El Tritón

Capítulo 8 Visto

Contrabandear a un hombre fuera de la casa antes de la primera luz del amanecer fue mucho más difícil de lo que Zhan pensó que sería. Su abuela era notoriamente madrugadora, por lo que tuvo la intención de permanecer despierto y llevar a Yibo al mar alrededor de las 3:00 a.m., pero se había quedado dormido. Profundamente dormido, Yibo tampoco había tenido el corazón para despertarlo. Ahora eran casi las 6:00 a.m. y el sol ya estaba saliendo, y Zhan estaba seguro de haber escuchado a su abuela moverse en su habitación.

Tingyu se está moviendo. Casi puedo escuchar sus pensamientos, dijo Yibo.

Zhan se volvió para mirar al Tritón. La cabeza de Yibo estaba inclinada hacia un lado. Sus ojos verde azulados eran luminosos mientras se concentraba en escuchar sus pensamientos. Incluso después de tantos años, la sangre de la Casa Liseas corre fuertemente por sus venas.

Zhan apenas se abstuvo de responder, No lo suficiente. En cambio, dijo, espero poder escucharla algún día.

Yibo ahuecó su rostro antes de inclinarse y besarlo profundamente. Vas a hacerlo. Escucharás a todos los Tritones y nunca estarás solo.

Sabes que todavía me asusta un poco, ¿Verdad? Zhan sonrió mientras apoyaban sus frentes juntas. Estar conectado contigo es una cosa, ¿Pero con otros? ¿Con personas que no conozco y que no me conocen? No estoy seguro de eso.

Los ojos de Yibo parpadearon lejos de los suyos por un momento, y una vez más se sintió excluido de los pensamientos del Tritón. Puedes encontrar que las conexiones son así...en su naturaleza.

Se suponía que los Tritones no tenía secretos, pero parecía que Yibo le estaba ocultando algunos en este momento. Se dijo a sí mismo que Yibo debía tener sus razones y que el Tritón revelaría todo a tiempo.

Quizás tengas razón, dijo Zhan. Será mejor que me ponga algo de ropa para que podamos llevarte de vuelta al mar.

Yibo asintió. Desearía que fueras conmigo, Zhan, pero sé que todavía no estás listo.

Zhan hizo una pausa para ponerse sus pantalones cortos. Si Yibo tenía razón, le quedaban tres días en tierra como máximo. Su boca se secó. Él respondió lentamente, tienes razón. Aunque no estoy listo, tampoco quiero estar lejos de ti.

Nunca te dejaré, ¿Recuerdas?, Yibo puso un dedo debajo de la barbilla de Zhan y lo levantó para que estuvieran cara a cara.

Zhan se encontró perdido en esa mirada. Todo se volvió poco importante en comparación con Yibo. Todo excepto el reloj marcando. Su pecho se tensó nuevamente, y esta vez su dificultad para respirar no provenía de una causa física sino mental. Tres días. Solo tuvo tres días. Tres días para decir adiós. Tres días para dejar todo y todos los que él conocía y amaba.

Necesito...más tiempo para despedirme de mi abuela y Jingyu. Tengo que arreglar una explicación sobre mi desaparición. Y entonces...

Yibo tocó las sienes de Zhan y sacudió su cabeza suavemente. Perdóname, no tuve la intención de causarte dolor o pánico con ese deseo. Sé que necesitas tiempo. No te lo quitare.

Los hombros de Zhan se desplomaron y se apoyó en la forma más grande de Yibo.

Sé que no lo harías Es solo...tres días. Eso es todo lo que me queda, si tengo suerte. Solo me golpeó por un segundo. ¿Cómo puedo ir al mar cuando todavía...todavía me asusta?

Yibo estuvo en silencio por un momento. Hoy, después de que vayas al sitio, ¿Vendrás a mí?

Por supuesto...oh, ¿Quieres decir ir al agua contigo?