ME EQUIVOQUÉ || CHEWIS Y PERSTAPPEN

Te fallé

Desde que Checo había firmado para Red Bull 2021 Max y Sergio habían decidido conocerse un poco más y tener una buena relación de equipo.

El acercamiento fue creciendo cada vez que estaban juntos. La química que desbordaban era tan intensa que Max no soportaba estar separado de Checo y cuando lo veía sonriente con alguien más del paddock se enojaba demasiado, quería toda la atención del mexicano solo para él y siempre que veía esas escenas no dudaba en ir a interrumpir el momento solo para dejarles en claro que Sergio era suyo ahora y para los demás era como "No te quiero volver hablando con él".

Llegaba, los saludaba con un fuerte apretón de manos, y siempre terminaba con un "Checo, Horner te está buscando" lo cual claramente era falso, siempre que Checo iba y buscaba a Horner este le miraba como si estuviera loco, pero como conocía a Max reaccionaba inmediatamente y lo ayudaba con cualquier excusa. Después, se hizo costumbre.

A finales del 2020 habían ido a una casa de campo que tenía Max, donde iba a descansar de su padre y todo lo que le abrumaba. Habían hecho carne asada y como siempre las cervezas no faltaron.

Estaban tan borrachos que se reían de cualquier estupidez, estaban acostados en una sábana que habían tendido en el pasto, Max observaba detalladamente a Checo, le encantaba su sonrisa y adoraba esas pecas.

Desde antes que estuviera en la Formula 1, miraba las carreras con su padre que solo juzgaba a los corredores, de vez en cuando veía a Sergio ser enfocado y le ponía demasiada atención, para Max era el piloto más guapo de la parrilla y su sonrisa era de un ángel caído que te incitaba a pecar.

La vez que Sergio gano su primer podio Max lo vio dar su entrevista y le había parecido una persona humilde y luchadora que merecía estar en un mejor equipo, lo había declarado su crush.

Desgraciadamente tuvo que dejar esos pensamientos a un lado cuando su padre descubrió su preferencia sexual y le dio una golpiza que Max deseo que lo matará de verdad.

No había hecho nada malo, solo le había confesado que sentía un poco de atracción por Charles, quería hablarlo con alguien y desde esa vez supo que no podía contar con su padre. Tuvo que distanciarse de Charles y enfocarse solamente en lo que su padre quería que hiciera.

—Checo—. Interrumpió al mexicano que se reía de un chiste tonto que solo él había entendido porque Max había estado en su nube.

Sergio dejo de reírse y llevo su mirada hasta Max que solo lo veía serio, no sabía en qué momento habían quedado tan juntos que su respiración se mezclaba en el aire.

—¿Qué pasa Maxie?—. Estaba nervioso. Max provocaba cosas en él que tenía que reprimir ya que era Mayor que el chico y no debía de pensar en él de otra manera que no fuera solamente amistad.

Todo eso se fue al carajo en el momento en el que Max terminó de acortar la distancia y besaba lentamente al mexicano, bajó una de sus manos a la cintura de este y lo pegó a su cuerpo.

El beso subía de intensidad cada que pasaban los segundos hasta que tuvieron que separarse para tomar un poco de aire.

—Max... No debe...—.

—Shuuu—. Puso uno de sus dedos en sus labios.

—Checo, me gustas como no tienes idea, no soporto estar lejos de ti y no me gusta cuando estas con alguien más—. Confesó.

El mexicano estaba en shock, Max gustaba de él y había dado el primer paso, un sin fin de emociones inundaron su pecho, estaba realmente feliz.

—Tú también me gustas Maxie,
pero...—. No pudo terminar ya que el menor lo había besado nuevamente.

Max estaba que también moría de felicidad, Checo igualmente tenía sentimientos por él, no quería escuchar lo que le iba a decir el mexicano porque ya lo sabía, a él no le importaba la edad que tuviera Sergio.
El que también lo amara era más que suficiente.

Esa noche la luna fue testigo del amor que se tenían.

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En el GP anterior de México Checo había retenido a Lewis para que Max pudiera alcanzarlos y terminar primero para que ya fuese campeón mundial.

El equipo estaba muy feliz, nuevamente habían ganado 1-2, y el campeonato de constructores.

La relación la habían mantenido en secreto, a excepción de los que se habían dado cuenta que prácticamente era la mayoría de la parrilla, eran muy obvios, desbordaban mucha miel y cada que ganaban el 1-2 subían juntos al pódium muy abrazados o cuando uno no entraba en el pódium miraba con ojos muy iluminados, felices y llenos de amor al que se llevaba la victoria.

Sin duda una temporada intensa e interesante.

Pero todo empezó a deteriorarse cuando Max dijo en la entrevista que no ayudaría a Sergio a ganar en su país, que lo obtuviera por cuenta propia.

Esto provocó que el mexicano se sintiera realmente mal, él lo había ayudado cuando lo necesitaba y ahora que él necesitaba su apoyo no lo iba a obtener, pero Max tenía razón, tenía que ganar por sus propios méritos, al fin y al cabo, él era... el segundo piloto.

Ese día Sergio no quiso saber nada de Max, estaba sentido. Así que decidió salir a dar un paseo por su país para despejarse un poco.