El Alma de una Canción (SasuSaku)

4. Una tarde complicada

-¡¿Cómo que te besó?! Sakura, quiero todos los detalles- Decía Ino emocionada al teléfono.

-Es un completo idiota, creo que lo prefería cuando ni volteaba a mirarme- Sakura estaba muy molesta con las situación, se asomó a la ventana y observó como Sasuke recién arrancaba su bonito convertible negro. -No te sorprendas si el lunes lo ves con un ojo amoratado

-¿Lo golpeaste? ¿Pero por qué? 

-No tenía derecho a besarme sin mi consentimiento, ni siquiera fue una situación romántica, incluso me dijo que era una molestia.

-¿No has oído que del odio al amor hay solo un paso?

Mientras las chicas se entretenían hablando por teléfono, Sasuke a penas podía conducir, no podía abrir el ojo, por lo que se demoró más de lo esperado a llegar a casa.

Tomó una pequeña bolsa de hielo de la nevera y la puso contra su párpado para bajar la inflamación, luego se vio bien en el espejo, estaría así por días.

-Cariño, no sé en que problemas te estás metiendo, pero esto no va a evitar que termines de limpiar el desastre que hiciste anoche

-Sí mamá...- Dijo Sasuke mientras tomaba una escoba 

El fin de semana pasó y todos regresaron a la rutina del día lunes, Sasuke entró campante a la escuela como siempre, ya no tenía el ojo inflamado, pero sí que lo tenía morado, lo que provocaba un montón de murmullos entre los demás estudiantes, mientras se movía entre los pasillos para llegar al entrenamiento se topó con Sakura, quien le dio una sonrisa triunfante y pasó de largo, luego la escuchó saludar a alguien.

-¿Qué tal todo?

-Genial... ah, ¿te parece venir a mi casa hoy para ayudarme?

-¡Claro! ¿Puedo llevar a una amiga conmigo?

-¡Por su puesto!

-Te veo en la tarde Naruto

Sakura continuó su camino, Sasuke abordó a Naruto preguntándole que era lo que pasaba, naturalmente su amigo le explicó que necesitaba ayuda con algunas materias y que Sakura como siempre lo ayudaría.

-Acepto tu propuesta...

-¿De qué hablas Sasuke? yo no te propuse nada.

-Hablo del otro día, de ir a estudiar con ustedes

-Pero...

-Estaré en tu casa en la tarde- Sasuke se fue directo al entrenamiento sin importarle nada más

-Está bien...- Naruto quería mucho a su mejor amigo y nunca le decía que no, pero esta vez él tenía planes, por fin le iba a confesar su amor a la chica de la que había estado enamorado desde niño.

Las clases pasaron, Sakura se dirigía a casa de Hinata para llevarla con ella al hogar de Naruto, estaba muy nerviosa.

Sasuke conducía tranquilamente dirigiéndose a la casa de su Naruto.

Pasaron los minutos, Naruto salió a abrir la puerta, topándose con Sakura y Hinata.

-Creí que traerías a Ino...

-A ella le interesa más la práctica de animadoras- contestó Sakura divertida.

-Ah... bueno... pasen- Naruto puso la mano en la espalda de Hinata, quien soltó un chillido y se puso como un tomate- ¿Pasa algo?

-Ah... no... Na... Naruto

Naruto no dejaba de sentirse incómodo con la presencia de Hinata, y no es que le cayera mal, simplemente no le agradaba ni le desagradaba, no podía decirle ni una palabra sin que se pusiera tensa y eso lo tensaba a él. Después de un rato volvieron a tocar el timbre, Naruto fue a abrir la puerta y dejó pasar a Sasuke, quien se metió a la sala como si fuera su casa, a la madre de Naruto no le molestaba, ya era costumbre que Sasuke pase ahí muchas tardes, era casi de la familia.