Un largo camino de rosas albo adornaba el lugar, la oscuridad en el cielo les acompañaban aquella noche.
Una tenue y apenas perceptible melodía resonaba a lo lejos, algo oculta entre risas y susurros.
La luna llena, cuan delicada y hermosamente destacaba entre tantas estrellas iluminaba el camino de piedras que dirigían a un salón cristalino, podrías visualizar pequeñas figuritas en ella, alfas y omegas se encontraban en el interior y cercanías de ésta.
Un eterno y profundo suspiro llenó el vacío alrededor de quien se encontraba observando el cielo nocturno.
Sus manos pálidas reposaban sobre su vestido. Bordados sutiles, piedras preciosas y encajes en su cintura hermoseaban su esbelta figura. Portaba un aire de elegancia, y los colores pálidos le agregaban esa pureza que emanaba Xian Le cada que daba paso entre la multitud. Sus piernas eran cubiertas por medias blancas, resguardándolo del frío en el exterior, aunque bien su vestido ayudaba en ello, el largo y caída de éste eran suficientes para cubrir tres cuartas partes de su cuerpo. Sobre su rostro un maquillaje sutil contrastaba con el castaño de su cabello, recogido y adornado en perlas, pequeñas ondas escapando a los costados de su rostro y largo del cuello.Tal belleza era digna de ser considerada una obra de arte. Quien viera lo creería así.
"Xian Le, es hora." Una dulce voz inundó los sentidos de aquella figura vestida completamente en blanco. Volteó su rostro con un pequeño movimiento e inclinó ligeramente. Sonrió dulcemente y siguió a quien fue en su búsqueda.
El susurro de voces fue aumentando en intensidad cada que sus pasos se acercaban a aquella esfera de cristal, el aroma a flores le recibió cálidamente junto a una multitud que era incapaz de visualizarlo.
Era noche de Iniciación para muchos en aquel salón, omegas entre veintiún y veintisiete años se presentarían frente a la luna. Alfas en un rango relativamente similar de edad se reunirían allí en búsqueda de su pareja destinada. Ambos, tanto alfas como omegas eran pertenecientes a la Minoría Selecta, por ello, el entusiasmo de enlazarse entre personas de su mismo estatus social era importante en estas ceremonias.
Xian Le fue solicitado particularmente esa noche para dar inicio a la ceremonia, su técnica en el ballet era destacable entre los omegas de alta sociedad. Madam Huang, quien había solicitado su presencia, mantenía una relación cercana a él, por lo que no bastó que insistiera más de una vez para que su petición fuese aceptada.
Daría inicio con una melodía para posteriormente cederle el lugar a las formalidades. Una vez finalizada su danza los omegas partícipes de la Iniciación atarían una tela aterciopelada de color cremoso alrededor de cada muñeca y dejarían al descubierto el aroma de sus feromonas por breves segundos una vez terminado los lazos en sus brazos. Continuo a este acto se les permitirá un tiempo no mayor a diez minutos para escabullirse en el laberinto de rosas a unos metros del saloncito. Aquellos alfas interesados particularmente en una persona serían capaces de distinguir su aroma aún cuando existiese la presencia de otras feromonas escabulléndose por el aire. Captada la esencia de los omegas deberían ir tras su búsqueda entre confusos caminos de rosas para finalmente conseguir uno de los dos lazos atados en las muñecas del omega y así, reclamarlo como suyo e iniciar el protocolo de cortejo correspondiente.
Sus pies se posaron sobre el piso, firmes pero con delicadeza. Los murmullos fueron cesando poco a poco y el silencio reinó entre las paredes de cristal. La atención estaba en aquella persona de pie. La luna llena recaía sobre el chico vestido en ropas finas y pulcras, sus brazos delicadamente por sobre sus hombros y su rostro inclinado hacia su costado daban una vista maravillosa de su perfil, las perlas usadas como adorno en su cabello capturaban la luz del cielo, reflejando uno que otro destello en los ojos de la multitud que lentamente se acercaba y rodeaba los alrededores de su persona.
