31. Entre la vida y la muerte

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-Por favor, por favor, por favor...

Ino, Hinata y Naruto lloraban a mares en el hospital, suplicando que sus amigos estuviesen bien.

El rescate fue complicado, dado el derrumbe, los bomberos tardaron en encontrar los cuerpos.

Obito: Muerto.

Madara: Inconsciente dados los múltiples escombros que cayeron en su cabeza.

Sasuke: Inconsciente, su estado era similar al de Madara.

Sakura: Inconsciente, su estado era crítico.

Los tres entraron a cirugía en cuento llegaron al hospital, Lo de Sasuke no era tan grave, debían cauterizar algunas heridas internas, curar tres costillas rotas, y sacar la bala que tenía alojada en el hombro. Aún así, al salir del quirófano lo llevaron a cuidados intensivos, su cuerpo estaba muy lastimado al tratar de proteger a la pelirrosa.

Madara tuvo una cirugía más complicada, los huesos de su cráneo estaban prácticamente pulverizados, necesitaban realizarle una reconstrucción total; también tenía rotas ambas piernas, las cuales no soportaron el repentino peso del edificio sobre él.

Sakura no tenía tanto daño en su cuerpo, pero su estado era crítico, la bala estaba alojada y bien escondida en sus entrañas, había perdido mucha sangre y casi no tenía posibilidades de sobrevivir, necesitaron varias unidades de sangre para la cirugía, además que una de sus piernas había quedado atrapada entre los escombros, fue una fractura simple, pero su vida colgaba de un hilo.

A Karin y a Naruto también los internaron, dadas las torturas y falta de alimento que sufrieron por días. La diferencia era que Naruto no había pasado tanto tiempo en ese sótano y su psique no estaba deteriorada, por lo que el rubio podía pasearse por el hospital sin desprenderse del suero que tenía conectado a su brazo, iba en compañía de sus dos amigas. Karin no tuvo la misma suerte, sufrió más torturas, sumando a que toda su familia había sido eliminada, por lo que, una vez que su cuerpo estuviese recuperado, la derivarían al área psiquiátrica.

La familia Haruno no tardó en aparecer, la madre de Sakura lloraba desconsoladamente, nunca había sido muy cariñosa con su hija, y eso le pesaba en el alma, puesto que la amaba con todo su ser y cabía la posibilidad de perderla para siempre. Su padre, por el contrario, trataba de mantener la calma "Mi pequeña flor es una chica fuerte" decía en voz alta para todos, pero Naruto sabía que lo decía más para sí mismo, para darse fuerzas y así poder correr con todo lo que le pedían los médicos.

Sasuke despertó.

El joven Uchiha, después de unos cautelosos exámenes, fue llevado a una habitación normal. Sus amigos corrieron a hacerle compañía, él aún estaba mareado, pero sabía y entendía perfectamente lo que estaba pasando.

-Hola viejo amigo, ¿Cómo te sientes? -Preguntó Naruto con una cálida sonrisa.

Sasuke logró enfocar, su mirada los recorrió a los tres de pies a cabeza, luego comenzó a buscar desesperadamente en toda la habitación.

-¿Y Sakura? -Preguntó débilmente.

Hinata y Naruto se miraron con preocupación, Sasuke insistió.

-Aún está en cirugía... -Dijo Ino con la voz quebrada -Dicen que su estado es crítico... -continuó.

Los ojos de Sasuke se llenaron de lágrimas, pero trató de contenerse, no quería llorar ni mucho menos imaginarse lo peor.

Pasó una hora más. Sakura salió de cirugía, directo a cuidados intensivos.

Los padres de Sakura hablaban con los médicos, su madre echó a llorar una vez más al escuchar lo que el médico de cabecera les dijo. Naruto escuchó todo a la distancia, su corazón se encogió y regresó a la habitación de Sasuke con sus amigos, tenía la mirada baja.

-¿Qué pasó? -le preguntó Hinata.

-¿Ah? -Naruto levantó la cabeza de golpe y fingió una sonrisa -Sakura ya salió de cirugía.

Las chicas se alegraron, pero la mirada de Sasuke continuaba sombría.

