〝𝐀𝐛𝐨𝐮𝐭 𝐠𝐥𝐢𝐭𝐜𝐡〞ᴍʜᴀ ᴏᴄ ʜɪꜱᴛᴏʀʏ

⁰⁸: 𝚃𝚊𝚒𝚢𝚊𝚔𝚒

Swing Lynn - Harmless

Levantarse temprano era todo un desafío después de que la noche anterior no pudo dormir demasiado bien. Seis de la mañana con posibles treinta minutos, se encontraba junto a su madre secando la ropa pues, al parecer hizo mal sus cálculos y no se secaron, triste.

Lo que se les ocurrió fue hacerlo con la secadora y eso estaban haciendo. Es así como a esa hora se encontraban ya en el proceso de planchado para terminar primero el uniforme de Kaede y dejarlo en un gancho a un lado de donde estaban. Seguían con la de Izuku aún.

—"Izu-kun, ¿es tu novia o algo?"—

—"Por supuesto que no, Okaa-san."—

Aquella era la plática de madre e hijo entre susurros que, según ellos no se escuchaban ya que claramente no querían molestar a Kaede quien pensaban aún dormía plácidamente.

—"Es que... pareces ser tan servicial con ella... no me molesta, sólo... quiero que seas feliz, Izuku."—

Aquellas palabras llegaron al corazón de Deku, lo demostró simplemente dejando salir un "madre..." y de ahí callándose para seguir con su labor. Nunca llegó a pensar en aquello, tener una pareja es algo que parecía no estar en sus planes pues siempre se enfocó en querer ser un héroe como All Might.

Ahora la duda de saber si realmente podría enamorarse o cómo era aquel proceso de enamoramiento carcomía su mente por primera vez en su vida.

Mientras tanto, la albina recién escuchaba su alarma sonar, claro, era una alarma tomando en cuenta que estaba en su casa, quizás podría dormir un par de minutos más y... no, tenía que dar una buena impresión.

Prendió la luz mientras tallaba sus ojos adormilados. Le tomó un momento asimilar en donde estaba antes de sentarse. Entreabrió la puerta para ver si alguien estaba despierto, no se sentía con la confianza de pasear por su casa así cómo así. Para su suerte, ambos ya parecían estarlo.

Y pasaron unos segundos más en aquel silencio en el cual Izuku dirigía su rostro al suelo pareciendo decaído, pensando en aquellas palabras, aquello que significaba el amor. No duró demasiado pues llegó Kaede haciendo que casi saltara de la sorpresa. No logró escuchar sus pasos por andar hundido en sus pensamientos.

—"Buenos días Inko-san, Midoriya-kun."—

—"Buenos días."— Respondieron al unísono.

Pudo observar cómo su uniforme estaba ya en un gancho mientras el uniforme de Midoriya estaba siendo planchado por su madre, supuso que lo habían lavado, secado y planchado también.

—"Oh ¡no tenían qué! muchas gracias."—

—"No te preocupes, después de todo... Izuku insistió en hacerlo."— Contestó su madre, la albina sonrió con dulzura mientras se giraba al chico quien parecía tener un sonrojo de pena. No dijo nada.

—"Gracias a ambos, son muy amables."— Insistió mientras empezaba a acomodarse las muñequeras. Parecía una casa bastante tranquila y silenciosa así que el sonido no le preocupaba demasiado.

—"A-aquí esta tú ropa, puedes cambiarte cuando gustes."— Le dijo acercándole el gancho.

—"En un momento regreso."— Tomó el gancho con cuidado y se dirigió a la habitación del peliverde en la cual comenzó a cambiarse con rapidez.

Dobló con cuidado la ropa que le habían prestado y la dejó sobre la mesa. También aprovechó para peinarse y tomar su mochila. Midoriya después de recibir su uniforme también fue a cambiarse al baño. Luego salió ya cambiado.