El arpa dio inicio a la melodía siendo acompañada con otros instrumentos de cuerda y junto con ello la postura de Xian Le se fue deslizando suavemente, sus piernas ligeras retomaban la postura de sus muchos ensayos, sus brazos formando un arco por sobre su rostro y junto con ello la diestra de sus piernas se extendió en dirección al cielo, las capas inferiores del vestido cayeron frágilmente por su extensión, dejando al descubierto parte de su delgada figura. Los instrumentos hacían del ambiente un lugar mucho más íntimo y sereno entre aquellos jóvenes que ansiaban pronto conocer su futuro destinado.
La silueta en el centro del salón giró sobre uno de sus talones, su rostro impasible más sus ojos reflejando el sentir en su corazón.Recordaba, hace algunos años, cómo las ansias de un pequeño omega añoraban ser partícipe de eventos como en los que se encontraba, y no precisamente siendo bailarín, más bien encontrándose en la situación de aquellos omegas, aquellos que adornaban la unión de su antebrazo y mano con telas de terciopelo.
Si bien, el amor y pasión por la danza le acompañaría hasta el final de sus días, el deseo por ser amado y, amar, era algo que inundaba su corazón de una sensación inexplicable y que ansiaba experimentar en algún momento de su vida, tal como lo vio en sus padres. Fatal sería su suerte cuando a una edad no muy temprana coincidió con aquella persona que le privaría de tales experiencias, tomando a propia ventaja la pasión por el ballet de Xian Le.
Su base en punta giró en dirección hacia atrás, apoyando por completo el peso en su talón, sus ojos se posaron por breves segundos en aquellos rostros que le veían, lograba distinguir entre ellos algunas caras conocidas, volvió su atención a sí, deslizándose en diagonal hacia uno de sus extremos, sus pies pisando como si en ellos algo quemara, su espalda alineada perfectamente como era característico en el baile. Al llegar a la esquina del escenario, mismo que había sido preparado de forma no muy ostentosa para que destacase únicamente Xian Le, realizó un "balance" sobre su izquierda, alzando sus brazos completamente ligeros, como si de una delicada criatura se tratase.
Entre los muchos alfas y omegas que disfrutaban del espectáculo las ansias por tener la oportunidad de acercarse a él una vez finalizara su presentación incrementaban con fuerza. Aquel joven adornado en perlas y prendas blanquecinas era reconocido por poseer una personalidad arisca y poco interesada en crear vínculos con alfas, así era mencionado muchas veces por Jun Wu y era reafirmado por Xian Le en las ocasiones que alfas se le acercaban fracasando en el intento, recibiendo como respuesta absoluto silencio por parte del omega o miradas dulces que le rechazaban afligido. Si bien, los intentos por acercársele fueron en vano para muchos pretendientes, su comportamiento y acciones hacían de él una persona extremadamente dulce que en muchos aún causaba cierto interés.
Su espalda y rostro cayeron en un ángulo perpendicular al suelo, dando en vista de otros su contorneado pecho y cintura, los cuales eran acompañados por telas traslúcidas sobre blancas, y en ellas, eternas hiladas de piedrería y adornos resplandecientes. Al caer su rostro atrás, un cuello completamente expuesto y un par de ojos que cerraron débilmente por la encantadora melodía pudieron haber sido acompañados por una sutil y apenas perceptible fragancia que se escapaba de su dermis sin que lo notase.
Sería posible que la figura que culminaba con el baile no notase este pequeño percance ocurrido, pero distinto fue para aquella persona que estaba de pie entre la muchedumbre, quién reacio a desviar su atención mantuvo su mirada fija en aquel omega que desprendía un aroma a jazmines, el cual fue disipado rápidamente entre la ovación de omegas y alfas, quienes ansiosos se preparaban para dar comienzo a la Ceremonia de Iniciación.
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Hola!
Ayyy, es la primera vez que intento escribir una historia como esta, espero que les guste y disfruten tanto como yo.
Por favor, si notan alguna falta de ortografía avísenme para corregirla.
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Rosas y Jazmín (tgcf omegaverse)
RomanceEsta historia está basada en el siglo XX, tomando como referencia el ballet de aquel momento y sus dificultades al ser un arte que apenas comenzaba a ser reconocido. Es un mundo omegaverse, si este tipo de historias no es de tu agrado, te recomiendo...