• Lᴇᴛᴛᴇʀs ᴛᴏ ᴛʜᴏsᴇ I ʜᴜʀᴛ •

• Cᴀʀᴛᴀ I •

Carta a Emmanuel...

Cariño, ha pasado mucho tiempo desde que escribí algo para ti, realmente lamento el no haber puesto más de mi parte en nuestra relación y aun así quisiste casarte conmigo, cuando te hacia berrinches y discutía contigo por una tontería, tú siempre buscaste lo mejor para mí, hasta ahora que ya no estás, que vivo con tu ausencia me di cuenta de tus palabras pues siempre te dije que eras muy duro conmigo y no era así.
Solías decirme “¿crees que soy duro? No sabes lo dura que es la vida” y era verdad, la vida me a tirado una tras otra vez, tu partida me hizo más fuerte, poner en práctica lo que me enseñaste, valerme por mi misma, superarme, hacer algo de mi vida, y juro que en cuanto tenga mi título iré hasta donde estas para mostrarte.

Tal vez puedes estar decepcionado porque cosas que para ti serían tontas me estan afectando pero no soy tan fuerte como tú, sigo aprendiendo, logré salir de mi zona de confort cuando te fuiste, estoy consciente que me perdí por unos meses en el alcohol, en el tabaco, en algunas drogas que afortunadamente ya dejé, ahora trato de llevar mi vida más saludable, leo mucho, me volví más unida con mi familia que parecían extraños cuando ya no te tuve conmigo, papá aún llora mucho la partida de Angélica que estoy segura está contigo esperando hasta que él muera.

Estoy por cumplir veintiséis años, ya soy más grande que tú, no puedo creer que hace cuatro años que dejaste este mundo, adopte un poco de ti estilo y ya no la niña que se vestía con colores rosas y pasteles, me tatue mucho, tengo veinticinco tatuajes, en algunos días serán treinta y uno, mamá dijo que el máximo eran veinte, creo que ya me pasé un poco.

Una noticia que posiblemente ya sabes, eres tío, tu hermano Jair es papá y es una casualidad tan grande que él y tu hermano Jonathan cumplan años el 07 de marzo, tu cumpleaños era el 08 de marzo y el de la pequeña Sofia es el 09 de marzo, si este 09 de marzo te convertiste en tío de una hermosa princesa, estoy segura que aunque no te gustabas los niños, habrías adorado a esta pequeñita y que aprendería muchas de tus actitudes, le habrías enseñado a andar en bicicleta, la llevarías a taekwondo con nosotros, le habrías enseñado a cocinar.

No hay día que no te extrañe, aunque debo admitir que ya no como antes, ya puedo hablar de ti sin sentir dolor, puedo pasar por donde moriste, ya puedo sonreír si llego a ver una foto tuya, pues te recuerdo como una hermosa etapa de mi vida, gracias porque me diste fortaleza, gracias porque en un principio hice las cosas por ti y después las fui haciendo por mí, a lo que me refiero es que fuiste ese impulso para seguir viviendo aún cuando ya no quería.

Fuiste un amor tan lindo, mi primer amor. Y aunque tuvo que terminar, te llevaré en mi corazón, guarde tus fotos, guarde tus cartas en un baúl, mi baúl de los recuerdos y con eso te deje ir, sé que algún día podré rehacer mi vida ahora que termine y soy casi una licenciada en Criminalística, no buscaré a alguien pues esa persona solita llegará como lo hiciste tú.

Jamás te agradecí todo lo que hiciste por mí, y aunque ya no estas, te lo digo ahora, gracias por enseñarme tanto, enseñarme taekwondo, llevarme al gimnasio contigo, a sentirme hermosa, por cocinar para mí, por cuidarme cuando estaba enferma, por llevarme contigo en los viajes en motocicleta, por pasar navidad y año nuevo conmigo, por festejar conmigo mi cumpleaños, por cumplir mis antojos, por llevarme al cine, y aunque parezca que nuestra vida era perfecta, no lo era, tuviste también errores como yo, pero al final siempre supimos solucionarlo.

Estoy pronto a hacer mi audición, y solo te pido que me ayudes, que me desees suerte pues la música es lo que más amo... Siempre serás un hermoso recuerdo que marcó mi vida en todos los aspectos, ahora comprendo tu frase “No te puedes quedar esperando a que alguien toque tu puerta para darte una solución porque jamás llegará, no toda la vida estará papá, mamá y menos tu novio para solucionarte la vida” que razón tenías, pues tuve que aprender muchas cosas solas y poner en práctica lo que me enseñaste.

No estoy segura si esta será la última vez que te escriba, pero si es así... Lo lograste, dejaste una huella en el mundo como siempre quisiste, y era tu temor no lograrlo, el mundo sufrió tu partida, dejaste ese hueco espantoso, dejaste tu marca en cada uno de nosotros, en todas las personas que te amamos y te extrañamos.

Dejaste muchas cosas inconclusas, y las terminé por ti, espero eso no te molestara, te dejo libre ya no quiero convertirme en un asunto pendiente, ya no quiero atarte a un mundo al que ya no perteneces, seguiré adelante, aprendiendo día con día de mis errores que yo espero no cometer más...

Adiós Emmanuel.

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