D O S

314 22 10
                                    

No era la primera vez, ya había pasado desde que nació la segunda integrante de la familia.
Todos los días, sin falta, su esposo llegaba a casa oliendo a perfume de mujer, o con marcas de lápiz labial en su camisa.
No quería creerlo, pero la confianza que le tenía a su esposo se está desvaneciendo, así como su matrimonio.

-Volvere tarde, no me esperen.- no había beso, ni siquiera para sus hijas.
¿Que rayos está pasando? Se pregunto Louis, cada vez se sentía más solo, a pesar de tener el amor de sus dos bellas hijas.

-No se que está pasando con el Niall, siento una presión en el pecho, nuestro matrimonio se está llendo a la basura.

-Ya verás como se arreglará todo Lou, solo debes esperar, quizá el trabajo lo está consumiendo.

Louis, tu esposo está teniendo sexo en este mismo momento con su secretaria.

Pero todo sabemos que la verdad siempre sale a la luz, sus lágrimas no dejaban de bajar por sus mejillas, por más que tratara de quitarlas con su manga de la camisa.
Tenía en sus manos su celular, y con ello, sus ojos veían las decenas de fotos de Harry desnudo y su secretaria, Rose Jones.

Quería que el llegara a explicarle, quería gritar pero sus dos pequeñas de lo impedían.
Se acercó a la cuna de su pequeña Alya y la tomo en brazos, la pequeña empezó a llorar al ver que Louis no lo hacía.

-No quería creerlo amor, pero todo era verdad... Y yo estúpido cegado por el amor que supuestamente sentía por mi.- la bebé con esfuerzo acunó con sus manitas regordetas la cara del ojiazul, y ahí se dió cuenta de que, si le pedía el divorcio, estaban sus hijas de pormedio.

20 minutos después.

-¡Ya volví!- se removió incómodo en el asiento, se había quedado dormido, bostezo y se miró en el espejo, tenía los ojos hinchados, la nariz un poco roja, y las mejillas sonrojadas, para los demás podría ser tierno, pero para el, derramó todo lo que estuvo acumulado por 3 años.
Bajo las escaleras y fue a la cocina ignorando los llamados de su esposo. -¿Que te sucede?

Que sínico.

-Tendrias que saberlo ¿Cierto? Al fin y al cabo, tu eres el responsable.- el lo miro confundido, saco su teléfono del bolsillo de su suéter verde y se lo aventó sin importar si se rompía o no.

-Y-yo... -sabia que estaba en un problema mayor con su esposo, ¿o ex esposo? Con arrepentimiento y no pudo evitar romperse su corazón al verlo en ese estado, trato de acercarse a el, pero se alejo con la cabeza gacha, veía sus lágrimas caer por sus lindas mejillas.- Lou...

-¿Tanto te costaba decirme la verdad? Tenemos dos hijas, Harry, y a ti no te importo, hubieras pensado en ellas, y en como les afectaría.- no podía gritar, tenía un nudo en la garganta, ademas, si lo hacia Alya despertaría, y no quería que viera a sus padres en ese estado.

-Louis...no quería que...- no pudo terminar ya que sentía su mejilla arder, su esposo le había pegado una cachetada. Nunca había estado de acuerdo con la violencia, pero ya no podía soportar tanta humillación.

-No trates de arreglar nada, no quiero verte ni escucharte.- trato de salir de la cocina, pero Harry lo tomo entre sus brazos y lo estrecho.- ¡Suéltame!- nego con los ojos cristalinos y respiración entrecortada.

-Lo siento, lo siento, lo siento.- ya no era suficiente.- De verdad lo siento tanto.- absolutamente nada era suficiente, poco a poco su corazón se desmoronaba cada vez un poco más. Ya no quedaba amor, ni confianza ni respeto, todo se perdió, y una simple disculpa no iba a solucionarlo.

-Sueltame Styles.- lo aferró aún más, cuando trato de escapar de sus brazos, podía sentir su respiración agitada, sus sollozos salían de su garganta y eso lo hacía más débil ante el.-¡Que me sueltes!- nego y comenzó a llorar aún más.

-No llores, amor no llores.- y esa fue la gota que colmo el vaso, era lo peor que pudo haberle dicho en ese momento, el era el causante de sus lágrimas, y lo peor, es que el aún estaba enamorado de él.

-Se que te hize daño, pero quiero que me des otra oportunidad y te prometo que todo volverá a ser como antes, no hagas algo de lo que te arrepientas por un simple error, tenemos todo para ser felices, no mandes todo a la mierda.

-Yo no cometí ese "error".
Harry, admitelo, ya no me amas, y por ese motivo me fuiste infiel.

-No Lou...yo...- se separó bruscamente haciendo que perdiera el equilibrio.

-¡Para de mentir! ¡Deja de mentir por favor!- el ojiazul elevó la voz sin darse cuenta de que su pequeña ya estaba escuchando los gritos.

-¡No lo hago!- dijo con el mismo tono.

-¿Papi? ¿Papá?- dijo la pequeña ojiverde mientras se tallaba sus ojos y sostenía su osito de peluche en otra mano.- ¿Están peleando?

La inocencia de los niños es algo que debemos cuidar.

-No amor, solo estamos hablando sobre los preparativos de tu cumpleaños.- la menos se acercó y levanto su mano.- Ven vamos a la cama.- la pequeña se despidió de su padre y se fue. Cuando Alya cayó en los brazos de Morfeo, el ojiazul se dirigió a la habitación que compartía con su esposo-ex esposo- saco sábanas, colchas y almohadas.

-Lou, hablemos por favor...- hizo caso omiso, y salió de la habitación dirigiéndose hacía la sala acostándose en el sillón.

"Ya vez, tu esposo está mejor conmigo, te gane"

Ese mensaje y las fotos no paraban de dar vuelta en su cabeza, escondió su rostro en la almohada y grito desahogandose un poco. Y luego de unos pocos minutos cayó dormido.

Nadie sabe lo que tiene hasta que lo pierde.






❁•❁•❁•❁•❁•❁•❁•❁•❁•❁•❁•❁•❁•❁•❁•

Holaaa, cómo se encuentran?

Les dejo el segundo capitulo, espero que les guste mucho.

-All the love.

Dan

Infiel [l.s]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora