Tres metros sobre el cielo. Larry Stylinson.

15

Las mañanas eran cálidas. El viento no era muy frío y las personas podrían asegurar que despertaban con una capa de sudor en el cuerpo.

Gemma ya tomaba su café. La taza blanca en su mano mientras ella, vestida con camisa blanca y pantalones negros, revisa el periódico del día. Las novedades están en portada.

Una foto de Harry con las cejas fruncidas y un castaño aterrorizado, mientras van en la motocicleta de Harry le toma por sorpresa. Y el encabezado está en letras grandes y negras. «Carreras ilegales provocan altercados y peleas» y la nota que hablaba del lugar ese dónde Harry se metía todas las noches. Una especie de empresa abandonada que se había convertido en un lugar para ¿convivir? Bueno, que los jóvenes hicieran lo que ellos desearan.

Y en la zona centro de la cuidad. En el edificio de apartamentos más lujosos de la cuidad, H ya subía como Spiderman las paredes, colgándose de las ventanas y balcones para llegar al piso indicado.

Zayn le lanzó un póster enrrollado.

Y entró en la habitación. Olía a Louis, todo lo que Louis era lo sabía representar muy bien en su espacio. Las paredes con colores fuertes pero muebles cálidos. Miro por un momento todo: las fotos de Louis con su familia, amigos, de él. Tomó una de esas pequeñas fotos y la guardo en su pantalón.

Si, era ilegal, aterrador, enfermo pero que los latidos de su corazón al ver a Louis lo volvían loco y le invitaban a cometer de todo para ver la sonrisa iluminada del bonito con ojos azules.

Y subió a la suave cama, no queriendo porque probablemente dejaría polvo en las cobijas. Y con cinta logró su cometido.

Al mirar al techo, la imagen de él y Louis en la motocicleta se podía apreciar y Harry se carcajeo un rato antes de salir, cerrar la ventana y borrar su existencia del lugar. Sin olvidar sacudir las cobijas de las huellas de sus botas.
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Para cuando la luna ya dejaba que la mirarán, Louis salía de tomar una ducha. Su cuerpo lo cubría una bata y tenía un cepillo peinando sus cabellos.

Lottie estaba saliendo de su habitación y, como era costumbre, hablaba por teléfono sobre cosas de chicas en secundaria. Louis se acostumbró desde el primer año de secundaria.

—Si, yo sé que él es súper fuerte, la vez que la chica está de cabello de colores, Eliza, iba por caerse en las escaleras la salvó...

Al mirarlo, inmediatamente le preguntó si iba a salir.

—No.

Y Louis la dejó en el pasillo y entró en su habitación. Peinándose aún, se tomó el tiempo de mirarse en el espejo y notó que siempre estaba con las mejillas rojas. Cómo si fuera una jodida princesa que espera a su príncipe en la torre.

El móvil timbró y adivinó que Niall estaba enviando los mensajes. Con pereza lo tomó y mejor se acostó, dejándose caer en la suavidad de su colchón.

El mensaje era una foto de H, recargado en un barandal y distraído, el ambiente parecía de fiesta. Había un mensaje después.

"Mira quién te está esperando..." La sonrisa se formó en su rostro y bajó el celular apoyándolo en su pecho. Miró al techo y menuda sorpresa se llevó.

El poster gigantesco estaba pegado en su techo. Una maldita foto de H en su motocicleta y Louis con cara asustada ahí, en todo su esplendor.

Su corazón latió a más de 100 veces por segundo y río, encantado y enamorado. Se puso de pie y saltó para tocar la foto, siempre con una sonrisa.