Wenclair [ONE-SHOT]

Palabras mudas

AU humano, aquí no existen los licántropos, gargolas, sirenas etc. Todos son humanos.

“No puedo decirte lo que siento con palabras, pero puedo demostrarte cuánto te amo con acciones. "

Lunes, el peor día de toda la semana para cualquier persona, debería ser ilegal que exista un día tan malo. Esos eran los pensamientos de cierta pelinegra cuando dicho día se acercaba.

—¡Merlina!, baja a desayunar —Grito eufórica su madre, mientras que abajo se escuchaba como su padre y su hermano se peleaban por la comida, ya estaba acostumbrada a esas mañanas tan ruidosas.

—Ya voy... —Dijo con desgana, sintiendo como aún su cerebro estaba medio dormido.

Soltó un pesado suspiro al saber que día de la semana era, enserio que odiaba los lunes.

—Otra tortuosa semana por empezar. —murmuro para si misma, mientras se quitaba las prendas que tenía puestas para tomar una ducha rápida.

No le tomo más de 20 minutos en alistarse para la preparatoria, se empezaba a cuestionar si valía la pena vivir.

—Buenos días querida. —Saludo su madre.

—Buenos días... ¿Pericles ya se fue? —Preguntó ante la ausencia de su ruidoso hermano.

—Se acaba de ir, ¿Vas a desayunar? —Dijo su padre, dejando aun lado el periódico que estaba leyendo.

—No gracias, compraré algo en el camino. —Sin decir nada más, la Addams salió de su casa con los ánimos por los suelos. Estaba pensando seriamente en escaparse un rato para poder disfrutar un poco antes de entrar a esa prisión llamada preparatoria.

Redirigió su camino hacia un pequeño parque donde se podía respirar tranquilidad, Merlina era una chica callada que no le gustaba llamar la atención o estar rodeada de gente, por algo ese era su parque favorito.

Se sentó en una de las bancas y cerró los ojos, respiro profundamente para luego soltar un suspiro, tenía demasiado sueño, anoche se había desvelado hablando con una de sus pocas amigas, Bianca, o bueno, apostando con ella.

—No puedo creer que me haya quitado 30 dólares... —Murmuró Merlina, no es que a su familia le faltará el dinero, pero la sola idea de haber perdido contra Bianca la molestaba.

Su mirada se poso en la banca que estaba situada a unos metros enfrente ella, en la cual, se encontraba sentada una chica de cabello rubio y tenía unos profundos ojos azules, parecía de su edad.

Sin darse cuenta la miro atenta a sus movimientos, parecía estar dibujando algo, pues borroneaba en su cuaderno y arrugaba tiernamente la nariz intentando que le saliera bien lo que sea que estuviera haciendo.

Merlina salió de su trance cuando la chica levanto la mirada, y se topó con los ojos de la Addams, la pelirubia la miro confundida, buscando atrás de ella a otra persona que estuviera mirando.

Merlina rápidamente fingió estar buscando a alguien más, cosa que la otra chica se creyó, y volvió la vista a su cuaderno. La de ojos azules miro la hora en su celular y pareció asustarse, rápidamente junto todas sus cosas y corrió con su mochila como si su vida dependiera de ello.

—Un momento... ¿Que hora.. —La Addams maldijo en voz baja, e imitó la acción de la pelirubia de hace rato. Genial ese sería su primer día llegando tarde, puede que odiara la preparatoria y los inicios de semana, pero no era una irresponsable.

Afortunadamente después de quedarse sin aire en los pulmones pudo llegar justo cuando su primera clase dió inicio.

—¿Dónde estabas?, Creí que no ibas a venir. —Hablo Bianca quien se estaba maquillando.