-¿Qué dijeron los médicos? -preguntó tajante el Uchiha.

Naruto lo miró, no podía fingir más esa sonrisa, Sasuke lo leía como un libro.

-Dijeron... que dado a que la bala se alojó en su vientre, el impacto causó mucho daño y que probablemente no pueda tener hijos...

Ino y Hinata palidecieron, Sasuke se quedó sin aliento.

-Pero eso es lo de menos... -soltó Naruto

-Habla... -Sasuke se estaba desesperando.

-Dicen que su estado es grave, que todo depende de hoy y de cómo reaccione su cuerpo a la cirugía, pero que probablemente no sobreviva la noche...

Sasuke abrió los ojos enormemente. Ino y Hinata echaron a llorar.

-¡ES MENTIRA! -Sasuke gritó con fuerza.

-Sasuke, cálmate por favor...

Sasuke gritaba amargamente, lo que alertó a las enfermeras, que entraron corriendo a la habitación, y dado el estado incontrolable en el que se encontraba, tuvieron que sedarlo, y sus amigos tuvieron que salir de la habitación.

Las horas pasaron. La hora de visitas se acabó. Hinata se aferró al cuello de Naruto y lo abrazó con fuerza, para luego irse con su padre y hermana, quienes se habían quedado toda la tarde en compañía de Jiraiya y los Haruno.

Jiraiya, abrazó a su nieto.

-Es una buena chica, Naruto, no se despegó ni un momento de ti. -Le dijo para luego guiñarle un ojo e irse a casa.

Naruto sonrió tímidamente. Ino lo abrazó con cariño.

-Cuida de ambos mientras estás aquí, ¿sí? si pasa algo, por favor no dudes en escribir -Recomendó Ino, el rubio asintió con la cabeza y se fue.

Naruto pasó una última vez por la habitación de Sasuke, él aún dormía serenamente. Entonces regresó a su habitación, le darían de alta al día siguiente.

Eran como las 3:07 de la madrugada. Sasuke se despertó repentinamente y se sentó de golpe, pero el agudo dolor de las fracturas le recordaron el lugar en el que se encontraba, volvió a su realidad. Se levantó tan rápido como su adolorido cuerpo se lo permitía. Caminó lentamente por los fríos pasillos del hospital, hasta llegar al área de cuidados intensivos, el guardia dormía, lo que le permitió escabullirse, se puso el respectivo traje de bioseguridad e ingresó al área.

Pasó al lado de Madara, por un momento quiso quitarle los tubos y cables que lo mantenían con vida, pero se contuvo, él debía pagar por todo el daño que había causado.

Continuó caminando y buscando, hasta que llegó a la camilla en la que se encontraba Sakura. Al verla en ese estado, una lágrima rodó por su pálida mejilla, se sentó a su lado y tomó su fría mano.

-No sé si puedes escucharme, pero de ser así, por favor... por favor lucha, quédate aquí, tienes mucho por vivir y muchas cosas por hacer... -se detuvo un momento para pensar bien en lo que estaba a punto de decir -aún si no es conmigo... porque yo entendería que no quieras volver a verme después de todos los problemas en los que te metí, pero te juro, Sakura te juro que prefiero mil veces a que vivas lejos de mi antes que tener que visitar tu cadáver a diario, aunque siéndote honesto... si tú decides irte esta noche... yo te voy a seguir... -La voz de Sasuke estaba cada vez más quebrada, apretaba su mano.

De repente un médico de guardia lo descubrió.

-Joven, no puede estar aquí, debe salir o llamaré a seguridad -lo tomó del hombro.

-Por favor no me separe de ella- Le suplicó el Uchiha, pero de poco sirvió, comenzaron a discutir.

En medio del forcejeo, se escuchó un ligero quejido. Aquel médico y Sasuke se miraron y luego dirigieron la mirada hacia la pelirrosa.

-¿Sakura?



Me dio emoción cuando escribí el mini discurso de Sasuke :'v

Espero les esté gustando :D

GRACIAS POR LEER :3

El Alma de una Canción (SasuSaku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora