Sueños Nocturnos

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Me desvaneceré entre la mañana al punto en que los gatos empiecen su propio espectáculo gatuno sobre los tejados, aquí ya es su propio territorio. Tal vez sea el arte que encarno sobre Vincent van Gogh tratando de pintar noches estrelladas, tratando de crear más arte, donde vive el arte. Eh aquí, veme recostado entre la pared, tratando de saciar mis propias preguntas, mis propias treguas fallidas.

A veces necesito caminatas a solas y reservar la sonoridad de mis cordales... una caminata hacia ninguna parte al igual que una noche estrellada, a la vez la naturaleza abrazándome. Y así poder apreciar bien lo que pocos pueden ver o temen observar.

Mis pasos se apaciguan y el ritmo de mi corazón se hace cada vez más calmado, el aire cada vez más frío y menos denso. Entre la yema de mis dedos, un cigarro consumiéndose, calada por calada. Y en mi bolsillo una pequeña caja con unos cuantos cigarros, sin darles ni una pisca de candela, ni un roce de tacto con ellos. Una calada por cada momento de alegría, una por los malos, una calada para mis más sinceros pésames y una última calada por mi pasado, esfumándose entre el tiempo sin mirar más allá de mis barreras mentales. Cada uno de ellos los saboreándolos y cada calada casi religiosa en voluntad propia y desmoronando la realidad desquiciantemente. Otros esperando su propio significado, aguardando el momento adecuado y hacerlos eludir contra la realidad, mientras causan en mí... un río de letras vacías derrochadas en altamar.

Cada humano contiene su propio hábitat natural. Todos con ideas soñadoras de un lugar analítico y arcaico entre los condecorados, esperando el momento adecuado para ir a calmar su propio caos.

Pues mi oasis son caminatas nocturnas en noches donde la psique despavora mis fantasmas, los cuales hacen mella en cada sonrisa, es mi propia contienda.


-RonaldCz

El Renacer de la Mente: Más Allá del Basurero del Pensamiento. «Edicion»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora