¿Creer?

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-¿Qué?

No podía creer lo que le estaban diciendo, cuando claramente Ushiyima era el mas protegido de todos, no podía comprender como pudieron herirlo tan fácilmente.

-Eso fue lo que mando a decir Satori, en estos momentos está siendo trasladado al hospital.

Lo que había que escuchar, entonces allí comprendieron las cosas sin sentido que aveces encontraban.

-Ya mandé a reforzar la seguridad, y a los omegas les pusimos más vigilancia, y ....

-¿Eso no es exagerado? -entro Nishinoya sonriente.

Sakusa negó, sabía que a Nishinoya, ni a Oikawa les gustaba tanto vigilante, pero era necesario.

-Es solo lo esencial -replico.

-Ya pero.....

Fue interrumpido por Oikawa, estaba molesto.

-Daichi, sabes que odio el exceso de guardias, y ahora están por cualquier lado que miro -se quejo

-Es necesario, primero atacan a Yamaguchi, y ahora a Ushiyima así que... -volvio a ser interrumpido por el castaño, en realidad Oikawa pocas veces le dejaba terminar de hablar.

-No me importa la vaca, solo quiero que los guardias dejen de vigilarme -e hizo su puchero que tan bien le salía.

-No, Oikawa, entiende que es por seguridad, a mí tampoco me agradan mucho pero será necesario -hablo Yakkun, mientras entraba al despacho de Daichi.

-Vale, si, pero dejen de entrar a mi despacho como si fuera suyo -dijo molesto.

-No pongas mala cara Daichi, son tu familia al final de todo -le hablo suavemente Sugawara, Daichi asintió, adoraba ver a su omega sonreír.

-Pero Kags.... Se abrieron paso el dúo raro, sería una larga tarde.

Aunque la mayoría de los omegas no querían los guardaespaldas, los alfas de ellos no les cedieron a sus caprichos, pero lo que hicieron fue que todos, absolutamente todos debían que estar muy bien cuidados, aunque fuese incómodo para todos.

Pero en otra parte......

-Tsk, maldita sea, se supone que sería más fácil acabar con esos omegas.

Estaba molesto, después de el ataque hacia el pelioliva, pensó que los alfas se centrarian en querer venganza, pero no había pasado nada de eso.

Ahora resultaba que les habían puesto más seguridad, y por lo tanto no podían actuar con toda libertad, pero mientras que el pensaba en como hacer para matarlos su mentor, apareció.

-Por lo que veo no has podido con esos simples omegas.

El alfa tembló, ¿Acaso no estaba en coma?, ¿Cuando despertó? El no lo sabía, y se supone que siempre lo iba a ver y jamás dio indicios de despertar.

-Señor Tanaka

Si, el padre de Ryunusuke Tanaka no había muerto, todo fue un plan armado, de hecho días atrás su padre había tenido un atentado en la cuál de allí había salido mal herido, pero logro sobrevivir y quedó en coma por un fuerte golpe en el cráneo.

-Mi querido hijo, no sirves para este negocio.

-Padre, ellos tienen influencias y son los mejores del mercado negro.

Se excuso, en realidad solo era una excusa barata, a pesar de todo los Kageyama, los Oikawa, los Sawamura, los Miya, etc... No tenían muchos nexos, y aunque estaban en la cima, tenían muchos enemigos.

-Si no sabes cómo acabar con los "mejores" -haciendo comillas con sus dedos -no creo que sirvas para mucho Tanaka.

¿Quién lo diría? Tanaka Ryunusuke había elegido la vía de traicionar a sus socios de crimen, y eso le costaría la vida.

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