a hablar mucho porque a partir de este momento nunca podrán olvidar su historia. La pelinegra de ojos oscuros y cuerpo esbelto era la única persona que estaba consciente al cien por ciento de lo que pasaba afuera y de lo que pasaba adentro, lo bueno es que ella nunca tuvo miedo de hablar, nunca tuvo miedo de lo que su padre podría hacerle si ella opinaba de más.

Nunca desaprovechaba una oportunidad para comentar abiertamente lo que estaba pensando. <<...porque todos saben perfectamente que tu gobierno es una dictadura>> Expresó un día en el que todos estaban sentados en la mesa cenando y hablando sobre un movimiento civil en contra del gobierno. Todos la miraron, todos la escucharon, y todos se quedaron en silencio unos segundos y cambiaron de tema rápidamente hacia lo delicioso que estaba el plato fuerte.

Su padre no paso eso por alto, la castigo encerrándola en su habitación por un par de semanas y no tenía derecho a ningun tipo de contacto con el exterior, y aunque lo tuviera entonces no tendría con quien comunicarse ya que nadie se acercaba a ella por la cantidad de guardias que llevaba detrás siempre.

Tom Davies mantenía el país en un completo silencio cada vez que se colocaba delante de la multitud y empezaba sus discursos sobre mantenerse unidos para poder afrontar la crisis económica que el mismo había causado, con sus ostentosas fiestas de gala que solo servían para el observar a las jovencitas y luego ordenar que las llevaran a su habitación sin importar la edad que tuvieran, Paxler interfirió en muchas de estas situaciones, les decía que las habían llamado urgente y que tenían que marcharse, o se inventaba cosas con tal de que estas no fueran a parar a manos del dictador.

La esposa claramente sabia de estas cosas, pero se hacia la de la vista gorda con tal de mantener la vida que tenía y poder seguir inyectándose cosas en la cara.

<<...Las personas deben saber lo que pasa con sus familiares que nunca vuelven.>>

<<...No lo pagan porque los impuestos estan demasiado altos.>>

<<...No es democracia, es dictadura.>>

<<... ¿Y cómo quieres que estén contentos si se matan trabajando y el dinero no les alcanza ni para poner comida en su mesa?>>

<<...El pueblo no debe de agradecerte nada, no has hecho nada bueno por ellos.>>

<<...Nunca he dicho que estoy de acuerdo con un dictador y si dicho dictador es mi padre pues tampoco estoy de acuerdo con él.>>

<<...Una jovencita que estuvo en una de las galas, murió la semana pasada por un aborto espontaneo, me pregunto con cuantas vidas has acabado hasta sin darte cuenta>>

Paxler en ningun momento se sintió culpable o arrepentida por sus comentarios, eran totalmente veraces e intencionales. Su padre no la mandaba a matar porque se trataba de su hija y eso levantaría muchas preguntas, lo considero varias veces, pudo haberse inventado mil excusas para hacerla callar y que no lo inculparan, pero lamentablemente el lazo de padre e hija se interponía sacando a relucir lo poco de humanidad que le quedaba.